No estuve publicando porque me fuí de viaje al Himalaya, y esto mismo me hizo feliz... Por lo tanto no tenia despechos para demostrar, pero si tuve tiempo de pensar, reflexionar, analizar y extrañar.
Viste cuando estas atrás de un gato asqueroso? Que le revoloteas y no te pasa cabida? Bueno. Y viste cuando tenés un mosquito rompiendote las pelotas y vos no le pasas cabida porque estas concentrada en el gato hijo de mil puta? Y resulta que el gato te usa y no te habla más, mientras vos quedas como una pelotuda, don mosquito a pesar de todo sigue ahí, con vos. Entonces te pones a pensar... "¿Vale la pena insistir con el pendejo este?" "¿Merece mis lágrimas?" "¿A cuántos me tengo que coger para sacarmelo de la cabeza?" "¿Cuántos pedos me tengo que agarrar para superarlo?"
Y cuando todo parece ir mal y que cupido y dios arman un plan para destruirte... Aparece el mosquito. Y estas enojada, desepcionada y con autoestima baja, no le das mucha pelota pero mosquito sigue ahí, no sabes porque, pero mosquito esta.
Llegas a la conclusión de que el gato es un aprovechador y un pelotudo, y cada vez que escuchas su nombre tu mente, de forma involuntaria, repite "morite puto". Entonces mosquito te empieza a gustar, ya no te parece molesto, hasta lo ves como un bicho lindo con el que te gusta hablar y pasar buenos ratos. Y él esta, te banca histérica y loca, con rayes y feliz, bailando en la cocina y desafinando en la ducha... Te quiere.
Y es ahí cuando llega el momento de irte y mosquito, ahora mariposa, no quiere que te vayas pero te desea lo mejor. Tus horas de viaje hacen que pienses en él, los días de ocio hacen que lo extrañes. Estas hasta las manos. Pero estas bien.
Volvés y sigue ahí, esperandote... Y es en ese momento en que te das cuenta el tiempo que perdiste, y la hermosa persona que casi dejas ir por andar detrás de un imbecil.
No pierdas tiempo... porque siempre estamos todos mirando para adelante y no nos damos vuelta para mirar al de atrás, que nos quiere en serio.
