BONUS IX: Un hombre encantador.

750 78 9
                                    

Hace tiempo dije que lo iba a escribir, que iba a utilizar la misma canción, que iba a ser una historia del pasado y hoy por ser día del padre, al parecer, no hay fecha más perfecta.

George miraba y escuchaba, se quedaba cayado algunas veces, reía y lloraba. Desde que su madre se fue, lo abandonó, olvido por completo aquel dulce nombre y lo cambio por otro. Su tío Dio, siempre estaba ahí, sobrellevando las cosas de cuidar a un hermano bastante malhumorado que se la pasaba haciendo rabietas a todo, y a él, el pequeño de 11 años que solo guardaba silencio.

En aquellos años, recuerda George, Dio era un hombre totalmente diferente, aunque si, su mal genio nunca se fue, se controlaba así mismo, con una enorme sonrisa, él niño recuerda, era casi como un cuento de hadas convivir con aquel...hombre encantador.

-¡Arriba!- abría las cortinas de par en par.-Es hora de desayunar, querido George.-Dio con altos trajes de alta costura siempre en colores sobrios... no que actualmente colores llamativos y extravagante.

George se levantaba con dificultad, buscaba sus pantuflas e iba al baño, veía entonces a su padre con mal humor. Si, Jonathan con cara de pocos amigos, que veía con cierto "horror" a un feliz Dio...y con ternura a su hijo.

-Esto es muy dulce.-declaro una mañana Jojo al ver los panqueques con mucha mermelada de fresa.

-Ojalá tu fueras muy dulce.-le respondía Dio, que realmente hacia un buen esfuerzo en preparar las tres comidas, tener todo limpio en casa, sacar a Dany al parque, llevar a George a la escuela, hacer compras y demás.-Puedo irme en cualquier momento.

-No.- grito George.-Quiero decir, yo... a mi me agrada lo dulce, tio.- le hablaba con amabilidad a Dio.

-Solo por él esto aquí, no lo olvides Jonathan.

Algunas noches los oía discutir, Jojo lloraba mucho en las noches por ella, realmente la amo, Dio iba con él, tratando de suavizar aquel dolor, pero el moreno se resistía. Muchas veces llegaron a golpes, insultos, muchas veces...Jonathan era quien se iba.Otras tantas,entendió ya mayor George, era que Dio le daba ese amor que le hacia falta a Jonathan y el lo aceptaba, quería creer que por naturaleza, pero Jojo lo amaba tanto y Dio lo amaba tanto, nunca decían nada sobre eso aunque lo sabían, sería mal visto, no por que fueran hombres, si no, porque crecieron como hermanos, familia.

Sin embargo, esa noche, nunca la va a olvidar. Jonathan estaba furioso quien sabe por que, Dio se acercaba a hablar pero era insoportable, que Dio se olvido de todo y se puso de la misma actitud, amenazo con irse si no hablaban.Ese día,George se sintió realmente triste, por que algo dentro de él sabía, que Dio se iría.

-¡Vete entonces!- gritaba con furia Jonathan.-¡Vete y no vuelvas más!

Dio con los ojos llorosos tomo nada más su abrigo del pechero, abrió la puerta.

-¡Papá no te vayas!- grito George corriendo tras Dio.-¡Papá!-abrazándolo con fuerza.-No, te vayas.

Jonathan corrió tras ellos, Dio con las lagrimas corriendo le en sus mejillas sintió un calor tan hermoso... ¿él padre? Y si, quería a George como un hijo, como su propia sangre...el moreno en un primer intento trato de soltar a un hijo del rubio, pero su pequeño George lo sabía mejor que nadie...Sin rodeos, sin poner rostro molesto, sin decir nada, beso aquellos labios de aquel rubio con el que compartió tanto, para que seguía ocultando lo evidente, decía Jonathan años después.

Sin embargo, ahora que Jojo era el amable, el siempre sonriente, Dio cambio, por miedo, no sabía si realmente Jonathan lo quería o lo hacia por el pobre George, Dio siempre dudo sobre aquel tierno amor que entraba todas las noches y lo abrazaba. Era cierto que Jojo seguía con sus carácter de niño mimado, pero era en cierto modo, con más lógica.

ENAMORANDO A LA FAMILIA DE MI NOVIO.Where stories live. Discover now