Punto Final

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Punto Final.

-¿Qué tengo que hacer para que vuelvas? Pregunto entre lágrimas Catherine Rolling. Ella siempre creyó que Steve estaría siempre para ella.

-No te diste cuenta pero, yo me canse. De esperarte, de no saber dónde estabas, de que te fueras sin siquiera decir adiós.

-¡quiero pedirte perdón! Sollozo la marin.

-No tienes perdón, porque no hay nada que perdonar, siempre supe lo importante que era tu carrera, lo que para ti significaba tu trabajo, y los sentimientos que tenías hacia mí. Lo lamento Cath pero realmente no sé qué haces aquí, la última vez que te marchaste te lo dije. –Ya no puedo esperarte más. Steve estaba mirando por sobre el hombro de la castaña. El Seal sabía que Catherine lo amaba, pero el ya no quería nada con ella, ella había decidido cuales habían sido sus prioridades. Y él las suyas.

Steve estaba feliz, por primera vez en mucho tiempo se sentía completo, feliz, capas de sonreír hasta en los momentos más difíciles, después de Años Steve Mcgarrett volvía a vivir, muriendo todos los días de amor por esa persona que fue capaz de demostrar que el amor verdadero, un amor puro y sin barreras podía ser para él.

-No ínsitas Cath, solo te dañaras a ti misma. Tal vez fue mi culpa el haberme entregado a ti, sin miramientos, el haberte amado todos esos años en los que tú te ibas de misiones, el entregarte mi corazón sin pedirte nada. Pero ya no hay nada aquí para ti.

-Podemos recuperar el tiempo perdido, ya no me marchare más. Suplico Cath.

-Y eso que estaba bien tiempo atrás, eran mentiras que nos decíamos para poder volver a vernos, reencontrarnos en un mundo donde solo conocíamos el dolor, la pérdida, y las misiones clasificas. Respondió Steve elevando la mirada al cielo y sonriendo. Pero eso mismo era lo que me impedía ver las cosas buenas que había a mi alrededor, los regalos que la vida me había hecho, y que por mi propia terquedad estuve a punto de perder. Ahora tengo una familia Cath, tengo un esposo que me espera en casa, unos niños que están acostados esperando que valla a contarles un cuento, mañana tenemos un almuerzo en familia. Mi vida ahora es esta Cath, y aunque te cueste entenderlo es mucho mejor que estar en el campo de batalla, o en misiones.

-Qué suerte tiene el, que suerte que Danno no se allá resignado contigo, que allá luchado por ti. Espero que seas muy feliz y que su amor sea para siempre. Respondió la castaña secando las últimas lágrimas.

Beso en la mejilla al hombre que fue su amor, y se dio media vuelta dispuesta a salir de la isla, habían pasado tres años desde la última vez que ella estuvo allí, por una misión con la CIA, ella ingenuamente creyó que Steve la esperaría. Pero el comandante era un hombre que había sufrido mucho en la vida, y si ella podía rescatar algo de todo el dolor que estaba sintiendo en esos momentos al sentirse rechazada, es que había sido capaz de ver los ojos de Steve brillar de una manera tan resplandeciente que solo le quedaba elevar una plegaria al cielo para que esa unión fuera bendecida.

Por qué no había hombre en la tierra que mereciera más la felicidad como la merecía Steve Mcgarrett.


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un one Shot que lo tenia guardado desde hace tiempo

One Shot McDanno 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora