Eres Mía (1)

Capítulo 7

-    ¡Se puede saber dónde diablos estabas!- grita Mia furiosa.

Había olvidado por completo decirle a Mia que todo estaba bien y que aún seguía con vida, seguramente Josh y ella estarían molestos conmigo lo que queda del año.

-    Lo lamento tanto Mia sé que debí de haberte avisado en donde estaba, pero mi madre llamó y se enteró que me encontraba en una fiesta así que decidí apagar mi teléfono- trato de explicarme antes de que me odie para siempre. – Pero tampoco quería volver a la fiesta por todo el asunto con Stacy, además me quedé profundamente dormida en la habitación de Hayden que...

-    Espera ¿qué dijiste?- voltea rápidamente la cabeza hacia donde yo estaba.

-    Que mi madre descubrió que fui a una fiesta y...

-    No, eso no, lo último acerca de Hayden- comienza a levantarse de la cama para caminar hacia mí.

Yo y mi bocota. No quería que nadie se enterara de mi pequeño descuido al dormir en la habitación del mujeriego más popular del campus, pero mi desesperación por qué Mia me perdonara me llevó a decir algo que quería mantener en secreto por el resto de mi vida, pero ahora que escuchó el principio de la historia no pararía hasta que le contara detalle por detalle lo que sucedió anoche.

-    No pasó nada, solamente buscaba una habitación vacía donde pudiera dormir y cuando lo hice no me había dado cuenta de que era la recámara era de nada más ni nada menos que de Hayden Steele- digo sin importancia.

-    Vaya, vaya ahora lo entiendo todo- dice Mia con una sonrisa de oreja a oreja.

-    ¿Y qué es exactamente lo que entendiste?- pregunto confundida.

-    Anoche después de que te desapareciste por más de una hora, un chico llamado Will me parece, le dijo a Hayden que una chica estaba en su habitación y en cuando escuchó eso subió furioso a echarla fuera de ahí, pero pasó el tiempo y jamás volvió a la fiesta, todos creímos que había tenido sexo con ella pero resulta que solo se había quedado dormido junto a ti o por lo menos se quedó cuidándote- explica sin dejar de sonreír.

Al escuchar todo lo que Mia tenía por decirme me quedé boquiabierta, no podía creer que Hayden se había quedado a mi lado toda la noche pero esta confesión me dejó con más preguntas: ¿Por qué se quedó conmigo? ¿Por qué no me hecho de su habitación si es tan importante y privada? ¿Por qué a la mañana siguiente me dijo que me fuera y actúo como si estuviera enojado conmigo? Pero dejando a un lado todas esas preguntas redundantes, la única que importaba era ¡¿Quién diablos es Hayden Steele?!

-    Tessa... ¡Tessa!- grita Mia despejando mis preguntas. – ¿Todo bien?

-    Sí, todo bien, ¿nos vamos a clase?- tomo mi bolso intentando cambiar de tema.

-    Es sábado- corrige ella.

Dios ¿Qué me estaba pasando?

-    Cierto, entonces ¿qué tal si vamos al centro comercial? Creo que necesito distraerme un poco- digo riendo nerviosamente.

-    ¡Claro! De hecho quiero tu opinión sobre un vestido de lentejuelas que he visto.

En el trayecto al centro comercial Mia no dejaba de contarme acerca de este chico llamado Will que había conocido en la fiesta. Según lo que me contaba, Will tenía todas las características que Mia buscaba en un hombre y al parecer también pertenecía a la misma fraternidad que Hayden. Pensando un poco en eso, mi mente comenzó a jugar conmigo haciéndome imaginar cómo sería salir en una cita doble, Mia con su amigo y yo con Hayden, sería fantástico salir en pareja los cuatro, creo que nos divertiríamos mucho. Pronto esos pensamientos se desvanecen cuando recuerdo las groserías y humillaciones que me ha hecho pasar, a él solo le gusta jugar con las chicas y jamás se tomaría en serio una relación, se notaba desde lejos que a Hayden solo le interesaba acostarse con ellas para luego, a la mañana siguiente fingir no saber ni su nombre y eso es algo que nunca estaría dispuesta a soportar.