14: "Buzo".

594 32 6
                                    

T/N

- ¿Vamos? -Me preguntó Mauro agarrando una botella de agua.

- Vamos. -Me coloque la capucha del buzo negro de Tomas. No me culpen, él me lo presto y la colonia que usa es riquísima; personalmente siendo mujer me gusta más el perfume de lo barones.

Decidimos ir a la empresa con Mauro para grabar un tema juntos. Desde hace bastante tiempo veníamos hablando acerca de esto mas nunca se había presentado la oportunidad.

- Y cuando saque el plato del microondas era un jugo burbujeante ¿me entendes? ¡Había derretido un bife en el microondas! -Terminó de relatar su historia.

- Sos la única persona a la que se le ocurre cocinar un pedazo de carne por cincuenta minutos en el microondas. -Abrí la puerta de mi estudio y él empezó a toquetear todo lo que veía mientras yo prendía un cigarro sentada en el sillón.

- ¿Esto es un teclado? ¡¿Con distorsionador!? Esto es el paraíso ¿cómo no me habías mostrado esto antes? -Se sentó conmovido en la silla gamer mirándome.

- Sabía que te iba a gustar.

- Che, ¿al final pasó algo entre vos y el chino? Porque yo sé que siempre se estuvieron tirando onda, eh.

- Dios, no.

- Bueno, recuerdo cuando a los dos días de relación la encontré besándose con otro.

- Esa chica era una estúpida, no entiendo porqué poronga no te conseguía una chica de verdad buena.

- Solo esperó a la indicada. Vení y ayúdame a producir esta futura obra maestra.

Estuvimos un rato produciendo pero resulta que este chico siempre tiene hambre entonces me ofrecí para ir a la cafetería y buscar algo para comer.

Apague mi cigarro antes de entrar en la cafetería.

- Hola Norma, ¿cómo andas? ¿Tu hijo? -Salude a la señora que se encontraba atendiendo.

- Oh, hola linda. Yo bien y mi hijo también, estudiando ¿vos? ¿Llevas algo más?

- Acá, componiendo. Y si, dame ocho ramens, por favor.

- Enseguida. -Colocó los dos paquetes de galletas, las ocho botellas de agua y la botella de agua grande para Mauro y yo junto con los ramens.

- Gracias, nos vemos. -Salude y me aleje con dirección a la sala de ensayos de los chicos ya que había recibido un mensaje de Hobi hace dos minutos diciendo que estaban entrenando sin parar y dudaba que salieran para comer entonces que mejor que llevarles comida a ellos y a su pobre coreógrafo que tiene que aguantar al brownie.

Toque la puerta y abrí estaban todos sentados en el piso estirando. Les sonreí levantando la bolsa.

- Sabía que me necesitabas Hobi. -Lo mire.

- Eres lo mejor que le pasó a la empresa. -Me miró con admiración.

- Gracias, ya sentía que me iba a morir desnutrido. -Dijo esta vez Jimin acercándose a mi a lo que yo le tendí un ramen.

- ¡Biscochito! ¡Te extrañe! -Jungkook me abrazo. Era como un perro, una vez te conoce y agarra confianza no se te despega. Más tierno.

- Bambi, te extrañe. -Correspondí.

- Siempre llegas cuando más te necesito. -Dijo SeungDeuk, su coreógrafo.

- Lo se, lo se, me amas. -Les di un ramen a cada uno.

- ¿Te vas a comer los dos paquetes de galletas? -Preguntó Nam- Sabes qué muchas calorías te pueden caer mal.

- Sabes qué soy capaz de bajarme quince paquetes de galletas pero esta vez tengo que sacrificar uno.

El rap no es para mujeres. YOONGIWhere stories live. Discover now