capítulo 6 : Dracarys

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Los campos de Pelennor se había vuelto un campo de batalla entre Rohan y los Uruk-hai que habían atravesado Minas Tirith. Rohan le había dado frente a los Uruk, dejándolos sin muchas tropas, en un grito de supuesta victoria por los Rohinim, desde el horizonte se comenzaron a escuchar trompetas alzarse con gritos feroces. Los hombres del este, aparecieron con una legión y algunos montados en grandes elefantes de largos colmillos filosos. Los orcos restantes huyeron para sus lados con la aglomeración de mercenarios sin honor.
Theoden formó a sus soldados y espero al enemigo que se abalanzan a ellos como si fueran olas.
Rohan trataba de resistir pero sus soldados eran fácilmente derrotados por aquellas bestias enormes.

- ¡A sus cabezas o corten sus pies! - exclamó Éomer indicando a sus soldados lo que debían hacer. Así lograron acabar a algunos pero no era suficiente, Minas Tirith aún seguía siendo atacado por dentro y ellos estaban siendo acorralados en Pelennor.

Se sentían sin esperanzas y aún más cuando Nâzgul apareció con sus espectros alados chillando, aturdiendo a todos. Sin embargo, donde el sol salía cada mañana, apareció entre el ocaso un dragón que Rohinim reconocía perfectamente; rugió ferozmente haciéndose notar por el enemigo. De su lomo resplandecía la cabellera plateada quien iba inclinada hacia adelante controlando a Drogon.
Entonces se oyó como un eco que fue esperanza para los hombres y terror para los Uruk-hai:

- ¡Dracarys! - y Drogon rugío fuego; fuego que arrasó con el enemigo y quemó a la escoria Uruk y hombres del este.
El grito de esperanza se levantó entre los hombres de Rohan; alzando sus espadas, lanzas, hachas o arcos al aire recibiendo a Daenerys con gratitud.

Nazgul fijo su objetivo en ella y entre cuatro la atacaron; haciéndola fijar su vista en ellos. Drogon esquivo a los dragones oscuros y logró tomar a uno entre su boca , este luchaba por zafarse de la enorme boca del dragón más grande, Daenerys aprovecho la oportunidad y trepó el cuello de su hijo para dirigirse a su cabeza, empuñó su espada envuelta en llamas y se la tiro al espectro atorado que intentaba salir de las riendas; su espada se clavó en su ( lo vendría a ser ) rostro, este soltó un grito horrible y se murió de la misma forma, Drogon había roto el cuello del dragón oscuro y este cayó de gran altura al suelo. Daenerys extendió su mano a su espada envuelta en llamas y el fuego respondió al llamado de su ama volviendo a ella volviendo a tomar su espada con firmeza.
Aún no había terminado pues quedaban tres de ellos, Drogon mostró con autoridad su escamoso pecho y con el cuello bien erguido soltó un gruñido desafiante, los Nazgul se abalanzaron a ellos rodeando a madre e hijo.
Daenerys observóa con penetrantes ojos feroces a los jinetes, apretó el mango de su espada y con su única mano sosteniéndose a Drogon le indico que vayan hacia arriba una vez comiencen a atacar.

Y así fue.

Los Nazgul comenzaron a atacarla, sus dragones chillaba al mismo tiempo aturdiendo sus oídos y haciendo sangrar sus tímpanos, Drogon se quejó volando hacia arriba por entre las nubes siendo seguidos por los jinetes. Drogon surcaba el cielo rugiendo fuego sobre el creando una nube de humo y voló en zic zac distrayendo al enemigo, cuando menos lo esperaban, Drogon quien los azechaba en el gris humo, los atacó desde abajo, a dos los echo al suelo y se unió en combate contra los dragones, Daenerys no pudo hacer nada; por el feroz movimiento perdió su equilibrio y la larga cabeza de uno de los dragones que su hijo tenía entre sus garras le llegó a alcanzar y morder uno de sus brazos logrando echarla del lomo de Drogon, él se alarmó ante ello y con enojo arrancó la cabeza del contrario. Drogon chillo con desesperación volando rápidamente hacia su madre para agarrarla, casi sin lograrlo, entre sus alas estrellándose en el suelo, Dany fue resguardada en las alas de su hijo y solo sufrió golpes secundarios. Estuvieron así un momento hasta Daenerys reaccionó por el movimiento de su hijo, ella desesperada se levantó y verifico que esté bien, y efectivamente lo estaba. Soltó un suspiro aliviado al verlo pararse sosteniéndose en sus alas, viéndola fijamente y guiñandole con sus ojos soltando un resoplido al verla bien.

