「𝙁𝙤𝙪𝙣𝙙 𝙔𝙤𝙪」©ミ 𝙇𝙖𝙧𝙧𝙮 𝙎𝙩𝙮𝙡𝙞𝙣𝙨𝙤𝙣 (𝙎𝙞𝙣 𝙚𝙙𝙞𝙩𝙖𝙧)

CAPÍTULO IV

Abrí los ojos de a poco y parpadeé un par de veces, el alfa rizado estaba mirandome fijamente al igual que Amalia.

Esperen, ¿Qué hace él aquí?.

Me senté de inmediato en el sofá y lo miré esperando una explicación.

- Te desmayaste, pero no te golpeaste. Te agarré a tiempo, esta pequeña se preocupó mucho por ti.

- Bueno, gracias. - murmuré. - Ya puedes irte, no puedes estar aquí.

- ¿Qué? ¿Por qué?¿Pasa algo?. - preguntó y en otra ocasión le hubiera respondido pero una ola de calor me hizo estremecer.

- Necesito que te vayas. - esta vez hablé más fuerte.

- Pero... Estás en celo. - soltó un leve gruñido haciéndome soltar un jadeo. - Omega.

- No, vete. - miré a Amalia. - llama a Zayn. - ella asintió y corrió hacia mí habitación.

- Déjame ayudarte. - su voz estaba más ronca y su rostro se encontraba a centímetros del mío.

- No. - traté de alejarme pero fallé en el intento, el vientre me empezaba a doler y mi omega lloraba por pasar el celo con el alfa.

- No puedo dejarte, mi alfa no lo permite. - su olor de hizo más pesado y sus ojos se oscurecieron.

- Lou, Zayn ya viene en camino. - informó la cachorra y asentí.

- Esperalo en tu habitación y no salgas hasta que él esté aquí. - a duras penas hable y ella desapareció.

- Omega...

- A mi habitación, ahora. - solté entre jadeos, el alfa de raza pura no esperó ni un segundo más y me cargo.

Sentí la suavidad de mis sábanas debajo de mí y gemi ante los toques del alfa por todo mi cuerpo.
Mentiría si dijera que es la primera vez que tengo relaciones sexuales con un alfa, pero había escuchado que un alfa de raza pura no se podía comparar con un alfa cualquiera.

Fui desprendido de mi ropa quedando indefenso ante sus ojos, él no esperó más y se quitó la ropa quedando completamente desnudo. Su ya dura hombría se erguia orgullosamente, su cabello se pegaba a su frente y me miraba con deseo.

Se colocó entre mis piernas y apoyó su peso en sus brazos, besó mis labios con urgencia y abrí levemente la boca para darle acceso a mi cabidad, su lengua jugaba con la mía sacándome muchos suspiros. Sentia ya mi entrada muy lubricada y mi hombría necesitada de atención, que claro el alfa no dudó en dármela.

- ¡Louis!. - gritaron y recobré la conciencia en ese momento.

Miré a Zayn unos cuantos segundos antes de que el alfa gruñera y me cubriera con su cuerpo evitando que me vean completamente desnudo.

- Z-zayn. - murmuré y el alfa gruñó aún más fuerte haciendo retumbar mis oídos.

- Fuera. - el alfa demandó haciéndome temblar y sé que a Zayn igual, pude ver a Liam sacarlo antes de que el alfa de raza pura se enojara más. - Tú eres sólo mío, omega. - habló aún con su voz de alfa para luego besarme con desenfreno.

- Esto no está bien. - hablé a duras penas luego de separarme del beso.

- Lo sé, sólo déjame ayudarte.

- Lo siento, pero no puedo. - evité mirarlo a los ojos.

Estás siendo estúpido, es nuestro alfa. No lo alejes.

Mi omega gruñía dentro de mí y sólo lo ignoré, al igual que estoy ignorando mi necesidad de tener al alfa dentro de mí y recibir su nudo.

- No puedes alejarte de nosotros, sé que tu omega se siente igual a mi alfa, ellos quieren estar juntos.

- Esto es imposible, moriría si se enteraran los...

- Ya lo sé, pero no pasará, yo no permitiré que te hagan daño. - repartió besos en mi fuente de olor haciendo que soltara pequeños gemidos.

- ¿Lo prometes?. - murmuré.

- Lo prometo, omega. - respondió de vuelta mirándome a los ojos y eso fue suficiente para mí.

Me entregué a un alfa que sólo había visto una vez y al cual ni siquiera conocía, pero sentía como si lo conociera hace años, como si el estar con él fuera correcto.

Por una vez en mi vida me sentí seguro, tranquilo y querido.

[...]

Mi cabeza estaba a punto de estallar o bueno, eso es lo que sentía. Me moví entre los brazos del alfa que me envolvían para quedar frente a él, aún dormía y se veía realmente lindo a pesar de tener el cabello revuelto y pegado en su frente.

Acaricié todo su rostro con las yemas de mis dedos con cuidado de no despertarlo. Estaba actuando por instinto y aún así era consciente de aquello, también que habían posibilidades de que el alfa no se acordara o simplemente se iría como si no hubiera pasado nada.

Sentí un dolor en mi pecho y de inmediato dejé de acariciar su rostro, me levanté de la cama y me coloqué una bata para tapar mi desnudez. El alfa se veía profundamente dormido, así que dudaba que se despertaría pronto.

Salí de la habitación y caí en cuenta que no había nadie, de seguro Liam se llevó a Zayn y a Amalia a su casa, luego les pediría unas disculpas.

Entré al baño y me saqué la bata, entré a la ducha y dejé que el agua recorriera mi cuerpo, mientras pasaba el jabón por mi cuerpo imagines de los días que pasé con el alfa se reprodujeron en mi mente. Moví levemente la cabeza y eliminé esos pensamientos de inmediato, después de un rato ya estaba completamente limpio oliendo a jabón y no al aroma del alfa.

Volví a la habitación y muy a mi sorpresa encontré al alfa sentado en la cama, alzó la mirada y me sonrió, se levantó de la cama mostrando su desnudez y me sonrojé de inmediato, con una mano me agarró de la cintura acercándome a él y con la otra acarició mi mejilla, no esperó más y me besó quitándome el aliento, sin duda alguna no esperaba que hiciera eso.

- Buenos días, mi omega. - habló luego del beso, su voz era ronca, eso me hizo estremecer de pies a cabeza.

- Bue... - su celular sonó interrumpiendo mi saludo y causando que el alfa se alejara de mí.

- Tengo que irme, omega. - habló luego de mirar su celular y no contestó la llamada.

- Si, como sea. No es como si fuera tu obligación quedarte, después de todo tú y yo no somos nada.

- Omega...

- Sólo...vete. - le di la espalda.

- Arreglaré esto, pero no ahora.

- Vete. - el alfa suspiró pesadamente y escuché que caminaba fuera de la habitación hasta que la puerta principal fue abierta y cerrada.

Me dejé caer en la cama y grité de pura frustración, fui un tonto al imaginarme que tendría algo lindo con el alfa. Vaya que soy un estúpido.