De niña pertenecía a una de las familias mas ricas del mundo, su desgracia cayó cuando una noche unos hombres extraños entraron a su casa
Hoy en el mundo su nombre hace temblar a todos, inició como una sicaria pero no se quedo conforme con eso, desp...
Hoy es el día de ejecutar a Carlos de verdad que no quisiera hacerlo pero hay que silenciarlo como dice Annushka.
No puedo permitir que me esté cuestionando, me visto y bajo a la cocina, lo veo servirme el desayuno.
— Buenos días Carlos—
— Buenos días Olesha— me siento a desayunar y lo veo ir de un lado para otro.
— Oye Carlos voy a hacer la fiesta en mi casa del campo y voy a necesitar que me acompañes para que hagas algunos bocadillos—
— Claro ¿me mandas la dirección?— asentí él tiene su propio carro, termine de desayunar le envíe la dirección.
— Yo me voy a ir de una vez, ¿a que hora vas a llegar?—
— Como en media hora salgo de aquí por que necesito terminar algo— asentí y me fui hacia el garaje, saque mi carro.
Salí de la zona residencial, no es mucho tiempo el que me hago hacia la casa de campo pero aun así acelere.
Al llegar les pedí a mis hombres que se escondieran mientras ejecutaba a un preguntón ellos me obedecieron, cuando Carlos llegó me acerque a él.
— De verdad lo siento Carlos— él me miro sin entender pero no pudo formular ninguna pregunta por que uno de mis hombres le llegó por atrás y lo noqueó —Llévenlo al cuarto—
El cuarto al que me refiero es una bodega donde asesinare a cualquiera que capture, es una bodega subterránea que tiene varias salidas por que también es una vía de escape en caso de que la policía dé conmigo.
Lo cual es imposible ya que como he mencionado antes los tengo comprados, pero es una medida de precaución.
Llegamos a la bodega, lo ata de manos y pies a una silla no lo torturare solo le haré dos preguntas y después le daré una muerte rápida.
Por que es lo que él se merece, vacío una cubeta de agua fría en su cabeza y él despierta exaltado.
— ¿Donde estoy? Olesha explícame— lo mire.
— La que hace las preguntas aquí soy yo ¿por que cada vez que salgo a algún lugar me preguntas a donde voy?—
— Por que me preocupa que te vayas a meter en algún lugar peligroso—
— ¿Por que me haz espiado cuando hablo de ciertos temas con mis amigos?— él suspira.
— Por que se quien eras desde que solicite trabajar para ti— lo mire sin saber a que se refería — Yo trabajaba para tu padre Oleg era su mejor espía y cuando Annushka lo asesino y tu asesinaste a Adrik me quede sin trabajo por eso es que te seguí— me reí.
— Si trabajabas para Oleg ¿como es que nunca te vi?—
— Por que yo estuve en una misión de mucha importancia y me entere de ti por el mismo Oleg supe de ti desde el momento en el que te compro pero yo tampoco te conocía en persona solo por fotografías y Annushka tampoco me conocía por que Oleg sospechaba que no era buena idea que nadie me conociera me mantenía oculto— no mentía y he desarrollado un séptimo sentido para saber cuando una persona miente.
— Pues ahora tendrás que morir, lo siento Carlos pero ya conoces esto— saque mi pistola de detrás de mi espalda.
— Antes de que me mates concédeme algo— lo mire esperando a que continuara — Bésame por que yo me he enamorado de ti aun que eso tu ya lo sabes— suspire, ¿que podía perder?
Tome mis precauciones y deje mis armas en el suelo lejos de donde él pudiera alcanzarlas solo lleve mi pistola en la mano.
Me acerque a él y junte nuestros labios, el beso duro hasta que le di un balazo en la frente me manche de sangre eso es obvio.
— Bueno al menos tuvo la mejor muerte de todas— tire el cadaver a un lado después de desatarlo de la silla, Annushka todo el tiempo estuvo aquí por si no me atrevía a matarlo yo.
— Pues solo eso le podía conceder— miro el cadáver por última vez.
— Ven hay que dejar que los chicos limpien y se deshagan del cadaver, hay que celebrar— me reí y salimos de la bodega subterránea.
Pasamos el día tomando Vodka y cantando canciones en Ruso, después nos fuimos a dormir a mi habitación.
Despierto por el ruido que hace Annushka en mi habitación.
— Tienes que ver esto— encendió la televisión.
— Gracias a que el narcotraficante mas peligroso de México quiso recuperar su mercancía decomisada los militares lo han arrestado, el señor Ricardo Nava ha sido condenado a cadena perpetua y cumplirá su condena en una cárcel de Estados Unidos será extraditado por militares en 24 horas—
— Prepara a los hombres— ella me miro.
— ¿Para que?— me levante de mi cama.
— Tengo que matarlo no puedo permitir que lo extraditen por que de lo contrario no podría tomar su lugar como la narcotraficante mas temida— asintió y salió de mi habitación, me metí a bañar.
En lo que me bañaba diseñe un plan para acabar con él pero en el camino también tendré que acabar con algunos militares, salí de bañarme y fui a mi armario para vestirme para la ocasión.
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Me ate el cabello en una coleta alta por que hoy hacía mucho calor, salí de mi habitación con mi celular en la mano.
Llegue a la cocina, una de nuestras mejores asesinas es la que se encarga de hacer nuestro desayuno, los chicos llegan.
— ¿Viste las noticias?— rodé los ojos ante la pregunta idiota de Lalo.
— ¿Por que crees que estoy vestida así?—él me observo.
— Ohhh—
— Ernesto necesito que jaquees los sistemas militares para saber que rutas tienen en caso de que alguien intente rescatar o acabar con el narco ese— Ernesto saco la computadora que siempre lleva a todas partes.
— Ya estoy en eso— asentí y sonreí.
— Camila voy a necesitar que tu estes con nuestro piloto en el helicóptero por si necesitamos apoyo aéreo— asintió — Samuel tu te vienes conmigo, Lalo, Omar, Annushka y Said en la camioneta—
Todos los hombres que solicite para esta misión están aquí escuchando seguí dando órdenes a todos sin excepción tenemos un plan de escape en caso de que algo salga mal y un plan de respaldo para matar al narco Ricardo.
