I Am Not A Lady [SIN EDITAR] -LIBRO1

Capítulo 5 "¿Estaré deprimida?"

-¡No lo eres Kaetheniss! ¡Tu no eres ninguna zorra y de eso estoy seguro! ¡Nadie nunca me había gustado! Pero tu... Tu no me gustas, tu me encantas.

-Suéltame... No lo diré otra vez. -Le advertí.

-Eres mía, no de nadie más. M-I-A Mía. ¿Se comprende? Y no, no te suelto.

Puto necio de mierda, sus palabras solo me hacen llorar más. Le dí una patada en la entrepierna y el me soltó mientras caia al suelo por el impacto de mi rodilla contra su... Eso.

Salí corriendo mientras seguía llorando, volteé a ver para atrás, el ya se había recuperado de mi golpe y ahora corria hacia mi. Corrí de nuevo hacia mi cuarto lo más rápido que pude y llegué a mi cuarto aún siendo perseguida por el. Cerré mi cuarto y me quité toda la ropa quedando solo en ropa interior y llorando me metí a la cama para llorar desconsoladamente.

La puerta se abrió y se cerró pero esta vez a mi habitación entró un Liam furioso y agitado seguramente por haber corrido detrás de mi. Se acercó a mi cama y se acostó a mi lado apresuradamente y me agarró sin darme oportunidad de escapar.

-¡Quédate quieta!

-¡No! ¡Suéltame!

-Déjame demostrarte que de verdad te quiero...

Dejavú....

-Eso dijiste hace 3 semanas y mira como estoy.

El no me dijo nada, porque ya se encontraba besándome de manera suave ya amorosa. ¿Ven porque no lo quería cerca?

No le seguí el beso, no quería que viera que soy debil ante el.
Al ver que no le seguí el beso el gruño sobre mis labios y me tomó de la nuca acercandome más a sus labios en señal de que el quería que le siguiera el beso, no lo hice, me resistí. Pensé en otras cosas, cosas que me dieran asco para no tener ese impulso de besarlo. Liam volvió a gruñir esta vez más desesperado y me acercó a el pero esta vez tomándome de la cintura acercándome a el (Más cerca imposible) Me besó de manera más fuerte, no me resistí. No pude, le seguí el beso de la misma manera en la que el lo hacía cuando me doy cuenta de que el empezó a bajar su mano de mi espalda hasta mis muslos, no... No voy a dejar que esto llegue tan lejos, me separé rápidamente de el y tomé su mano para detenerlo.

-Cuidado donde tocas.

-No me vas a negar que te gustó. -Dijo con voz ronca, mucho más ronca que antes, el estaba excitado, pero yo estaba asustada. No quiero estar cerca de el en este estado.

Pero por la mierda...

Es verdad.

No se lo puedo negar.

Me gustó, tanto como me gusta el chocolate y las galletas.

y las hamburguesas con extra queso

Sobre todo las de McDonalds ¡Son deliciosas! ¿Las han probado? A mi me encantan personalmente, lástima que no siempre sean tan grandes como a mi me gustan DE VERDAD SON DELICIOSAS.

Y las nuggets que venden allí. ¡Por amor a Dios! Son exquisitas.

¿Que digo? Me estoy desviando del tema.

Volviendo a la realidad...

-N-no me, me gust-tó. -Respondí con voz entrecortada.

-Mientes. -Dijo y volvió a besarme y volvió a bajar su mano hasta la misma zona de hace rato.

Ni mierda, no puedo con el... Pero eso no significa que me deje hacer cualquier cosa.
Lo empujé y lo miré fingiendo enojo.

-¡No me toques el culo!

El no me dijo nada y solo me miró de pies a cabeza...

Por

La

Recontra

Puta

Madre

Se me ha olvidado que estoy en ropa interior... Y esta lleva un montón de hamburguesas estampadas.

-Ahm... ¿Desde cuando estas semi desnuda?

Me puse roja ¿Cómo lo se? Siento mis mejillas calientes y la vaga sensación de encojerme y hacerme pequeñisima.

Ah...

-¿Yo te toqué en ropa interior? -Añadió sin vergüenza alguna.

-¡Vete! Antes que nada, yo no te he dado permiso para que entres.

-Estabas llorando.

-¿Y eso a ti que? Yo no importo, solo vete.

-A mi si me importas.

-Vete a la muy mierda Liam Zoelle.

-No creo que pueda.

-Ah si es verdad... Se me olvidó que tu eres la mierda.

El me tomó del brazo y me dijo casi en un susurro:- No me provoques Kaetheniss, eres mía. Que eso nunca se te olvide, no eres de nadie más. Solo mía. - Dijo lo último casi en voz alta y me dió un beso más.

-Yo no soy de nadie. -Dije y me solté de su agarre señalándole la puerta hechándolo, quería que se fuera y que nunca volviera, pero también quería que se quedara y nunca se fuera.

COÑO CARAJO PUTO.

Sin embargo, no puedo dejar de pensar en que me he mostrado fuerte hacia el. Liam salió de mi habitación después de darme una nalgada muy fuerte (La cual me dolió como el infierno) y se fue con una sonrisa mientras yo le sacaba mi dedo del medio y lo miraba fulminante, le valió mierda.

Me encerré en mi cuarto de un portazo y cerré la puerta con llave para que Liam no quisiera entrar, me tiré a la cama y empecé a llorar desconsoladamente otra vez.

Pero hay algo que no puedo negarle ni a él ni a nadie.

Por Dios...

Soy suya, soy jodidamente suya y de nadie más.

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Mamá Gomita, fuera.

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