Derecho a Tocar [Editando]

Capítulo XXXVII: "Let Yourself Go"

Al separarnos pude ver un brillo especial en sus ojos, se veía tan tierno, de sus labios brotó una sonrisita traviesa y llena de alegría, sonreí al ver su expresión y junté nuestras frentes, acaricié su cabello y deposité en sus labios un corto y cálido beso, el me sonrió al separarnos y se levantó, para acto seguido ofrecerme su mano, yo la tomé y me levanté. Y así con las manos tomadas, empezamos a caminar en dirección a la entrada. Cuando estábamos a escasos metros de allí una turba de paparazzis apareció, nos rodearon para atacarnos con miles de flash y a Justin lo llenaron de preguntas

- ¡Hey, Justin! ¿Ella es tu nueva conquista?

- ¡Justin! ¿Ya olvidaste a la última?

- ¿Ya le diste el brazalete?

Esta última pregunta me dejó un poco confusa, ¿brazalete?

Justin se abrió paso como pudo entre ellos y me tiró a mi tras de él, una vez que llegamos a la entrada la gente de seguridad abrió la puerta y una vez dentro, la aseguraron, afuera los flash seguían inundando el ambiente.

Cuando entramos me fije en que todos estaban sentados al rededor de una gran mesa, al igual que una gran familia, en otras mesas más pequeñas estaban el resto de los invitados compartiendo animadamente.

Al vernos entrar todos sonrieron y algunos de los chicos al ver nuestras manos tomadas le hicieron un gesto divertido a Justin, él solo sonrió. Caminamos hasta la mesa donde se hallaban todos nuestros compañeros, él me soltó la mano, me dió un beso en la mejilla y se fue a una mesa donde unos chicos le hacían señas, me quedé con una boba sonrisa allí parada mirándole hasta que él se giró, me miró regalandome una hermosa sonrisa, pero esta sonrisa tenía un brillo especial, era solo para mí, me sonrojé y me dirigí hasta donde estaba Antoniette mirándome con una cara entre confusa y feliz.

- Baño, ahora - no me dejó ni si quiera acercarme a saludar. Antoniette me arrastró hasta el baño a penas me divisó. Una vez que estuvimos dentro se apoyó en la línea de lavabos y me interrogó - Quiero todo, con detalle desde que te subiste a ese auto - yo reí ante su cara que reflejaba una mezcla de emoción y autoritarismo. Los recuerdos comenzaron a fluir a mi mente, arrugué la nariz al recordar la primera parte de la historia pero luego, instantáneamente me sonrojé al llegar a la última parte.

- Eah... bueno... - dije un poco confusa, no sabia cómo, ni qué contarle

- _______, todo - dijo un poco autoritaria y mirándome a los ojos

- Bien - dije y suspiré... honestidad ante todo...¿no?, cómo pude traté de ordenar mis ideas y le conté toda la historia con lujo de detalles, pero me reservé la parte en que Justin me contaba su historia, tampoco era quién para contar las cosas que la gente me confiaba.

Una vez terminada la historia Antoniette guardó silencio y mirando al piso, luego de un rato añadió

- Eah... bueno - levantó la vista y me miró - no sé qué decirte _______... es complicado

- Sinceramente, Antoniette - dije mirándole

- Sinceramente... no sé si... es que, a ver... yo... es decir, tú... o sea Justin... - hizo una pausa y al ver mi cara de confusión de repente soltó - no sé si Justin esté totalmente en sus casillas, no sé si esto sea bueno para ti, es decir, todos tenemos malos días pero si esto se repite, y se sigue repitiendo, creo deberás tener cuidado

- ¿Me estas diciendo que crees que Justin tiene algún tipo de... desorden? - dije entre confusa y un poco disgustada

- Es decir... tal vez, o sea quizá no sea para tanto, no es que te este confirmando que Justin es un loco demente con un trastorno psicopático, pero... no sé _______, lo único que te digo es que tengas cuidado, estés atenta a sus reacciones y si esto te empieza a afectar o te hace mal, solo terminalo y ya, tú eres tu propia prioridad - dijo mirándome a los ojos