El príncipe prometido

El príncipe y el ¿mendigo?

Loki se mantuvo en los brazos de aquel chico hasta que ya no sintió ganas de llorar. De alguna manera aquel le hizo sentir una tranquilidad que únicamente encontraba en su padre, cuando sentía temor corría a sus brazos para ser protegido.

Una vez que se sintió más calmado se soltó de aquel rubio, que en silencio le permite desahogarse.

—Quiero volver a mi casa... —sollozo pasando el dorso de su mano por sus ojos, de esta manera ocultaba las lágrimas que nuevamente brotaban.

Thor estaba realmente conmovido por el pequeño, era tan frágil que le hizo ser consciente de que no era más que un niño que necesitaba a su familia y que por los caprichos de un rey lo mantenían apartado. Su entrecejo se frunció de imaginar al hijo del rey disfrutando del lujo en la comodidad de su habitación mientras este niño corría peligro.

—Tranquilo, te prometo que te ayudaré a volver...

Trato de que sus palabras sonaran seguras, sin embargo tampoco conocía el camino de regreso.

«Lo correcto sería seguir el trayecto a donde se ve ese castillo, pero no se si aun estan esos lobos ¿dormirán de día? Yo espero que si. —suspiro mientras observaba con cuidado tratando de trazar una ruta rápida, Thor dudaba que estuvieran muy alejados, a final de cuentas no era la distancia sino el peligro lo que le preocupaba— ¡Bien, ya basta de pensar de mas es hora de regresar antes de que oscurezca!» se sintió determinado.

—Por cierto... ¿Cómo te llamas? —Pregunto al menor que miraba con temor los árboles.

—¿Ah? Soy Lo...—hizo una pausa mordiendo su lengua «¡Cierto! No puedo revelar mi identidad... eso pondría triste a mi papi, aunque no creo que este chico sea alguien que quiera dañarme ¿o si? Como sea no puedo romper mi promesa»— Lorenth... me llamo Lorenth, soy uno de los niños que vive en palacio... hijo de un mercader...

Mintió.

No le gustaba la idea de mentirle a quien le salvó pero su lealtad a su reino era mas fuerte, además no deseaba que aquel chico se sintiera intimidado por ser un príncipe.

«¡Lo sabía! Es un pueblerino que ha sido retenido para encubrir al mimado príncipe»

—¿Y tu? ¿Cual es tu nombre? No te he visto antes...

Pregunto Loki observando al mayor, ciertamente no era un rostro que hubiera visto en palacio y si estaba en palacio debía ser parte de la comitiva «¿Acaso es uno de los príncipes que vino a desposarme? No, no lo creo ¿Porque un hijo de noble se preocuparía por un desconocido?» Su amigo Frandal le dijo que los nobles de otros reinos no eran como ellos, estos solían ser príncipes y reyes egoístas que solo deseaban apoderarse de sus riquezas y este era el motivo principal por el cual en Jötunheim no solía celebrar matrimonios con ellos.

Aun así siguen las normas y costumbres al recibir a los reyes, por tradición se llevaba a cabo las pláticas aunque en los últimos años ningún matrimonio se concretaba.

«Rayos... no puedo decirle que soy un príncipe, no después de que se que es un plebeyo. Estoy seguro que sí sabe mi origen se sentirá intimidado... ¿Si le digo que soy un príncipe pensara que soy cruel como su rey? No, no quiero eso»

—Ah, bueno si eso es porque no pertenezco a este reino...—Titubeo armando en su cabeza lo que le diría— Soy el escudero de uno de los príncipes que han venido por la mano del príncipe Loki...— Mi nombre es... Steven.

Mintió dando el nombre más familiar que recordaba.

«Un escudero... ahora entiendo porque es tan ágil» Se sintió aliviado de que aquel chico no fuera un príncipe.