Capitulo Cinco

9K 1.4K 952
                                    

Si de lejos el castillo ya se veía inmenso no pude ni dimensionar que tan grande era hasta que estuve frente a el. Parecía verdaderamente como un castillo de cuentos de hadas, y más que un cuento de hadas me recordaba al castillo de Hogwarts... Y si pueden abrirse portales entre dimensiones como si nada lo mínimo que puedo esperar de todo esto es mi barita mágica.

No solo era el castillo lo que maravillaba, sino todo lo que lo rodeaba. Estaba rodeado por casas de estilo tudor, muy rustico. Era como estar en el cuento de la Cenicienta.

—Vamos, hay que bajar — me avisó TaeHyung. Me ofreció su ayuda para bajar que con gusto acepté.

—¿En verdad vives en ese castillo? ¿ese? ¿ese de allá? — lo señalé emocionado. Él sólo me sonrió y asintió. — es que ¡wow! ¡es tan grande y hermoso! ¡Nunca había visto un castillo en la vida real! ¡En las fotos parecen más pequeños pero ahora que estoy frente a uno, no se compara a nada! ¡Wow! — agité mis manos y golpeé un par de veces el hombro de TaeHyung, sin poder contener mi emoción.

—No está en mi naturaleza presumir pero te puedo asegurar que por dentro es aun mas bello — me dijo y caminamos por el gran jardín. — junto a los otros 6 castillos, son los únicos que existen en todo VLULLE. Son de las estructuras más antiguas junto con Itim y Virlei — me comentó pero de nada sirvió porque poco o nada estaba entendiendo. Es como si hablara en otro idioma.

—Uh... ajá — respondí en un murmuro — yo... realmente no sé donde estoy — pensé en voz alta y suspiré agotado. Yo sólo quería llegar a mi departamento y tirarme en cama a pensar en mi vida y llorar... después de pasar por tantos ''accidentes'' no sabía que era peor.

Caminamos hasta la entrada y cuando las puertas se abrieron yo no supe como tuve las energías de dar saltitos, emocionado, reí como un niño al ver toda clase de lujos y excentricidades colocadas por aquí y por allá. El piso tenía una alfombra de terciopelo y el piso y los pilares eran de mármol, había jarrones en cada esquina y candelabros en los techos ¡Por Dios santo! tan sólo era la entrada y podría decir con total seguridad que cualquier cosa aquí podría mantenerme por al menos toda mi vida. Me sentía como un minero encontrando piedras preciosas por primera vez.

No es que no valorara el trabajo de los demás pero espero poder robar al menos algo de lo que hay aquí antes de irme.

—Como has caído en mi territorio es mi responsabilidad hacerme cargo de ti, así que te quedaras aquí todo lo que se necesite... uh, más bien, todo lo que tú quieras — haré como que eso no sonó espeluznante por un momento...

—¿Okey...? — lo miré de soslayo y me separé un paso de él — pero, esta bien que me quede en el castillo? tú quizás no lo sepas pero no es bueno traer pobretones como yo a lugares tan lujosos o pronto notaras que empiezan a faltar cosas de los pasillos — dije y estuve a punto de reír pero noté como los guardias me miraban mal. Me apegué a TaeHyung — ... e-era broma... — jajaja, ya que...

Caminamos sin mucho que decir ya que mis gritos internos por cada cosa que brillaba no contaban. TaeHyung, yo y unos cuantos guardias nos dirigimos por fin a la bendita enfermería.

Mis heridas habían dejado de sangrar desde hace mucho, en realidad no eran tan profundas pero si grandes, tampoco dolía tanto como antes. Antes tenía tantas cosas en las que concentrarme que había olvidado que tenía rajado el pecho y el brazo, una que otra vez estuve a punto de rascarme, pensando que el ardor era comezón. Sí, bueno, que nadie se sorprenda, estuve a punto de morir dos veces en un día, no debo ser muy inteligente.

Mientras me curaban he intentaba no gritar como nena cada vez que pasaban el algodón con alcohol por mis heridas observé a TaeHyung quien miraba directamente mi pecho. Ow... sigue preocupado por mí...

Fairy Tail || VkookWhere stories live. Discover now