Seven nation army.

Capitulo 20.

Capitulo 20.

"Burning flames"

Ese reloj parecía ir a una velocidad torturadora, cada tic toc lo sentía retumbar al compás de sus latidos desesperados, sus manos sudaban y ese escalofrió no paraba de estremecerle el cuerpo entero, sus manos sudorosas intentaban eliminar cualquier arruga que mágicamente pudiera aparecer en ese vestido color vino, ese vestido que había escogido especialmente para ella, un suspiro tembloroso escapó de sus labios y su mirada nerviosa viajaba de un lugar a otro en busca de calma, pero nada ayudaba, nada podría ayudarla.

-Cariño- Una voz resonó como eco en ella, pero aquellas sensaciones eran tan abrumadoras que no podía prestar atención a nada mas a su alrededor- ¡Camila, mi amor!- La voz suave de su madre la trajo de vuelta, ella intentó esbozar la mejor sonrisa ocultando el pesar que la albergaba, pero al notar la forma en que su madre la mirada, supo que aquel intento había sido en vano, agradeció que su madre no la presionara ni la cuestionara, aquellos dulces ojos tan parecidos a los suyos la miraban con tanta ternura y amor que Camila temió romperse.

No pudo hablar por mas que lo intentara, así que se limitó a refugiarse en esos brazos que tantas noches le hicieron falta, a pesar de tener tiempo siendo totalmente independiente, debido a la relación tan estrecha y fuerte que compartía con su familia, debía confesar que aun no se acostumbraba del todo al tenerlos tan lejos, la sensación de tener a su madre y poderla abrazar de esa manera tan reconfortante en esos momento donde más sentía perder la razón, sintiendo su alma estar tan desordenada, intentando no perder la cordura con cada nuevo latido, con cada sensación nueva, era tan difícil para aquella castaña en esos momentos mantener esas emociones a raya, aquel nudo en la garganta comenzaba a asfixiarle, esas dulces caricias y esos susurros en su oído diciéndole que todo estaria bien, estaban derrumbado todo en ella.

Nada iba bien, aquella cena ya se había enfriado, aquellas velas ya se habían consumido, esas copas ya estaban vacías, algunas personas ya se habían marchado, pero ella seguía con la maldita esperanza de verla llegar, una esperanza que poco a poco se iba convirtiendo en desilusión, en desesperanza.

-Estoy segura que tendrá una buena razón por la cual a demorado tanto- Camila solo fue capaz de aferrarse mas a su madre, hundiendo su nariz en su cuello, tragándose el nudo en su garganta, sinceramente no sabía cómo sentirse, había planeado esa noche por semanas, imaginando cada detalle, intentando que cada uno fuese memorable para ella, pero no había rastro de aquella persona, de esa mujer por la cual había intentado hasta lo imposible esa noche.

Los ojos preocupados de aquella mujer viajaron a los de su esposo que miraba toda la escena desde la entrada del comedor, con sus brazos cruzados y una expresión de pesar al ver a su "Pequeña" sufriendo de esa manera, ambos compartieron una última mirada que hablaba por si sola, para después acercarse a ellas, uniéndose a ese cálido y necesitado abrazo. Sin poder evitarlo una lagrima rodó por sus mejillas y Camila apretó los ojos con fuerzas intentando retenerlas... ¿Estaba sobre actuando la situación? ¿Estaba siendo demasiado dramática? Pero mierda, sin duda su primera "Plantada" había sido jodidamente memorable, sin duda ella jamás la iba a poder olvidar.

Camila tomó todo de ella para recomponerse, no quería que sus padres notaran el poder tan grande que esa chica causaba en ella, no quería que notaran lo mucho que su corazón le dolía en esos instantes, así que con todo su pesar, rompió aquel abrazo, rogó por que esas lagrimas no se volvieran a derramar, imploró que el nudo en su garganta la dejase hablar.

-Creo que será mejor cenar de una vez, no creo que mi papá pueda soportar un minuto más sin comer- Dijo con una expresión divertida, pero aquellos ojos apagado delataban su interior, aquel hombre suspiró acercándose a su hija depositando un casto beso en su frente, Camila no tuvo mas remedio que dejar de pretender