"La Promesa" [Charlie X Alastor] [CHARLASTOR]

†Capítulo 12†

—Alastor, ¿por que no te gusta hablarnos sobre tu pasado?

Una vez dentro del hotel, Charlie tuvo él gran valor para preguntarle a Alastor él por que no contaba nada acerca de su vida pasada, tenía una gran coriosidad por saberlo, aparte, quería ayudarlo a que esté de a buenas consigo mismo al desahogarse con alguien

—por que si lo hago, cariño, sentirías una gran lástima por mi, y lo que más odio, es que me tengan lástima -con la sonrisa de siempre, pero, con el ceño fruncido- así que deja de preguntarme acerca de eso -le dio la espalda y comenzó a caminar-

—¿acaso tienes miedo de recordar algo?

Al escuchar la pregunta de Charlie, me quedé estático, si, la verdad es que he tratado de olvidar como mataron a mi esposa y en él estado en la que pude encontrarla...no quería que ella notara mi sufrimiento más mayor, así que solo solte una carcajada amarga

—yo no tengo miedo de recordar nada, dulzura, solo quiero seguir siendo un secreto para todos -sin verla salió de ahí-

Seguí mi rumbo, hasta que pare en la azotea del hotel, se podia ver gran parte de la ciudad pentagrama, siempre con gritos, los bares lujosos, las empresas de pornografía, y claro, el gran pentagrama en el cielo, todo aburrido como siempre, guíe mi mano hacia mi pajarita en donde se encontraba mi broche, lo saqué lo lo abri para ver la imagen de mi Charlotte...Sonreí sinceramente al verla para soltar un suspiro pesado, la extrañaba demasiado...apoyó su rostro

—¿quien es ella, proxeneta? ¡Galán! -dijo una conocida voz detras de él para palmearle fuertemente la espalda haciendo que, este, además de asustarse, solatara el broche al vacío-

Alastor vio como su sombra de inmediato bajaba para agarrar unos centímetros la sombra del broche para volver a subir con este y entregárselo al demonio ciervo, el cual se lo volvió a colocar en su cuello para girar su cabeza pero no cuerpo y mirar a Angel

—¿q-que mierda...? -Angel Dust retrocedió varios pasos al ver como Alastor ya giraba su cuerpo y hacia aparecer su cetro- t-tranquilo, antes no le pasó nada ¿no?

—te recomiendo que corras...-comenzó a haber la distorsión en él ambiente y él demonio ya tenia en ambas cuencas de sus ojos, una antena de radio, y su sonrisa ensanchada- mi afeminado AmIgO -su voz también cambió-

En él instante en que Angel iba a correr una fuerza lo tomo del cuello y lo elevó del suelo para hacer más presión ahí, si, efectivamente era Alastor él cual lo estaba ahorrando con sus poderes, la distorsión comenzó a hacerse más extensa, todo él hotel comenzó tambien a ser testigos de esta, Charlie quien estaba registrando a los clientes junto con Vaggie se alarmaron, pidieron de favor a sus clientes que no se alarmaran, que pronto acabaría todo, cuando se comenzaron a escuchar gritos en la azotea y ambas fueron a ver, Charlie iba primero y Vaggie detras de ella con su lanza ya lista para atacar,  se escucho un fuerte golpe contra él suelo aún en la parte de arriba, corrieron alarmadas hasta llegar allí y pudieron ver como es que Angel estaba siendo torturado por él demonio radio, Charlie, muy preocupada se puso en medio de los dos defendiendo al arácnido y deteniendo él ataque de Alastor, este se quedó sorprendido ante el imprudente acto de la princesa, pero aún así trataba de apartarla a como de lugar, más esta ponía resistencia abrazando a la araña.

—¡por favor, Alastor, para! -dijo sin más para soltar las lágrimas ante el terror que tenía, sin soltar a Ángel- para...te lo suplico...

