|22°| Capítulo

182 14 4
                                    

Liraz 's Point Of View

- Familia? - reí sin ganas - Ustedes no significan nada para mí, es más si Lion no se hubiera entrometido, no hubiese dudado en arrancarte la cabeza - le hice saber - Tampoco son mis hermanas, yo ya tuve un hermano y está enterrado bajo 2 metros de tierra.

- Somos tu familia, te guste o no, eres una de nosotras - replicó Esmeralda - Tu lugar está al lado nuestro, este es tu <<hogar>> - extendió sus brazos hacia mi - Desde que me enteré de tu existencia eh anhelado nuestro encuentro, nuestro padre me reveló que no habías muerto, que la heredera seguía con vida. Fuiste llevada al mundo de los humanos para que Natalio no te encontrará - se acercó hasta mi y me abrazo - Siempre quise conocerte hermana, que estuvieras con los de tu clase, y ahora estás aquí.

- Yo ya tenía un hogar, una vida y una identidad - me retire de sus brazos - No seré falsa, no estoy interesada en nada de esto, lo único que quiero es me dejes ver a Gideon.

- Tú has tomado conciencia de lo que él te ah hecho? - pregunto - Sino hubiese sido por Lion, él te hubiera asesinado, no merece perdón alguno.

- Aún con todo lo que me has dicho, te parece que estás en posición de juzgarlo? - procedí a enfrentarla - Gideon, es lo único bueno de mi puta vida, y qué si se ha equivocado!? Tú no has sido mejor que él! - escupí - No lo volveré a repetir, déjame verle.

- Ya! Dejen el drama familiar para después! - Lion se interpuso entre ambas - Esmeralda, mi amor, deja que lo vea.

- << Mi amor>> - repetí - Vaya, así que juegas con todas? Primero me besas y luego corres hacía los brazos de mi hermana - reí sin ganas - Qué putada tío!

- Qué es lo que ha dicho Lion? - pregunto desconcertada Esmeralda.

- Tu príncipe, querida, depósito sus labios sobre los míos. Y no lo hizo una sino dos veces para ser exactos - dije con desinterés - ah, lo olvidaba, y también hubo lengua.

- Prometo que luego te lo explicaré, Esmeralda, tiene una explicación - dijo Lion - la misma asintió.

- Ordena a los guardias que dejen  pasarle - dijo sin importancia - Mi cabeza duele - llevo una de sus manos a su frente.

- Pues, yo que tú, me voy acostumbrando - sonreí - Suelo ser un dolor en el culo - Lion me sujeto de brazo bruscamente llevándome hacía los calabozos - Adiós hermanita! - le lancé un beso.

- Era necesario que dijeras lo del beso - me recriminó Lion

- Merece saber que le has puesto los cuernos - me encogí de hombros - Hubiese sido estúpida si dejaba pasar esta oportunidad, se lo merece por perra.

- Discutiré eso contigo luego - me hizo saber - Ahora verás a tu querido Gideon.

No había prestado atención a mi alrededor, el lugar era asqueroso, oscuro y frío. Después de todo, se trataba del sitio donde yacían las escorias y vete a saber quien más.

Mi corazón se detuvo, allí estaba él, encadenado como si fuese un monstruo. Tenía un aspecto horrible, había perdido peso, estaba de rodillas con la cabeza hacia abajo.

- Gideon! - lo llamé, no obtuve respuesta - Gideon! - reiteré - Qué esperan para abrir la maldita celda!?

Lion dió la orden y los guardias procedieron. Entre en ese maldito agujero para ratas y me puse de rodillas frente a él tomando su rostro entre mis manos.

- Gideon - pronuncié su nombre - Estoy aquí, ya se acabó, nos iremos a casa.

Princesa LegionariaWhere stories live. Discover now