Los acordes del amor [Justin Bieber x Austin Mahone / Austin x Shawn Mendes]

Capítulo 30

Todo estaba pasando tan rápido. Mi respiración se cortó y mis ojos permanecieron abiertos de par en par. Lo único que sentía era un frío por todo el cuerpo, mis piernas estaban congeladas. Un leve ruido salió de mi garganta y me percaté del calor. Sí sentía calor, muy poco, pero suficiente para traerme de vuelta a la situación. Mis labios contra los labios cálidos de Shawn, en un beso que parecía eterno y, que no supe cómo seguir. Pude ver una expresión de duda en su rostro y se separó, a continuación su cara estaba completamente roja.

—Austin... yo...—Su mirada se clavó en el suelo—No debí, sólo...

Estaba tan adorable. Parecía un cachorrito, pero, no sentía la ternura que un cachorro hubiese podido transmitirme. Más bien me encontraba cuestionándome todo. No pude evitar pensar en Justin, de alguna manera –de alguna estúpida y ridícula manera- me sentía sucio, me sentía infiel. Infiel a mis sentimientos hacia él, pero... ¿Entonces por qué a la par siento mariposas en el estómago? Tragué saliva y estiré mi mano para sujetar la de Shawn. Su mirada ascendió para encontrarse con la mía y sólo pude sonreírle. Me acerqué y besé su mejilla.

—Escucha Shawn, yo...—Traté de ordenar en mi cabeza todo lo que estaba por decir—Yo aún estoy, eh, confuso—acaricié su mano con mi pulgar. Aparte la mirada—Se sintió lindo—admití.

—Está bien, Aus—su voz sonaba seria, tengo miedo de haberla cagado con él.

Por favor, no me odies, por favor, no me odies. Continuamos caminando como si nada. Se sentía muy muy incómodo. Odio mi forma de ser, quiero volver a tener pareja, quiero volver a sentir, quiero... no quiero lastimar a Shawn. Un latido. No quiero volver a salir lastimado. Comenzaba a agobiarme, me estoy sintiendo estúpido ahora mismo. Tengo una oportunidad delante y no soy capaz de aprovecharlo; idiota, idiota, idiota. Shawn es muy lindo, durante estos tres meses él y Becky han sido mis únicos amigos y sé que es un buen chico. Pero, ¡ah, qué imbécil soy!

Suspiré. Mi cabeza apuntó al suelo. Pero, un suave tacto en mi mano me sacó de todo ese mar de mal estar. Sus ojos me miraban con preocupación.

—Austin, no ha pasado nada, ¿vale?—La voz tan dulce que puso me caló el alma—Te prometo que no voy a comenzar a actuar raro. Deja de comerte la cabeza.

Calma. Tras la pequeña tormenta que me acababa de armar solito, llegó la calma. Le dediqué una sonrisa y con una voz baja un "Gracias" salió de mi boca.

—¿Tienes que ir al trabajo?—Abrí mis ojos y con nerviosismo busqué mi teléfono. Mierda, mierda, mierda. Una risa me sacó de mi burbuja. Lo miré con duda—Hoy está cerrado, vaya, sí que te desubiqué.

—La verdad—admití— hubieses sido el causante de un infarto, amigo —medio regañé— Aún no entiendo como no me despidieron...

—¡Chicos!—Una voz femenina se incluyó a la conversación, ambos giramos y ahí estaba Becky, con una sonrisa—¡Pensaba que ya no os encontraba! Vengo de la cancha—frunció el ceño— ¿interrumpo algo?

Ahí nos percatamos de que nuestras manos aún estaban entrelazadas. Shawn soltó el agarre y rió.

—Estaba enseñándole a Austin a leerlas—Mintió. Era genial al baloncesto, pero mintiendo daba pena, una voz mucho más aguda que lo habitual.

—Comprendo...—una ceja estaba más alta que otra. Ni de coña le creyó—Bueno, ¡chicos! ¡Estáis seleccionados! ¡Chicos, chicos, chicos! — algo que me encanta de Becky es lo buena persona que es. Ahí está, demostrando tanta emoción... Shawn la abrazó.

—¡Estamos seleccionados, Becky!—Comenzaron a dar saltos aún abrazados— Dos pruebas más y pasamos a formar parte del equipo nacional!

