🌊😳🦊

9.1K 498 326
                                    

Mini one shot yandere porque me dió la gana.

...

-¿Dónde estás ___? -Escucho el eco de su voz resonar por toda la bodega.- No me hagas perder la paciencia, y peor; el control.

-No juegues así con nosotros. Sabes que vamos muy enserio.

Definitivamente esto se salió de control cuando salí corriendo hacia acá. Grandísimo error el mío porque no encuentro el momento perfecto para salir de aquí.

Solo necesito que se aleje de la entrada, Giyuu es muy rápido y sería muy tonto de mi parte correr si él está cerca de mi salida. Oh, pero no es el único, Sabito quién también se me declaró al mismo tiempo, básicamente una confesión doble compartida. Los rechacé y nunca en mi vida esperaba que esto sucediera por parte de ellos dos. Aún recuerdo como el ambiente se puso tan, pero tan tenso, que cuando sus miradas se volvieron sombrías y retorcidas corrí como nunca.

Y cuando pensaba haberlos dejado atrás, parecían rayos corriendo hacia mi. Mi única escapatoria fue entrar a una bodega cerca de donde estaba, pero ahora necesito ir a otro lugar para que no me encuentren.

Siento pavor solo de pensar que me puedan matar por no haberles correspondido.

Ok, sus pisadas se escuchan lejos. Puedo hacerlo, solo debo confiar en que no me fallen mis piernas y podré salir viva de aquí, luego ir a un lugar con gente y... Llamar a mi padre para que venga por mi, o mi madre. Quien sea que me salve la vida de estos dos maníacos.

Cielos, tengo miedo.

-¡___! -Brinco en mi lugar del susto por su grito furioso.-

Enserio que nunca había escuchado a Tomioka gritar enfurecido.

-Tranquilo, la encontraremos. No puede esconderse para siempre. -Y al final de esa oración que logré escuchar, pegó una pequeña risa escalofriante.-

Seguro que me congelaba si la escuchaba muy de cerca. En fin, debí apresurarme, cualquier oportunidad es inevitable.

Decido asomarme un poco por mi escondite que queda frente a la enorme puerta del lugar. Nada. ¡Es mi oportunidad, vamos!

Corro como si de un maratón fuera y pronto me escuchan por mis pisadas poco audibles. Claramente debo evitar poner peso sobre mis pies.

-¡No irás a ninguna parte!

Fue todo lo que escuché cuando pude salir y poder seguir corriendo, hasta que me taclearon.

-¡Ahg! -Me quejo del dolor.-

Ruedo en el suelo hasta topar con una piedra enorme y me detengo. Dios, como dolió eso... Abro mis ojos y veo a mis dos perseguidores de pie a un metro de mi.

-¿Era tan difícil decir si? -Pregunta Sabito agachándose cerca de mí y poniendo su mano en mi espalda.-

-¿Por qué... yo? -Mis costillas duelen.-

-Porque te amamos. Nadamás. -Responde Giyuu.-

-Es estúpida esa respuesta. -Escupo mis palabras.-

-Lenguaje... ___, no deberías hablar así. Mucho menos a nosotros. -Regaña el de pelo melón y mi cara es de suma confusión.- Que linda espalda.

-Dejenme ir, no quiero tener nada que ver con ustedes. Nunca tuve interés en ser su amiga y ahora mucho menos su noviesita. -Aprieto mis ojos por una punzada en mi espalda debido a la presión de sus dedos en ella.-

-Realmente no nos importa lo que pienses de nosotros. -Se acerca el azabache.- De todas formas, eres nuestra.

-Nuestra tu abuela. Déjense de payasadas y ya superen esto. No le diré a nadie si me dejan ir.

-Siempre tan respondona... ¿Qué se le va a hacer? -Suspira el mayor.-

-Deberiamos enseñarle que ya no debe faltarnos al respeto.

-Calmate Giyuu, no te creo tan machito. -Me burlo.-

Luego de eso no dijeron más y me inmovilizaron. Me llevaron en un coche al parecer de ambos y llegamos a una zona apartada, con una cada de dos pisos con tonos grisáceos y azules. No está demás decir que me bajaron cargando cómo saco de papas y cuando llegamos, cielos...

-De todas formas no tienes motivo para luchar. -Miro a Sabito seria.- Nos deshicimos de tus amigos en un parpadeo.

-¿... qué? -Mi boca se va abriendo poco a poco.- No...

-Tu familia la dejamos así para que veas que no somos tan malos. La angustia no les hará mal, ¿Sabes?

-¿¡Qué hicieron, malditos!? -Me levanto furiosa.- ¡Pudranse!

Tontamente agarro la almohada y se la lancé con fuerza al mayor, hice lo mismo con el Tomioka. Ninguno puso defensa, dejaron ser impactados por los cojines y me miraron serios. Yo solo me decido a mirar al suelo apretando mis puños sintiendo la adrenalina.

-Los... Los odio... -Contengo las lágrimas mordiendo mi labio inferior.- Enserio los odio. -Susurro.-

-Haz lo que quieras. Estarás con nosotros a partir de ahora. -Me responde Giyuu.-

-Tomalo como algo para tu bien. El mundo es muy oscuro y obseno. Te harían cualquier cosa y nosotros estaríamos devastados. -Sabito me jala hacia atrás para sentarme de nuevo en el sillón y abrazarme por detrás.-

No pongo resistencia. Me siento débil e inútil que incluso si quisiera golpearles, no podría. Son dos contra uno, y para peor son hombres contra una sola mujer.

-Solo queremos alejarte de todo lo maligno. Tus amigos eran mala influencia, y siempre estuvimos de acuerdo con que tus padres hacían bien regañandote por la culpa de esos idiotas. -El azabache se arrodilla frente a mi, tomando mis piernas.-

Observo el techo. Ya no tengo qué decir.

-Todo esto es...

p o r  t u  b i e n.

...

Kimetsu No Yaiba [Escenarios/OS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora