Operación: Niñera [Nash Grier y tú]©

Capitulo 19.¿Estás tratando de decir lo que yo creo?

Maratón 2/3

***

Llegamos al negocio y estacionamos el auto. La mitad del camino nos la pasamos riendo y cantando; pasar tiempo con ella se estaba convirtiendo en algo bueno.

- ¿De qué quieres tu helado?- pregunté al entrar al local.

- De chocolate y vainilla.-sonrió.- Nash, me gustaría pagar la mitad, no me siento bien de que gastes dinero en mi.-bajó su cabeza avergonzada.

- Oh, vamos.-tomé su mentón e hice que me mirara.- Te dije que iba a invitarte un helado, eso quiere decir que yo cubriré todos los gastos.-sonreí.

- Bueno...-dijo no tan segura.

- Ve a tomar una mesa, enseguida voy.-dije y ella asintió. Me volteé y vi que sólo quedaba una persona delante de mi.

Durante el viaje había estado pensando en distintas formas de decirle a ______ acerca de la fiesta; no quiero arruinar la amistad que tenemos ahora, pero si no hacía esa fiesta la mitad del equipo me odiaría.

- Buenas tardes, ¿qué deseas ordenar?- preguntó la cajera mientras una sonrisa aparecía en sus labios.

- Un helado de vainilla y chocolate y otro de chicle y vainilla, por favor.-sonreí también al tiempo que sacaba mi billetera.

- Está bien, serían veinte dólares.-saqué el dinero y se lo tendí.- En un momento lo llevo a tu mesa.

- Gracias.-murmuré mientras tomaba la factura. Me di vuelta y caminé hasta la mesa donde ______ se encontraba. Estaba algo apartada del resto por lo que el ruido del lugar no nos molestaba.

- Ya traerán los helados.-sonreí al sentarme.

- Bien.-murmuró.- Nash, ¿puedo hacerte una pregunta?

- Claro, la que sea.-asentí y me acomodé más al centro de la mesa.

- Pues... es algo personal, y no quisiera incomodarte.-dijo y sus mejillas se tornaron rosas.

- Oh, vamos. No me incomodaré, adelante.-la alenté.

- Bueno... tu... ¿tienes novia?- preguntó y se ruborizó más.

- Eh... Yo no soy de tener novias.-murmuré algo avergonzado.- Tal vez lo sea, y he tenido algunas, pero nada serio. Creo que aún no ha llegado la indicada.-sonreí un poco.- ¿Por qué la pregunta?

- Por nada en especial. Es que Hayes me ha comentado que eres muy popular en tu escuela, y creí que tal vez estabas saliendo con alguien.-sonrió también.

- No porque sea popular debo tener novia.-reímos.- ¿Y tu?

- ¿Yo qué?

- ¿Tienes novio?- solté tímidamente. ¿Qué estaba pasando conmigo?

- No, por los momentos sigo soltera.-dijo y acomodó su cabello en una coleta.

- Uhm.-murmuré y la chica que me había atendido se acercaba a nosotros con nuestros pedidos.

- Aquí tienen, que los disfruten.-sonrió y me guiñó un ojo.

- Gracias.-dijímos al unísono.

- Le has gustado, Nash.-rió ______.

- ¿Qué? No es cierto.-negué.

- Si es cierto.-rió más.- Hay un problema muy grande con ustedes los hombres.

- ¿Por qué?- pregunté divertido.

- Jamás se dan cuenta cuándo le gustan a una chica.

- Si nos damos cuenta, lo que pasa es que ustedes suelen confundirnos.-reí y ella comió de su helado.