mi historia junto a ti ranma x akane (Segunda Temporada)

el complejo de mujer

me estoy comenzando a sentir un poco culpable pero debo decir que se siente bien tener un esposo que te consienta como si fueses una pequeña niña, sin duda el no se equivoca al decir que yo de toda la familia tendo y saotome soy la consentida junto con mi hijo tomoe, supongo que cuando nazca mi hermanito o hermanita menor tendré que ceder mi puesto pero sin importar que ranma me sigue asegurando que será la consentida de la familia.

-¿que tal esta el helado?

pregunto ranma que se encontraba sentado en un sofá que compramos hace poco, con una sonrisa decidi sentarme sobre sus piernas a horcajadas y tomando la cuchara del helado deje caer un poco de este sobre su cuello y clavícula.

-creo que se me a caido, dejame limpiarte. 

pude notar la sonrisa boba en sus labios, este fin de semana a sido muy interesante tanto para el como para mi, podemos aprovechar mientras comienzan las clases en el dojo, es nuestra responsabilidad encargarnos de ello sábados y domingos que es cuando los chicos no tiene escuela y sus padres hacen todo lo posible para mantenerlos lejos de casa y que no rompan nada.

-¿como piensas limpiarme?

pregunto el mientras me tomaba de la cintura y recorría con sus manos mi figura, dejando el base del helado en otro lado tome su camisa y fui desabrochando los nudos de esta para seguido a esto acercar mis labios a esta zona y comenzar a limpiar el desastre que hice, al terminar pude sentir como sus dedos tomaban mi mento y levantaba mi rostro para darme un beso que duraría un buen tiempo, comenzó siendo un beso muy normal pero con base los segundo empezó a tomar mucha intensidad.

-tenemos que hablar.

dije en un susurro mientras besaba sus labios pero al decirle esto el tomo mis hombros y me aparto un poco miemtras me miraba a los ojos y levantar una de sus cejas.

-no me asustes

al escucharlo decir esto no pude evitar reirme, noto que tengo cierto poder sobre ranma para hacerle sentir miedo, algo que ni los guerreros mas fuertes de este mundo pudieron hacer,quien diría que el fuerte campeón ranma saotome tiene miedo de su esposa.

-cobarde 

-las mujeres son la perdición del hombre, por supuesto que me das miedo no quiero despertar 30 metros bajo tierra por haber hecho algo malo, si sirve de algo quiero decirte que te amo te soy fiel y que hago todo el oficio de la casa pero no me mates a un soy muy joven no cumplo ni los 20.

sin duda suena muy bien, básicamente tener a un hombre sumiso que cumpla todas tus órdenes pero en esta ocasión será el quien me castigará a mi por hacer algo malo y mentirle.

-dudo que me seas infiel no podría caber en mi cabeza pero de igual modo acepto que hagas todo el oficio.

-bien si mejor espero a que me digas lo que tienes que decir.

estaba comenzando a ponerme nerviosa y el si que lo está notando, podía sentir como sus ojos azules penetraban mi alma casi hasta el punto que podía sentir que miraba mi interior, tal vez solo sea la culpa que me quema por dentro.

-p...pues no...no estoy...embarazada....solo...t...te j..jugue una...b..broma

.

.

.

.

genial, en toda una vida es la primera vez que escucho que el marido manda a su mujer a dormir en el sillón por comportarse mal, no me sorprende de un todo ya que después de todo ranma tiene algunos complejos de mujer que creo haber sido adquiridos gracias a su maldición de poder convertirse en una linda chica pelirroja.

no pienso quedarme toda la noche en el sillón por esa razón decidí inventarme algo para escabullirme entre la sabanas y que él no se de cuenta, solo es cuestion de que lo consienta un poco y nuevamente él caiga rendido ante mis pies de eso no hay duda por algo soy su esposa, si quiero lograrlo me debo de poner algo mas sexy y atrevido, no tengo ganas de dormir prefiero buscar algo mas interesante que hacer a media noche con él mientras tomoe duerme.

-esto estará bien

dije en un susurro mientras terminaba de poner un lápiz labial rojo en mis labios y amarraba mi cabello en dos trenzas, lo que tengo puesto sera solo una sorpresa para el.

narra ranma

sin duda akane se pasó conmigo el dia de hoy, ya me estaba ilusionando de ser padre por segunda vez como para que ella me diera un fuerte golpe contra el concreto y me dijera que solo me andaba jugando una broma, en parte me alivia mucho que sea solo eso, una broma ya que ahora se que tengo tiempo para cumplir con todas mis responsabilidades y también para pasar un momento en familia con mi esposa e hijo y descansar el tiempo adecuado, eso sin contar el entrenamiento diario que me esta dando rumiko.

sin duda akane me hace mucha falta en la cama, todas las noches la abrazó y ella se queja ya que en la mayoría de ocasiones tengo los pies fríos y ella me calienta a si sea en contra de su propia voluntad, después de que ya tomó un buena calor corporal ella es la que me abraza y en ocasiones duerme sobre mi, creo que ya me estoy acostumbrando a eso.

estaba ya casi quedándome dormido cuando sentí que las sábanas se levantaban un poco y unas frías mano recorrieron mi cuerpo hasta el punto de tocar mis mejillas, sentía un liviano peso sobre mi, si no fuera por que reconosco ese olor a sakura siempre que esta cerca pensaría que se me subio el muerto.

al abrir los ojos lo primero que pude ver fue unos lindos cabellos azules que estaban atados a dos trenzas con unos lasos de color rojo, al subir la mirada me tope con sus labios que se miraban exquisitos con ese tono de lápiz labial y dos hermosos ojos color miel chocolatoso que me miraban fijamente, sabia cual era su plan y no se lo pienso dejar tan fácil.

-se supone que estas castigada

dije intentando parecer lo mas serio posible pero era casi imposible lograrlo cuando ella me miraba de ese modo tan tierno y lindo, ella no me contestaba nada, solo se molesto en observarme por un buen tiempo mientras sonreía, si tuvieras la oportunidad de verla como yo seguramente también quedarás embobado por lo linda que es pero tengo que ser lo mas fuerte que pueda.

-eres lindo cuando te enojas

dijo ella mientras pasaba sus dedos pos mis mejillas y por mis labios, ella está un poco fría, supongo que no fue buena idea castigarla dejándola dormir en el sillón ya que no quiero que le coja un resfriado de último momento por mi culpa, no se por que siento que soy muy blando, no importa que esté enojado a un me preocupo por su seguridad.

-¿no piensas perdonarme ni por un besito?

pregunto ella mientras se acercaba a mi boca, tenia 2 opciones , aceptar su besito o decirle que no por que sigue castigada, sin duda la decisión mas difícil de toda  mi vida ya que hiere mi orgullo si accedo a su petición pero a la vez no puedo evitar verla tan linda pidiendome perdon.

continuará...