Esta vez, yo arqueé las cejas

—¿Cómo? ¿Cómo dos pruebas más?

—Aus, estamos seleccionados para entrar a la liga de preselección—explicó, como si fuese lo más obvio—¿No sabes cómo va?—Negué con la cabeza—Pues, ahora, James, tú y yo vamos a formar parte del equipo de juvenil Utah, porque han quedado bacantes en función de las ciudades, hay partidillos y van seleccionando jugadores. Y así hasta formar el quipo nacional, para el torneo internacional—Me quedé pensativo.

—Es muy surrealista—Ambos torcieron su rostro en una mueca

—Y tú muy pesimista, ¡Alégrate! ¡Tienes una oportunidad! —Becky me dio un golpe en el hombro—

Paseamos durante varios minutos. Shawn y Becky hablaban entre ellos mientras yo seguía hundido en mis pensamientos; formar parte de un equipo tan grande, dios... No quiero ser pesimista, pero dudo tanto ser capaz de clasificarme. Pero... la verdad, espero que Shawn lo haga. Está confiado, y tiene talento. Lo miré por unos segundos y sonreí. Un intercambio de miradas por su parte.

El resto de la tarde transcurrió así; Becky hablando y contándonos de todo un poco, Shawn intercambiando frases con ella – y miraditas conmigo- y yo ausente. Algún que otro gesto por mi parte; asentir, monosílabos... Poco más. Me percaté de que paramos delante de un local, un bar.

—Id pidiendo algo, yo quiero entrar al baño—informó Shawn, entrando y dejándonos atrás por un momento. Me dispuse a seguirlo pero Becky me detuvo, sujetando mi hombro. Se cerró la puerta.

—Austin—dijo seria. Tragué saliva—¿Me puedes explicar qué ha pasado? Shawn está tenso y tú ni estás, ¿Realmente interrumpí algo?

—No, no. Sólo, le estoy dando vueltas a lo del equipo... estoy en una nube.

—Ajá, ¿por qué me lo tengo que creer? Ni si quiera estás alegre, amiguito—Definitivamente, algo que aborrezco de mí, es que soy un libro abierto.

—Shawn me besó—Solté sin más. La cara de sorpresa por parte de Becky fue magistral, toda una obra de arte—Y no le seguí

—¿Cómo? ¿Qué?—preguntó incrédula—¿Cómo ha pasado?

—De golpe—respondí. Aún confuso—Ha sido raro. Estábamos hablando... me dijo que era importante para él y, de repente, pum, sus labios contra los míos. Y yo, quieto.

—Haces mucho hincapié en que no seguiste, ¿debería centrarme en eso?

—No lo sé... Yo, aún estoy ahí. Me paralicé.

—Ay, Aus—Acarició mi pelo—¿Te gusta Shawn?—preguntó suave

—No lo sé—repliqué. Un suspiro—Estoy mu confundido, Beck, me hizo sentir muy bien, pero a la par...

—¿Sigues pensando en?—Agaché mi cabeza—Escucha, Aus, es lindo que aún lo quieras, pero tienes que aceptar que es pasado, en algún momento. Si tienes la puerta del amor cerrada, cuando se abra otra, no lo vas a ver. Y es bonito, tener la puerta delante y querer pasarla y ver por donde sale el asunto, deberías darte una oport-

—Os he estado buscando por todo el local—Reprimió Shawn de golpe, abriendo el portón del bar—Me habéis visto la cara de estúpido—rió

—Tenía que hablar con Austin—Becky comenzó a subir los dos escalones y se adentró con Shawn. Se giró para verme—¿Estás listo para pasar la puerta?

Sonreí de lado y di el primer paso, pero una vibración en mi bolsillo me hizo frenar. Saqué el móvil y desbloqueé la pantalla;

Número desconocido:

"Tenemos que hablar. ¿Puente del lago en media hora? Jx"

Abrí mis ojos, expectante.

—Yo... tengo que irme—Dije sin más para echar a andar—¡Nos vemos mañana!—Aceleré el paso.

¿J? ¿Justin? ¿Será él? No, no, no. No quiero ilusionarme, pero realmente mi corazón está por salirse de mi pecho.