My Hope ~•SOPE•~

27

Después de dos semana tan cargadas de cambios y voluntad, taehyung volvió a casa. Yo no estaba totalmente de acuerdo, pero jimin me insistía cada día -taehyung es la persona más hetero y lo sabes. es tu amigo no olvides eso. fue un error. ustedes se aman, vamos dale una oportunidad- termine cediendo. De igual manera iba a “pernonarlo” solo estaba haciendo tiempo.

—hyung ¿Podemos hablar?— fue lo primero que me dijo, finalmente nuestra reconciliación se basó en ver partidos de fútbol acompañados de cerveza

Los días avanzaron y fui donde le prometí a jimin, al terapeuta. Debo admitir que en las primeras sesiones no ponía de mi parte, pero con el paso de los días noté que seokjin no era el prototipo de psicólogo, más bien estoy seguro de que él está más loco que una cabra. 

Siempre que entraba a la sala encontraba a seokjin haciendo algo diferente y extraño, una vez lo vi tejer, otro día lo vi cantandole a las plantas y también muchas veces lo vi observado con admiración su reflejo en el espejo -wohhh que guapo eres seokjin- se hablaba así mismo. Pero a pesar de ser un chiflado narcisista, seokjin era un buen orientador y terapeuta. Al momento de hablar de mí cambiaba totalmente su semblante a uno serio, respondía mis preguntas con metáforas o con respuestas realmente útiles. Martes y miércoles iba a sus secciones y se había convertido en algo que necesitaba para estar bien, porque cada vez que salía de ese lugar me sentía aliviado.

Luego fui conociendo más a seokjin, estableciendo confianza una vez me invitó a beber ¿Que clase de terapeuta era? No lo sé, pero si podía beber junto a él ya era alguien genial ante mis ojos.

—a veces es necesario encerrar ciertas cosas en un paréntesis, primero hay que solucionar lo esencial para continuar desarrollando y solucionando los problemas

—¿Hoseok es un problema?— pregunté 

—hoseok no es un problema, para ti nunca lo fue. Todo es un proceso, solo eso

—¿Un proceso...— me quedé pensativo después de beber ese trago

Eso me hizo pensar que necesitaba una pausa. Porque todo iba muy rápido y no sentía que lograba nada. Estabilidad emocional. Esa era mi meta.

Mi rutina de vida cambió drásticamente después de un mes. Pedí unas largas vacaciones en el trabajo, jimin se mudó con nosotros, taehyung consiguió trabajo y dejó de ir a la academia de baile y yo con mi tiempo libre salía junto a jimin o iba a pasear a yeontan. 

Por cierto, taehyung decidió llamarlo así.

No podía negar que no dejaba de pensar en hoseok, pero me hice una promesa; no preguntar por él hasta que llegue el momento de aclaración y paz mental. Sabía que taehyung aún lo veía, ambos eran muy amigos pero no, no iba a preguntarle por hoseok. 

Jimin sabía que me contenía en ese aspecto y confesó que él siempre trataba de distraerme para no pensar en él, sinceramente lo lograba y yo lo agradecia. 

—¿Prefieres palomitas dulces o saladas?

—dulces— conteste mientras observaba los boletos del cine. La función comenzaba en 10 minutos 

—no te preocupes, llegaremos a tiempo

—no lo creo con esta fila— estaba molesto, fue su idea comprar palomitas y su culpa llegar tarde por no decidir su atuendo. Jimin soltó una risita —¿De que te ríes?

—eres un gruñón min yoongi 

—y tu un glotón— jimin pellizco mi brazo —¡oye!

—para cuando me vuelvas a llamar así te pellizcare otra parte y no te gustará 

—¿Desde cuándo estás tan insolente mocoso?

