❝-¡Hyung mireme!
-Ahora no Jimin.
-¡Hyung! ¡Hyung! ¡Hyung!
-¿Qué quieres?
-Lo amo mucho Hyung.❞
✿YoonMin
✿¿Fluff?
✿Capítulos cortos.
✿Errores serán corregidos una vez terminada la historia.
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Ambos jóvenes bajaron del auto con sigilo. Cargaron sus armas, bajaron sus cascos preparados para cualquier cosa.
Cuatro policías más estaban detrás de ellos. Algunos con rifles en sus manos.
Namjoon se acercó a la puerta principal y contó hasta tres con los dedos, pateo la puerta tan fuerte que está se partió a la mitad.
—¡Policía!– grito uno de ellos.
Seokjin subió las escaleras a pasos apresurados y abrió la puerta que supuso era de la habitación. Allí sentado en la cama con las manos en alto, como si ya nada más pudiera hacer y realmente ya nada podía hacer, estaba aquel hombre que tantas noches de dolor había hecho pasar a Park Jimin.
—Lo encontramos– dijo tocando el comunicador en su oído.
Los demás oficiales subieron y lo apuntaron con todas las armas que tenían en mano.
—Park Sobyun queda arrestado– musitó uno de los uniformados–. Tiene derecho a permanecer en silencio– coloco las esposas en sus muñecas–. Todo lo que diga puede y será usado en su contra.
Caminaron hasta la salida y lo subieron a la patrulla. Namjoon subió a su auto y soltó un enorme suspiro, Seokjin se sentó a su lado y tocó su espalda.
—Lo tenemos.
Volteo a verlo y sonrió mientras intentaba que las lágrimas no cayeran— Por fin lo hicimos.
—Jimin podrá estar en paz al fin.
—Ese hijo de perra morirá en la cárcel.
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