¿Por Negocios o por Amor?

Capitulo 8

CAPITULO 8

Natsu aguantó la reunión con el contratista haciendo un esfuerzo por concentrarse. En lo único en lo que podía pensar era en la boca de Lucy, en sus suaves suspiros, en sus manos abrazándole el cuello.

Pero cuando la rechazó, ella recuperó al instante la profesionalidad. Hacía un año que la conocía y sólo le había visto perder el control dos veces; en el toro mecánico y el día anterior, cuando se fundió entre sus brazos.

Cuando regresó a su suite se preguntó qué estaría haciendo Lucy. ¿Estaría organizando el esquema de su próximo destino? ¿O estaría trabajando en su boda?

En su boda. Ya había engañado a Lisanna. No, todavía no estaban casados y no, no la amaba. Pero estaba prometido a ella y se había dedicado a besar a otra mujer. El beso era un problema en sí mismo, pero ahora estaba al borde de un desastre todavía mayor. Necesitaba a Lucy de un modo que no debería siquiera estar considerando. Había despertado en él unos sentimientos enervantes.

Pero necesitaba concentrarse. Por mucho que sus hormonas adolescentes trataran de controlar sus actos, ahora era un adulto y debía comportarse como tal. Un acuerdo multimillonario dependía de su unión con Lisanna. Lucy sabía lo importante que era para él aquella asociación. Nunca intentaría sabotearla conscientemente.

Natsu miró los mensajes de correo en su Blackberry y sonrió ante aquel pensamiento. Lucy no estaba interesada en él. Ni una sola vez había actuado como si quisiera algo personal. De hecho, había evitado hablar de su vida privada. Siempre había sido una ayudante organizada y trabajadora.

Natsu revisó los mensajes y se encontró con uno de Lisanna diciéndole que estaba en Roma mirando algunas propiedades. Su siguiente parada sería Florencia, y desde allí se pondría en contacto con él. Mientras Lisanna viajaba por Italia, Francia e Inglaterra, Natsu se concentraría en las Islas tropicales y los puntos turísticos... con Lucy a su lado.

Una llamada a la puerta le sacó de sus pensamientos. Se metió el teléfono en el bolsillo de los pantalones, Cruzó el suelo de cerámica y cuando abrió la puerta se encontró con Lucy al otro lado.

-Confiaba en que ya hubieras regresado de la reunión -dijo rodeándole y entrando en la suite-. Tengo noticias inmobiliarias importantes y necesitamos actuar inmediatamente.

Natsu echó un vistazo a su sencillo y al mismo tiempo sexy vestido amarillo de verano que le dejaba al descubierto los hombros, sonrió y cerró la puerta.

-¿Qué noticias son ésas? -le preguntó.

-Estaba buscando destinos para una luna de miel en Puerto Vallarta y me he encontrado con un hotel que va a cerrar sus puertas por falta de turistas.

Natsu la escuchó hablar, pero se quedó hipnotizado ante su boca. ¿Cómo iba a mirar aquellos labios rosas sin recordar su tacto contra los suyos?

-Les he dicho que estaremos allí a primera hora de la mañana.

Natsu la miró a los ojos.

-¿Cómo?

-En el hotel -se explicó ella-. Les he dicho que iremos a verlo por la mañana. Cuando dije tu nombre, me aseguraron que Dragneel Entreprises tendría preferencia antes de que pusieran la propiedad en venta.

Sí, Lucy era especial. Eficiente y conocedora del negocio.... y había protagonizado todos sus sueños de la noche.

-Llamaré al piloto -Natsu sacó el teléfono del bolsillo y marcó los números, tratando de olvidar su último pensamiento-. ¿Cuánto tiempo tardas en hacer el equipaje?