—de cuando me empujaste haciéndome caer de la cama, otras veces me abrazas y después me alejas ¿Acaso soy tu juguete?— reclamó por aquella vez que dormido lo empuje fuera de la cama, desde ese día no deja de sacarlo en cara

—ni recuerdo eso, estoy seguro que te lo invitaste

—tus malas costumbres al dormir nos me las vas a negar— entre cerré mis ojos 

—entonces ve a dormir con taehyung y deja de reclamar, de seguro sus costumbres la aguantas— no iba a dar mi brazo a torcer

—bueno, pero tú tendrás que dormir con yeontan

—debe ser menos pulgoso que tú— jimin piso mi pie nuevamente

Luego de comprar las palomitas corrimos para llegar a tiempo a la película, buscamos nuestros asientos y al sentarnos la película comenzó. 

A mitad de la función jimin se paró para ir al baño, yo estaba muy centrado en la película así que solo asentí sin despegar los ojos de la gran pantalla. Jimin al volver se quedó en su asiento totalmente quieto, ya no hacía comentarios y no reía en las escenas cómicas. Lo quedé mirando pero el solo miraba fijamente la pantalla, pero como si en vez de ver la película pensará en otra cosa, decidí ignorar su comportamiento y disfrutar de la película.

De camino a casa su actitud seguía igual de seria. Preferí dejarlo en paz, después hablaría con el.

—ire a dormir, estoy muy cansado— avisó antes de irse a encerrar a la habitación

—¿Pelearon?— preguntó taehyung

—no— respondí —él está así desde que fue al baño del cine 

—¿Cine? ¿Fueron al cine?— preguntó sorprendido

—así es ¿Porque?

—no, nada. Olvidalo— levanté una ceja. Yo no era idiota 

—dime que pasa— exigí pero el se hizo el sordo —¿Esto tiene que ver con hoseok?— me miró de reojo. Obvio que que tenía que ver con el —tae...

—hoseok fue al cine esta tarde— habló lo más bajo posible —¿Tú crees que se encontró con jimin?— su pregunta interrumpió mis pensamientos

—todo marca que así fue— suspiré —así que… vio a jimin después de tanto tiempo 

—¿Y porqué está así? Debería estar feliz al menos, también fue su amigo— tenía más o menos una idea de lo que pasaba con jimin 

—será mejor que se le pase solo, no hables y no le preguntes nada ¿Escuchaste?

—si Hyung, estaré...— cerró su boca haciendo un gesto con sus manos

Ya era media noche y mis párpados caían debido al sueño, apague el televisor y caminé hacia la habitación. Al entrar bservé a jimin que dormía al lado derecho de la cama. Me coloqué el pijama y me acomode a su lado.

Automáticamente jimin dio la vuelta y abrazo mi cintura, pegó su rostro cerca de mi cuello, sentía su respiración chocar. 

—pensé que estabas dormido— hablé monótonamente

—no podía conciliar el sueño sin ti a mí lado

Me quedé en silencio meditando lo que pasaba. Jimin se estaba acostumbrado a mi atención y a mi presencia. No iba a negar que ya parecíamos novios, nos acariciamos siempre y nos demostrabamos mucho nuestros sentimientos, lo cuales iban en un sentido diferente, porque yo lo amaba pero no más allá que como un amigo.

Jimin me acerco más a él tomando mis caderas, cerré los ojos pidiendo que se detuviera, pero me dejó en claro que no lo haría cuando sentí sus labios en mi cuello. Hace mucho que jimin quería traspasar ese límite que yo siempre marcaba.

—es momento de que busque a hoseok— jimin dejo de besar mi cuello automáticamente al escucharme 

—¿Porque me dices esto ahora?— preguntó molesto

—solo quería que lo supieras

después de esas palabras no hablamos más. Él durmió al otro extremo muy lejos de mi, yo no pude dormir por pensar en todo, pretendí estar dormido y pude sentir que él también lo hacía.

Jimin nunca me dijo directamente sus sentimientos así que no podía soltar mi rechazo así como así, tampoco quería lastimarlo además todo era tan indirecto que me hacía dudar si se trataba de algo serio o no, sus palabras o miradas no sabía cómo interpretarlas.