Un verano en Busan 📷 Kookmin

Final - Amor en Busan

Con cuidado y en silencio me meto en la cama. Jimin respira lento, creo que recién acaba de quedarse dormido. 

Me da un poco de pena despertarlo porque se ve muy tranquilo pero ahora es mi turno de hacerlo. Con suaves caricias y besos como hizo él cuando se metió en mi cama. 

Lo primero que hago es abrazarlo por detrás. Pongo mi mano en su cintura y apoyo mi cuerpo en el suyo. Huelo su cabello en su nuca. Huele delicioso como siempre. Ah, extrañaba su aroma aunque solo hayan pasado tres días. 

- Mamá, qué quieres, no molestes. Ya no soy un bebé. - lo oigo quejarse y moverse un poco. 

Me causa ternura y algo de gracia. 

Acerco mi boca a su cuello y dejo un pequeño beso. Es allí cuando creo que se da cuenta que no soy su madre. 

Voltea de repente, asustado, y me mira. 

- ¿Qué carajos?! - exclama - ¿Jungkook? Casi me matas de un susto! 

Agarra la almohada y me golpea con ella. Yo río. Es la reacción exacta que esperaba.

- ¿Qué mierda haces aquí? En Busan, en mi cama, en el medio de la noche! - continúa haciendo una escena hasta que se calma y se sienta en la cama. 

- Tenía cosas importantes que hacer. - respondo.

- ¿Qué cosas? ¿Qué pasó? - me pregunta preocupado. 

- Nada malo. Quería hablar con papá y contigo. 

- ¿Qué? ¿Él sabe que estás aquí? ¿Cómo rayos entraste a casa? 

- Tu mamá me dejó entrar. Papá me trajo hasta aquí. - explico. - He venido en autobús desde Seúl. Tenía que venir. 

- No entiendo nada. Más vale que empieces a explicar porque todavía me late rápido el corazón del susto que me diste. 

- ¿Por qué no vienes y me abrazas primero? 

Me mira algo molesto, cruzado de brazos. Pero luego me sonríe y se acerca a mí. Yo abro los brazos y él encuentra su lugar entre ellos. 

- No puedo creer que hayas venido aquí así como si nada. No te esperaba. - comenta. 

- ¿Es una sorpresa buena o mala? 

- Mmm casi me matas de un infarto así que no sé…- se ríe mientras se acurruca más en mi pecho. - Obvio que buena. - añade después. 

- Amor, estaba preocupado por ti. Por nosotros. - empiezo a decir. Jimin me suelta y me mira a los ojos - Sé que estás triste por lo que pasó, pero...te he sentido distante de mí estos días, como si yo no fuese suficiente para hacerte sentir mejor. Ya sé que no puedo cambiar nada, pero no me apartes, por favor. Si no puedo hacer nada, al menos déjame acompañarte. 

- Oh, Kook…- acaricia mi rostro - Te amo. Perdón si te hice pensar lo contrario. Perdóname. 

Me vuelve a abrazar. Escucharlo me hace sentir mucho mejor. Realmente lo necesitaba.

- No sé. Me siento un fracaso. - continúa explicando - Yo soy el que no se siente suficiente. Supongo que solo quería estar solo, mis problemas y yo. 

- Mi amor, no eres un fracaso. Al menos lo has intentado. Eso vale muchísimo. Peor son los que nunca lo intentan como yo...bueno como yo antes. - me corrijo y sonrío orgulloso.

- ¿Antes? - pregunta confundido. 

- Le dije absolutamente todo a mi padre. - le cuento entonces.

- ¿Qué? ¿Cómo, todo? ¿Lo de la escuela de fotografía?

- Así es. Ya está. Lo solté todo.