Two Birds (Damian x Raven)

1- Un día mas

Era un nuevo día, nuevamente te habías despertado a la misma hora de manera consecutiva por casi un año entero en la torre de los titanes, bostezaste de mala gana sabiendo que hoy se venía otro aburrido día de rutina, cuando intentaste levantarte te sorprendiste ya que tu cuerpo y tu mente estaban bastante cansados, y ni siquiera tuviste tiempo para replicar ya que caíste nuevamente en la cama sin que tu se lo hubieras ordenado a tu cuerpo, probablemente debido  al supuesto  cansancio que estaba pasando tu cuerpo.

-¿Cómo diablos estoy cansado?  No recuerdo haber dormido mal añadiendo que dormí a la misma hora de siempre...- inclusive al hablar tus palabras salían lentas y sin energía, parecías un niño que no quería ir a la escuela y se quería quedar en cama todo el día.

"Supongo que una ducha ayudara a quitarme este cansancio" aun tenías un dolor de cabeza fuera de lo normal y bastante profundo para lo que estabas acostumbrado, te llevaste las manos a la cabeza en un reflejo por la agonía de ese dolor que estaba incrementando al paso de los segundos.

-Definitivamente necesito una ducha- Dijiste entre quejidos por las pulsaciones que te estaba dando tu cerebro haciendo una tarea tan mundana y normal como levantarse estaba pareciéndote una tarea mas difícil que vencer a Deathstroke nuevamente, hiciste un esfuerzo para alcanzar el baño, desvestirte y poder entrar a la ducha, pero ni siquiera con el agua fría recorriendo tu cuerpo entero fue suficiente para tratar de mitigar tu dolor.

-Pff, ni aun con todo esto mi cuerpo ha despertado, sigo estando demasiado cansado para ser normal-  te dieron ganas de reír por lo lento y la falta de vigor en tu voz, pero apenas tuviste ese ligero cambio de pensamiento por encontrar algo divertida tu situación, una ráfaga de dolor insano se movió a través de tu cabeza, tanto fue el dolor que sentiste, que te hizo caer de rodillas al suelo agarrando tu cabeza con tus manos,  sumando que gracias al esfuerzo que estabas realizando y al dolor  que sentías, empezaste a jadear de dolor.

-Solo iré a la cocina por algo de comer- Dijiste casi siseando tus palabras por la sensación, lograste salir de la ducha, colocarte ropas nuevas y salir del baño, cuando estabas a punto de salir de tu habitación tu vista se fijo en el reloj que tenías en la mesa de noche al lado de tu cama, enfocaste un poco mas tu vista y para tu sorpresa el reloj marcaban las 2 de la tarde.

"Qué demonios..." Ahora estabas más confundido que antes, tu siempre te levantabas  mas tardar a las 6 AM todos los días, pero como estabas teniendo un día de mierda, mejor dejar pasar por esta ocasión la hora en la que apenas lograbas despertar.

Fuiste directo a la cocina sin prestar atención a nada o a nadie, para tu mala fortuna tu cuerpo por lo que parecía no podría caminar mucho mas de lo debido, así que justo cuando llegaste a la mesa,  simplemente te sentaste en el taburete y colocaste tu cabeza en tus brazos sobre el mesón para tratar de descansar un poco de tu situación.

-Damian, ¿Sabes siquiera que hora es?- Escuchaste una voz suave, que estaba al parecer a unos pocos metros de ti, levantaste un poco la cabeza para confirmar tus sospechas, era Kori.

-Ah... sí claro, buenos días Kory- lo dije en el mismo tono de antes, y además con menos energía que antes, luego, tras pensar un poco lo que acabo de decirle a la líder, abrí los ojos de sorpresa y moví bruscamente mi cabeza para mirarla de mejor manera e intentar arreglar lo que dije, decisión que para las circunstancias en las que me encontraba, fue pésima.

-A-Arhg maldic-ción- Refute en un tono esta vez molesto y adolorido llevando nuevamente mis manos a mi cabeza, Kori no tardo en saber que no estaba bien y se acerco a preguntarme lo obvio-¿Oye Damian, estas bien?-Era algo obvia la respuesta -Si Kori solamente estoy cansado, no te preocupes- respondí aun con mis manos enterradas en mi cabello, sin mirarla supe que me estaba dando esa típica mirada de compasión y preocupación que siempre tenía, así que simplemente me trate de levantar e ir al refrigerador para tomar un jugo o lo que sea que me encontrara.