"Te lo suplico" fue la frase que calmó al demonio, esa maldita frase, la frase que dijo su Charlotte antes de morir a manos de esos bandidos, antes de que la violaran y mataran junto a su hijo, se puso ambas manos en la cabeza evitando tener en mente aquel recuerdo que pudo ver gracias a aquel libro, con su típica sonrisa imborrable pero casi pequeña se fue de ahí, al llegar a su habitación, tranquilamente cerró la puerta sin hacer ningún alboroto, y se sentó en él sillón con una mano en su cara, cubriendo sus ojos, justo cuando olvidaba aquello, Charlie lo repite, se vio tan idéntica...tan...idéntica...tal vez deba prestarle más atención a la princesa, ya que, muchos le han dicho el parecido, y el, al no querer que las comparen, no lo admitía, pero para ser sinceros, el tambien veía un parecido, pero su orgullo no lo permita admitirlo...miró su cuaderno de notas, lo tomó, y lo abrió, eran los nombres que tenian para su hijo o hija...cerró de golpe la libreta y la lanzó a alguna parte de la habitación, unas horas después, pudo salir ya más calmado de ahí, así que se dirigió al libing, donde Angel Dust ya tenia las vendas correspondientes y Vaggie cambiándole algunas vendas, y antes de que de otro paso hacia el bar donde su compañero, Charlie se puso en frente de el con una mueca.

—tienes idea...¡¿de lo que le hisiste a Angel!? ¡Pudiste matarlo!

—cariño, lo único que puede matar a un demonio es el arma de los ángeles, solo lo iba a dejar inconsciente y con algunos huesos rotos -lo dijo como si nada-

—¡pero claro que si! -Vaggie tambien se puso al lado de Charlie para ponerle la lanza en él cuello de Alastor- ¡tu, presumido, desagradable , bocón de mierda! ¡¿esta es tu famosa ayuda!? ¡Charlie también pudo resultar herida, pero protegió a Ángel por que le tiene un gran aprecio!

—¿Y eso que tiene que ver en esta charla? -Alastor ladeó la cabeza sonriendo-

—Tiene mucho que ver, Al -dijo la heredera al trono- en este hotel estamos para apoyarnos unos de otros, no para golpearnos ¿entiendes?

—entiendo, cariño, pero no quiero al arácnido cerca mio de nuevo. Casi pierdo lo que mas valoro, ¿entiendes?

—se llevaran bien, pero no vamos a separarlos, van a tratar de hacer amistad -Charlie cruzó los brazos- y yo me encargaré de eso

—lo que digas, cariño -y la rodeó para irse al bar y pedir un vino suave-

La noche en él infierno llegó y todos los habitantes iban a sus casas para "descansar" si así se llamaría estar en accion con las mujeres de por ahí, en fin, pero eso no era en él hazbin hotel, los recien llegados se encontraban durmiendo y nuestros demonios se encontraban yendo a sus habitaciones, excepto Charlie, la cual se encontraba en la cosina preparándose con café con unos mini pastelillos, el día la había dejado exhausta, y necesitaba un momento de relajación con sus postres, además, se le ocurrió que si tenían una pequeña cafetería, los clientes podrían saborear las delicias de los postres, así que con ayuda de sus ayudantes, Razzle y Dazzle, y sus poderes acabaron de construir una pequeña cafetería, cerraron la de Husk, ya que le tenía planeado un nuevo horario, al igual que, horneó pastelillos para sus ayudantes y puso muchos en el mostrador, solo faltaba que ya llegara el siguiente día.

[...]

—¡¿y mi bar?! ¿¡por que esta cerrado?! -Husk estaba muy molesto, pues la princesa le habia dicho que hoy no estará en funcionamiento-

—tranquilo Husk, si lo abrirás mañana, pero hoy quiero que me ayudes en la cafetería, así será, un día a la cafetería y otro al bar -le sonrió-

—de acuerdo, pero no me hoy a acostumbrar...-se entró a la cafetería- perra... -susurro-

Él día pasaba, los clientes llegaban y la cafetería se llenaba, solo que, Charlie tubo que dejar de encargada a Vaggie pues, no había dormido toda la noche por hacer la cafetería y los postres, además de atender a los clientes, en su oficina se recostó en su sillón y se acurrucó para dormir un momento...a unos minutos después, el demonio de la radio entró con unos papeles y al verla en ese estado, sonrió con ternura para acercarse y cobijarla con una manta.

—dulces sueños, Charlie

Continuará...