Memorable [BL]

1.- "Mi vida después de ti" (Pov Duke)

Aquella época, aún la recuerdo bien...

Dejar a Garreth fue como dejar mi vida entera, me sentía como una simple corteza sin nada más. El viaje que mi padre me obligó hacer me pareció eterno, como si le hubiera dado la vuelta al mundo y al bajar del avión mi teoría cobró sentido. Llegué a una tierra extraña, me sentía completamente solo, rodeado de desconocidos, de personas con un estilo de vida diferente al mío. Su forma de hablar era rara, su acento era distinto a lo que solía escuchar, pero hablábamos el mismo idioma.

Con dificultad me dirigí a la dirección que mi padre me había dado, el cual era un gran edificio que al tenerlo frente a mí solo pude pensar en que pasaría mucho tiempo en ese lugar, un año que fue una eternidad. Cuando realicé lo trámites para mi estancia en ese lugar tenía la esperanza de que algo saliera mal y debiera regresar a casa, para mi mala suerte no tuve problema alguno. Estuve en ese internado durante un año, solo uno, pero mi padre no me permitió regresar.

Cuando llegué por primera vez al internado intenté llamar a Garreth, necesitaba escuchar su voz aunque tuviera prohibido hacerlo. No me importaba la ridícula imposición de mi padre ni la diferencia de horario, pero su número no estaba en mi lista de contactos. No solo faltaba ese número, tampoco tenía el de Ari, tenía únicamente el número de mi casa y el de mi papá.

Pensé que debía tratarse de un error, lo apagué y encendí varias veces hasta que me di cuenta de que no era mi móvil. El mío tenía una leve marca de golpe en la parte superior y el que sostenía en ese momento no. Tuve la idea de que mi papá había cambiado mi celular para asegurarse de que no tuviera ningún tipo de contacto con Garreth.

Me pareció absurdo que hubiera hecho algo así, pero todo lo que él hacía me parecía lo mismo, en un momento de poca lucidez medité de dónde había heredado mi locura y la respuesta obvia fue él. Estaba demasiado molesto, con mi padre, con todo y en un impulso lo llamé, creí que no me respondería, pero lo hizo. Traté de hablarle en un tono adecuado, sin embargo, de un momento a otro perdí el control y comencé a gritarle. Él confirmó lo que ya imaginaba y su cinismo me hizo enfurecer todavía más.

—A mí no me hablas en ese tono, mocoso. Soy tu padre, te di una orden y la tienes que cumplir —me gritó y colgó de inmediato.

Estaba demasiado enojado, más que con él, conmigo mismo. En aquel entonces me concentraba en otras cosas y olvidé memorizar el número telefónico de Garreth. Me sentí como un tonto, uno que fue manipulado fácilmente por su padre, me hizo dudar de la profundidad de mis sentimientos hacia Garreth y todo a mí alrededor se tornó oscuro. Estaba de manos atadas, no podía hacer otra cosa que soportar, estaba en un lugar alejado, no tenía el dinero necesario para viajar de regreso y de hacerlo no tenía hogar al cual volver, mi única opción era resignarme, cumplir con lo pactado y esperar que mi padre también cumpliera. Qué iluso fui.

Lloré por mucho tiempo, en silencio, cuando nadie estaba a mí alrededor, todo se volvió muy solitario sin Garreth. Hubo ocasiones en que mi mente se distraía por las tonterías que mi compañero de habitación hacía, en otras circunstancias no hubiera tolerado a una persona como él, pero aquello que me desagradaba de ese sujeto mantenía ocupados mis pensamientos y hacía que el tiempo no pasara tan lento.

Mi compañero de habitación no era la clase de persona que podría tener de amigo, ni siquiera le ofrecí mi amistad, él solo lo dio por hecho y yo no tenía el ánimo suficiente para discutir con alguien tan obstinado. Fue demasiado el tiempo que estuve alejado de Garreth, ese tiempo parecía no tener fin. Él ocupaba mis pensamientos y aunque traté de mantenerme completo, no pude evitar que mi problema regresara en breves momentos. Lo supe porque tenía pérdida de memoria, esos recuerdos faltantes me indicaban que aún no superaba esa etapa en que mi personalidad se dividía y pensé que quizá jamás sería una persona completa.