-Damian, ¿seguro que estás bien?- volvió a preguntar Kori en un tono esta vez preocupado,intente ignorarla ya que mi dolor estaba aumentando al momento que escuchaba cualquier cosa, antes de poder abrir el refri, por la puerta principal entro Rachel, no hay que decir que para el estado embobado en el que te encontrabas la visión de la chica demonio no ayudaba nada, te le quedaste viendo por unos momentos seguramente con una cara de muerto viviente, obviamente ella no tardo en notar que la estabas viendo, aunque fue grata tu sorpresa cuando al notar tu mirada sobre ella, que cambió su semblante frío e indiferente a uno más cálido.

-Hola Damian, creo que no hace falta recordarte la hora que es, no es así?- te pregunto con una pequeña risilla que te ladeo un poco, pero al parecer ni te habías dado cuenta del tiempo que paso de su primera pregunta a la siguiente-Oye chico maravilla...¿Estas bien?- cuestiono con una mirada mas cercana e íntima, y tu sin saberlo estabas mirándola como un bobo, cuando al fin recobraste el poco control que te quedaba de tu cuerpo, agitaste un poco la cabeza y le respondiste en el mejor tono que pudiste.

-Hola Rachel, si estoy bien no te preocupes- cada palabra que salía de tu boca te hacía retorcer mentalmente de dolor, en el momento en el que respondiste te fijaste en el rostro de la chica demonio, no sabías porque pero hoy estaba mas hermosa de lo usual.

Al darte cuenta de tu pensamiento irracional e inapropiado te bofeteaste internamente para detener estos pensamientos inapropiados e irracionales.

"¿De verdad eran irracionales?"

-Oye Damian, ¿Seguro que estas bien?, normalmente no respondes con tanta precaución hacia los demás- "Solo cuando se trata de ti", gracias a ese último pensamiento un ligero sonrojo se asomó por tus mejillas, que diablos pasaba contigo este día, no tenías la respuesta  a esa pregunta seguro.

-Si Rachel estoy bien, de verdad lo estoy solo... solo me levante cansado- al parecer tus palabras no convencían del todo a la chica demonio, ya que te miraba extrañada, seguramente era porque eras un muerto andante?, naa, nada que ver.

-Damian creo que estas mal de verdad, nunca te levantas a estas horas, te ves desordenado, te quedas pensando cada palabra que digo y ademas ni siquiera te pusiste zapatos al salir de tu cuarto-Miraste sorprendida a Rachel, para luego inmediatamente mirar tus pies y efectivamente, no tenias zapatos, solo un par de calcetines negros, volviste a subir la mirada hacia Rachel para disculparte pero otra oleada de dolor masivo y punzante se presento de nuevo, esta vez no pudiendo aguantar el dolor y caíste de nuevo de rodillas con tus manos en tu cabeza otra vez, sabías que te iban a preguntar más cosas y a preocuparse mas por ti de manera innecesaria, o tal vez no tanto, de todas formas nunca te gustaba parecer debil.

-¡Damian! pronuncio Kori y Raven al unísono mientras se acercaban a mí para ayudarme a levantarme, después de ayudarme a reincorporarme trate de liberarme de su agarre, no era un niño enfermo que no podía caminar por su cuenta-Ni se te ocurra Damian- dijo Rachel molesta, al parecer se dio cuenta que quería zafarme de su agarre, pero en ese tono molesto pude distinguir un poco de preocupación y confianza, sin que yo lo quiera me sentí un tanto feliz por eso.

Me sentaron en el sofá principal del salón y Rachel estaba revisando si tenía fiebre o eso parecía que estaba haciendo, -De verdad Rachel estoy bien, no tienes que preocuparte- Dije con un obvio tono de dolor que no engañaba ni al más tonto del mundo, -No Damian, no estas bien, así que dinos que sientes ahora mismo para que podamos ayudarte- dijo Raven esta vez con un tono firme que no daba lugar a quejas, así que sin dar mas a cuenta, me rendí.

-Simplemente me duele la cabeza, n-no creo que sea tan grave- nuevamente cada palabra pronunciada era un infierno en mi mente, te empezaste a sentir mucho más cansado y tenías una sensación de debilidad recorriendo cada parte de tu cuerpo.

Querías escapar de ahí, así que te levantaste aun con las quejas de las 2 mujeres por esa acción, fuiste al mesón para beber un poco del jugo que te habías servido anteriormente, cuando tomaste el vaso estaban entrando a la sala Garfield, Jaime y Dick, por lo visto estaban conversando sobre si la pizza con piña era buena o no, te saludaron y estabas a punto de devolverles el saludo, cuando  tu cuerpo te abandonó por completo y caíste de lleno al suelo.

¡DAMIAN! escuche a Rachel gritar mi nombre antes de que se volviera todo negro y no pudiera ver ni oír nada.

"Su risa es muy dulce"pensaste antes de desvanecerte por completo.