PERDIDO EN SU MIRADA No. 4️⃣ //SERIE HOMBRES DE LA SIERRA.

CAPÍTULO 4 ELLA SABE QUE CLASE DE HOMBRE SOY

_Mi amor tranquilizante. - Alfonso abrazo a su esposa. Todo va a salir bien, no te angusties.

_Pero... Acabas de escuchar. - dijo al borde de la histeria. _esa gente la va a matar si no entregamos el dinero.

_Y lo vamos a entregar. - le dio un tierno beso en la frente. A pesar de todo él amaba a su esposa, ella era muy hermosa y siempre había estado orgulloso de ella, aunque eso no quitaba que tuviera alguna que otra aventura por ahí, pero a ella no la cambiaría por ninguna, era el amor de su vida ¿y Laura? Ella solo era un capricho, no negaba que era muy hermosa, por eso le había llamado tanto la atención y había empezado a fijarse en ella cuando empezó a convertirse en mujer, la deseaba pero sabía que en cuanto la tuviera su interés terminaría, lo que nunca espero fue que ella lo rechazara y no solo eso, sino que se escapara de su lado, quizás por eso era tanta su obsesión por ella, por eso nunca había podido sacarla de su cabeza y menos ahora que la había vuelto a ver, tan cambiada, tan hermosa, quizás más que antes, más segura de sí misma, tan independiente, así que no podía dejar escapar de nuevo su oportunidad, y no lo haría.

_Conozco a Damian, se que no te negara su ayuda, menos si alguien corre peligro.

_ ¿Y si en lugar de darme el dinero avisa, a la policía? - lo miró con desesperación.

Alfonso se tenso, el no contaba con eso, estaba seguro de que su hermano no le negaría su ayuda a Lidia, pero también cabía la posibilidad de que pidiera ayuda a las autoridades, después de todo el no perdía nada.

_Todo saldrá bien. - la, abrazó más fuerte. El ya no estaba tan seguro, además el tiempo se le agotaba, tendrían que actuar rápido.

*****
Laura despertó sobresaltada. Sintió como era levantada con brusquedad del colchón en donde dormía, luego era trasladada, a la habitación contigua, a donde solían llevarla cada vez que ese hombre odioso quería verla y torturarla con sus asquerosas palabras, diciéndole lo que le haría antes de matarla y deshacerse de ella.

Asustada, sólo se quedó quieta en el lugar en donde la dejaron de pie.

No tardo en sentir la presencia de él, su olor era inconfundible, y su voz, esa voz que odiaba tanto.

_ ¿Me extrañaste? - fue lo primero que preguntó acercándose demasiado a su cuerpo, sentía, su aliento en su oído.

_Ya pronto terminará todo esto. - volvió a hablar alejándose de ella. _es cuestión de días, quizás horas. - escuchó como se sentaba cerca de ella. _tu querida hermana está haciendo hasta lo imposible por conseguir el dinero de tu rescate. - río con malicia. _lo que no sabe es que, aunque lo tenga y lo entregue jamás volverá a verte, al menos no con vida, tal vez le de la satisfacción de tener tu cuerpo, para que se quede tranquila, porque, aunque no lo creas ella te quiere. Se que sufrirá por un tiempo, pero se le pasará, la mantendré muy ocupada gastando el dinero de tu rescate y pronto te olvidará. Pero vamos, dime algo, dame tu opinión. - dijo sarcástico

Ella se removió en su lugar, quería, decirle tantas cosas, pero no podía. El pareció darse cuenta y se acerco quitando la cinta que le impedía, hablar.

_Mi hermana no es tonta. - dijo ella casi al borde del llanto. _tarde o temprano se dará cuenta de la clase de hombre que eres.

El soltó una carcajada.

_Ella sabe que clase de hombre soy, se casó conmigo. ¿Recuerdas? Fue a vivir con mi familia. ¿Olvidaste quienes somos?

_Voy a salir de esta. - dijo con valor. _y yo misma le voy a decir lo que hiciste conmigo y lo que has intentado hacer desde que era una jovencita.

Lo sintió levantarse con brusquedad y en un segundo estaba parado junto a ella.

_No saldrás de esta, eso te lo aseguro, paguen o no tu rescate tu no regresarás con vida. No lo harás. - su voz se escucho insegura. _nada puede salir mal. - continuó tratando de convencerse a sí mismo. _porque yo me voy a encargar de que no hables, los muertos no hablan, y si por algún motivo llegaras a, escapar que sé que no será así, te juro que si me mencionas siquiera tu hermanita pagará las consecuencias. Te lo juro.