- Gracias - le sonrió y este hizo un pequeño movimiento de cabeza sin embargo sus ojos se fijaron en el cielo donde volaba sobre ellos el último dragón. Drogon gruñó mostrando sus dientes llenos de sangre, cubriendo a su madre; protegiéndola. Ella se giró y sus ojos se clavaron en aquellos tres jinetes negros, visualizo su espada en el suelo en medio de los dos. - Drogon... - este miro hacia el frente avanzando y dejando a Dany debajo de su pecho - Dracarys - el fuerte ruido del fuego se escuchó en todo Gondor. El dragón voló hacia el último de los oscuros que quedaba y Daenerys corrió entre el fuego sin quemarse.

Se deslizó en el suelo y tomo su espada que se prendió fuego al tocar su mano. Paso por debajo de uno de los jinetes y aún con el brazo lastimado, lo corto por la mitad; se irguió tomando con fuerza la empuñadura de su espada escuchando el horrible sonido distorsionado que hacían los jinetes al enojarse.
Los jinetes tomaron sus armas y comenzaron a pelear contra ella.
Uno tenía un enorme mazo que lo hacía lento pero con un solo golpe de él, la mataría; por lo que solo lo esquivaba y apartaba usando su fuego. Él otro usaba dos espadas con agilidad y fuerza.

Daenerys peleaba con ambos a la vez, utilizando como segunda espada el fuego que emanaba de la real; esquivaba , rodaba y contra atacaba. Drogon peleaba metros arriba suyo y el fuego que a veces expulsaba caía sobre ellos.

Los jinetes la tenían complicado contra aquella mujer , no obstante Daenerys perdía fuerzas por su herida y el uso excesivo de su fuego.

Los tres permanecían quietos en su lugar, a una distancia prudente; aunque no podía ver sus rostros sentía el odio que le tenían. De pronto se oyó un estruendo detrás de ella y la tierra templo, miro por sobre su hombro y vio a su hijo cómo arrancaba la cabeza del dragón.
Este giró hacia ellos y camino amenazante hacia donde estaba su madre; está sonrió y miro al frente y los jinetes retrocedieron unos pasos.

Drogon estaba furioso; lleno de irá por lo malherida que estaba su querida madre y Daenerys estaba de la misma manera al ver como el pecho de su hijo estaba lastimado con una herida de garras.

Cuando un Targaryen se molesta , prepárense para lo peor pues su fuego de cólera no lo calmaria ni el río Anduin.

Drogon corrió a la par de su madre, él rugió ferozmente el fuego apoyándose en sus alas y del fuego renació Daenerys empuñando una espada del hierro más fuerte y la otra del fuego más feroz. Apuñalando a ambos jinetes en su oscuro rostro. Al morir simplemente se desintegran tras soltar un espantoso grito desgarrador. Su mano dolían y su cuerpo retumbó ante sus chillidos; de ellos solamente quedaron sus oscuras ropas y armas.

Daenerys cayó de rodillas al piso y jadeo, Drogon se puso sobre ella, erguido en cuatro, protegiendo a su madre.

De pronto se oyó el grito de victoria alzarse con furor. La mujer sonrió levantándose con la ayuda de su hijo, guardo su espada y camino hacia los Rohinim y el raro ejército que el Rey legítimo de Gondor había traído.

MOTHER of DRAGONS - LEGOLAS GREENLEAF [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora