Quería estar despierta, pero en mi pecho no cabía ya más agua salada y el reloj hacía del proceso algo rápido. Sabía que seguir teniendo los ojos abiertos unas horas más acabaría en provocar una avalancha de lágrimas y no quería eso, no otra vez. Ya me estaba doliendo el pecho, como si quisiera salir de aquí dentro la pena a empujones.
01:06
ESTÁS LEYENDO
Pasadas las 00:00
PoetryParanoias mentales a destiempo. A veces es necesario sacar algo bueno de un corazón dañado, así como escribir su historia recordándola de la forma más bonita que se merece un sentimiento. Parandose a pensar si realmente todo valió la pena, si tu pec...