Memorable [BL]

5.- "Desastre"

Dos chicas sujetaban de los brazos a Duke, mientras la joven pelirroja caminaba enfrente al lado de Garreth. Duke estaba molesto, quería apartarla de inmediato, pero sabía que no estaba en posición de hacer algo así, no hasta que Garreth correspondiera a sus sentimientos. Sin darse cuenta, llegaron a un café que estaba cerca de su departamento, tomaron asiento quedando uno frente al otro.

—«Mi vida debe estar siendo manipulada por un demonio o la mala suerte» —pensó Duke.

Quería tener la oportunidad de estar frente a Garreth, pero no de esa manera, no con ellas presentes y mucho menos con esa chica siendo tan afectuosa con él. Duke sentía un agudo dolor cada vez que lo veía tan cerca de esa chica, su frente se arrugaba debido a la enorme impotencia que experimentaba, quería huir de ese lugar, pero no podía hacerlo, estaba en medio de las dos jóvenes que lo arrastraron hasta esa situación impidiéndole moverse.

—¿Es tu color natural? —preguntó la chica a su lado derecho.

—Sí, ¿por qué?, ¿no parece natural? —cuestionó Duke.

—Al contrario, puedo ver que es natural, muy diferente al de Wendy —respondió la chica.

—Muy graciosa. Si nos vamos al estricto sentido de los colores, mi cabello si es rojo y el de Duke es naranja.

—Sí, pero él no se lo pinta. Es pelirrojo natural —la chica tocó uno de los mechones de Duke.

En ese momento, Garreth se levantó de inmediato y fue hasta el mostrador para esperar su orden.

—¿Qué pasó?

—Creo que fue por nuestros cafés —dijo Wendy.

—Garreth está más serio de lo normal —mencionó la de la izquierda.

—Si, tal vez le moleste ya no ser el único chico atractivo en el grupo.

—Qué tontería —expresó la pelirroja —. Él no le daría importancia a algo así, además para mí él es el más apuesto de todos, sin ofender, Duke.

—«Tu existencia es la que me ofende y por supuesto que es el más atractivo» —prensó Duke.

—Duke, ¿tienes novia? —preguntó la joven estrechando el brazo derecho del pelirrojo.

El contenedor con las bebidas calientes fue puesto de golpe sobre la mesa por Garreth, el cual no dijo una sola palabra y regresó a su sitio. Ellas tuvieron la idea de que ni siquiera alguien como Garreth podía soportar las altas temperaturas y por ello se apresuró en dejarlas sobre la mesa.

—¿No has respondido? —instó la joven.

—No tengo novia, pero si estoy enamorado de alguien —respondió Duke.

En ese instante, Duke miró a los ojos a Garreth, su expresión era tan seria como el tono en sus palabras, Garreth estaba sorprendido, sus ojos se ampliaron y su mente se quedó en blanco. El bullicio de las otras mesas, desapareció por un momento, solo el sonido del viento fue perceptible en ese instante que parecía durar más de lo que en verdad era. El silencio se volvió incomodo, Duke tomó su bebida, dejó dinero en la mesa y le pidió a la joven a su lado que se apartase para poder irse, con la excusa de que debía hacer algo más.

Se apresuró para poner distancia, era demasiado difícil tenerlo cerca y no poder alcanzarlo. Algo había cambiado, quería hablarle como antes lo hacía, tomar su mano y abrazarlo con fuerza, lo que era lo suyo, pero existía una barrera invisible que Duke no podía traspasar, una que le impedía acercarse tanto como quería. Al pensar en él, sus labios que permanecían serios se transformaban en una sonrisa. Los recuerdos de hace tres años eran su único motivo para sonreír. Aunque en ese momento, pensar en Garreth dolía demasiado, sus labios hacían una extraña mueca, como si estuviera conteniendo con dificultad esa enorme tristeza, tenía miedo de dejar salir sus lágrimas porque no sabía si podría controlar su flujo y terminaría por ser una experiencia desastrosa.