Capítulo 9

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La noche se hizo larga sintiendo el calor que emanaba de Juan Pablo en mi pequeño cuerpo.

Estábamos en una posición inusual que podría llamarse "cucharita" y sentía el gran peso de su brazos en mi abdomen, me sentía libre y a la vez protegida. Sin embargo, solo son suposiciones Nathalia y eso debes tenerlo en cuenta.

Me desperté por el sol y miré la hora en mi teléfono, son las 8:57 AM, debía levantarme y hacer el desayuno.

—Discúlpame Juan— dije en voz baja para no molestarlo— ten cuidado, el sol está algo fuerte.

Me detuve a mirarlo por un segundo, su cabello en el rostro lo hacia ver muy tierno.

—Espérame, no me dejes aquí— dijo entreabriendo los ojos y levantándose algo adolorido.

—Te ayudó— lo ayudé a pararse y luego se acostó en el sofá de la sala— este es mucho más cómodo y sol.

Vi a Simón y Nathalia, estaban haciendo el desayuno.

—¡Buenos días chicos! Pensé que aún estaban durmiendo.

—Queríamos prepararte el desayuno Nathalia— dijo Simón.

—Queremos ser amables contigo por lo que has hecho por nosotros Natha, además Simón y yo decidimos pedir algunas cosas para completar el desayuno de ustedes— comentó Nathalia Campos.

—¡Quién lo ve y a mi no me hace el desayuno!— habló Juan Pablo Isaza molesto.

—¡Yo solo le cocinaré a Nathalia porque ella me cae bien y usted no!— Simon lo señalo con una cuchara en la mano.

Los cuatro desayunamos y reímos sobre unos comentarios que hicimos del día anterior. Nathalia, Simón y Juan debían salir a su apartamento para continuar su día.

—Adiós Nathalia, hablamos luego— dijeron Nathalia y Simón al unísono.

—Oye Nathalia, te cuento que Pedro hablará contigo sobre el día que tendremos la cita...— Juan Pablo Isaza estuvo pensativo un tiempo— no, no. No es una "cita" discúlpame, es "el día con un integrante de Morat" — se corrigió— está mucho mejor.

—Tranquilo, me avisas por favor cuando será "la cita, no cita", sino "un día con un integrante de Morat" para tener el día libre del trabajo— dije bromeando, claramente.

—Lo siento, pero al menos me entendiste, adiós Nathalia— expresó Juan Pablo Isaza saliendo de mi apartamento— Pedro te avisa— repitió.

Juan Pablo Isaza P.

Flashback.

Nath y Simón se despidieron, y solo quedábamos los dos.

—Oye Nathalia, te cuento que Pedro hablará contigo sobre el día que tendremos la cita— ¿A caso dije cita?¡NO PUEDE SER!— no, no. No es una "cita" discúlpame, es "el día con un integrante de Morat"— me corregí— está mucho mejor

¿Este será el fin del hombre araña? Se terminó todo para mi.

—Tranquilo, me tiene que avisar cuando será la "cita, no cita", sino "un día con un integrante de Morat" para tener el día libre del trabajo— bromeó un poco.

—Lo siento, pero al menos me entendiste, adiós Nathalia— hablé y luego le dije— Pedro te avisa— para salir corriendo de allí.

Al entrar a mi apartamento, hablé con los que estaban presente.

—¡Chicos necesito su ayuda! Acabo de decirle a Nathalia que el evento de Morat era una "cita" pero claramente no es así— ¿Seguro, Juan Pablo?— el punto es que creo, pero no estoy seguro de que quiera una cita, ¿Podría ser?

No sabia que pensar, ¿Por qué le dije que tendríamos una cita?

—Yo te ayudaré, solo faltan dos días para que salgan, hablaré con Pedro y después persuadiré a Nathy— dijo susana— además me imagino que Laura me podrá ayudar— rió guiñándole un ojo.

Creo que ellas tienen un plan para que esto funcione, espero que no sea un problema.

Susana.

Decidí llamar a Pedro y comentarle sobre la "cita, no cita" de Juan Pablo.

Llamando a Pedro.

—¿Aló? ¿Pedro? Hablas con Susana.

Hola Susi, ¿Cuéntame en qué te puedo ayudar?.

—Pues... Quería ayudarte con el evento "de un día entero con un integrante de Morat", ¿Qué te parece?

—Susi discúlpame, te agradezco por las buenas intenciones, pero ya tengo todo el cronograma listo; además, creo conocer tu "ayudita".

¿Ahora qué hago?

Pedro, tu y yo sabemos muy bien todo lo que ha pasado Juan Pablo desde la última vez con An...— no me dejo terminar.

—¡Susana, no lo digas! Entiendo que tiene ese feeling pero esto es más serio porque estamos trabajando.

Esta bien, si necesitas ayuda con algo solo debes llamarme, buen día Pedrito.

—Gracias Susa, adiós.

—Adiós.

Fin de la llamada.

Volví con los chicos.

—Malas noticias, Pedro no me dejo ayudar, lo siento.

—Lo sé, tranquila. Lo presentía por lo que me había dicho antes en el día del evento— dijo Juan Pablo desde el balcón.

¿Qué le había dicho Pedro a mi hermano?

¿Está hablando en serio?

Pedro no deja florecer el amor.

•••

Nota del autor: ¡Ay, amigxs, yo si quiero que estén juntos!

Susana te apoyamos.

Les quiere, Natalia.

DORADA | Juan Pablo Isaza P.Where stories live. Discover now