Capítulo 12

525 60 27
                                    

El lunes comenzó con un Elliot completamente agotado. No había logrado dormir bien desde hacía cuatro días, desde que se había cruzado con Olivia. No dejaba de darle vueltas a sus palabras, tampoco dejaba de pensar en lo hermosa que se veía y en cuánto tiempo había desperdiciado negando lo que sentía por ella.

Llegó al precinto con el peor humor de todos, pero al entrar a la sala principal su mundo cambió completamente, la alegría invadió su cuerpo. Olivia estaba apoyada en su escritorio mientras conversaba muy animadamente con Fin y Munch, y entre risas les decía cuánto había extrañado esas locas conversaciones.

—Buenos días —dijo él con una sonrisa de oreja a oreja.

—Buenos días —respondieron todos.

El rostro de Olivia se transformó al verlo, su sonrisa desapareció.

—Buen día —dijo de manera áspera y tomó asiento frente a su escritorio.

Fin y Munch se dieron una rápida mirada cómplice y volvieron a concentrarse en su trabajo sin emitir comentario alguno.

Elliot dejó su chaqueta en el respaldo de su silla y se sentó frente a su compañera. No pudo evitar observar sus movimientos durante algunos minutos, sus ojos yendo y viniendo sobre las líneas que leía en un expediente, el bolígrafo agitándose entre sus dedos, la forma sutil en la que mordía el interior de su labio inferior. Todo. Absolutamente todo lo volvía loco.

—Maldita sea —murmuró ella cuando el bolígrafo escapó de sus dedos y terminó golpeando el suelo.

Elliot se agachó para recogerlo al mismo tiempo que Olivia, pero no logró tomarlo antes de que ella lo hiciera.

—Yo puedo sola, Elliot —replicó llevando una mano a su costado. El dolor de su costilla rota apareció ante el brusco movimiento.

—Lo sé.

Cragen salió de su oficina para dar aviso sobre un nuevo caso y, sin saberlo, evitó que se librara una nueva pelea entre sus detectives.

—Cap, con Fin aún estamos investigando el caso de Leia, la chica violada en la Universidad de Columbia —dijo Elliot.

—Bien, Munch ve tú.

El sargento miró a Olivia y luego a su capitán con muchas dudas rondando su mente.

—Olivia, tú te quedarás aquí por un tiempo, aún estás a prueba —afirmó Cragen ante la pregunta no formulada de John.

Ella asintió aunque realmente no estaba de acuerdo.

—Okay, iré solo —dijo Munch— ¿Qué habrás hecho para hacer enfadar a Cragen y que te mande a estar sentada todo el día? —preguntó mirando a Olivia con una pequeña sonrisa.

La detective no dijo nada, le devolvió la sonrisa con un gran esfuerzo y desvió su mirada, tenía miedo de que si hacía contacto visual por mucho tiempo, alguno terminara descubriendo su horrible secreto.

(...)"No irás a ningún lado perra"(...)

(...) "¿Es así como te gusta?"(...)

Sacudió su cabeza tratando de alejar la voz de Philip y las imágenes que la golpeaban.

Esperó a que todos salieran al campo e ingresó a la oficina de su capitán.

—Olivia, ¿En qué puedo ayudarte?

—No sé para qué me aceptaste de nuevo si no vas a dejar que trabaje en algún caso, ni que ayude a Munch, aún cuando estás corto de personal —soltó algo enfadada.

Rompecabezas de Amor [PAUSADA]Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz