Capitulo 16

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La noche se estaba dejando ver, la hora de irse se acercaba, y pese a las quejas de los niños que se encontraban allí, sus padres decidieron que era mejor volver a casa, y por ello tomaron las manos de ellos para después despedirse de los integrantes de la familia, para finalmente tomar camino a sus respectivos hogares. Jungkook le daba las cajitas sorpresas, que pastillas se encontraban dentro y una que otra cosa que eran juguetes.

Un suspiro sale de sus labios y, pese a que estaba cansado, la sonrisa que luego apareció allí, era obra de que todo el esfuerzo que hizo por el cumpleaños de su hija, había valido la pena. Su corazón había latido orgullosamente, estaba totalmente enamorado de su hija, realmente verla feliz, era la única opción de ello.

Se sentía feliz de que su hija pudiera ser feliz con él, pese a todo, pese de lo que sucedía con su madre, ella se había divertido aquel día. Jungkook tras desearles una feliz noche a su niña y a su madre, se dispuso a limpiar el pequeño desorden que se instalaba en todos lados. Podría haberlo hecho en la mañana siguiente, pero sabía que iba a despertar algo cansado, y ese día quería pasearlo con su hija.

Se acercó a las paredes para quitar las serpentinas, una decoración que en todo cumpleaños debía de estar, además de los globos, los cuales le hizo un agujero pequeño, para que no sonara en el momento en que las reventaba, ya que si las hacía despertaría a su hija, y no lo deseaba, no después de tener un día tan ocupado.

Luego se acercó a la mesa en donde un pastel que estaba cortado se veía, lo cual lo tomó desde abajo, levantándola y así ir a la nevera y guardarla allí con cuidado. Luego llevó los vasos de plástico hacia donde estaba el basurero, y los que estaban con el líquido dentro, simplemente los vaciaba en el lavaplatos para luego votarlos, y luego con los platos de la misma índole. Sin embargo, mientras que lo hacía una pequeña sombra se hacía mover por el patio, y con cautela mira por la ventana que estaba cerca. Podría ser un ladrón, y de tan sólo pensarlo se preocupó.

Escucha un sonido que provenía desde la sala, como si alguien entrara a la casa, y por ello rápidamente se dirige hacia allí, dejando que la bolsa cayera en ese lugar de la cocina, tocando el suelo.

-Hola - dijo el joven, sosteniendo una copa con un líquido dentro, del que parecía vino - tú y yo tenemos que hablar. - la seriedad que se establecía en el rostro de aquella persona, decía que quizás era cierto. Jungkook no era de esas personas que dejaban que extraños entraran a su casa, pero creía que lo meritaba-

-Primero me gustaría saber quién eres tú - más que una pregunta, esto sonó como una orden - y segundo..¿Qué haces en mi casa? - esta vez fue pregunta y entonces esperó al hombre para que hablara -

-Por favor siéntate y hablaré, mientras que estés parado no podré decirte nada.

Jimin se encontraba puesto sobre el mueble de donde Chanyeol cocinaría. Él le gustaba mirarlo, siempre era algo maravilloso de ver, más cuando la sorpresa podría estar cerca, aunque claro primero tendría que organizar alguna sorpresa para así también invitar a sus amigos cercanos, para finalmente pedirle que haga lo que tenía que hacer, es decir, pedirle matrimonio.

Chanyeol se sentía nervioso, demasiado. Sin embargo, no lo demostraría como quería, porque joder, su novio se merecía lo mejor del mundo. Así es como lo sentía.

El brillo en sus ojos se dejaba ver, tal como los de Jimin, eran dos adolescentes enamorados, o al menos eso era lo que decían las lenguas de las personas que lo miraban.

-Te amo ¿sabes? - empezó a decir el alto, creando que Jimin levantara sus ojitos - te amo con demasía, con todo mi corazón, te amo con cada centímetro de mi cuerpo, te amo con el corazón. Eres mío Jimin, y no sabes lo feliz que me haces sentir - fueron las palabras que salieron de sus labios, mientras que se acomodaba en medio de las piernas del pequeño. Acarició en sus mejillas con suavidad -

-También te amo mi amor, te amo con cada parte de mi cuerpo, más cuando hacemos el amor, porque significa que esa pasión sigue ardiendo, jamás me canso de estar entre tus brazos, porque amo estar de esa anera contigo mi amor.

Despues de decir esas palabras, ambos se habían besado con suavidad, creando que su pasión diera inicio entre esa habitación, en donde la cocina era propietaria. Jimin se sintió de alguna forma en su gloria del deseo. Y, Chanyeol se sintió valorado por el precioso chico que yacía en sus brazos. Lo amaba sin duda alguna lo hacía.

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¿Qué creen ustedes que sucederá?

¿Quién creen ustedes que es el hombre que le pide a hablar jungkook?

El otro capítulo, se darán cuenta del porqué.

También aprovechen de traer pañuelos.

Y disculpen mi tardanza, solamente no había tenido la oportunidad de publicar ayer. Estoy trabajando en un nuevo proyecto.

Espero que puedan leerla.

¡Gracias por su apoyo!

¿Es tarde?  ➻ Kookmin  [T 1&2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora