𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 31 🍫

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- Buenos días, floja - dije mientras veía a Nat acercarse a la cocina, eran las siete de la mañana

-¿a donde vas?

- a mi trabajo linda, nos vemos luego - bese cortantemente sus labios y salí en dirección a la oficina.

P.D.V Paula

- ¿listos?

- si mamá - respondieron los dos

- recuerden que hoy tendré una sorpresa para ambos - dije mientras ellos bajaban del auto

Daniel se alejo pero Ally corrió de nuevo al auto

- hoy ira tío Nathan ¿verdad?

- hablamos luego, ahora, ve a la escuela.

Al llegar a casa lo primero que hice fue llamar a Nathan, por lo menos para ver si el imbecil no lo olvido.

- ¿bueno? - dijo al atender el teléfono

- Nathan

-¿Paula?

- si, te llame para sabe ¿a que hora vendrás esta noche?, O... ¿Lo has olvidado?

- claro que no, estoy ahí a las cuatro, espero que hoy si estés lista, habrá muchas preguntas

- hasta entonces

Colgué, ¡Maldita sea! Como lo amo, pero no, no, no y no, esto es difícil, complicado.

- llugue - grito Julia desde la entrada, se me fue volando el tiempo, ya son las diez de la mañana

- hola

- ¿ya desayunaste?

- no, quería contarte algo, que creo que deberías de saber.

- habla, te escucho

-¿te acuerdas cuando te dije que me reservaba para alguien... especial?

- ¡No me digas? Por dios, ya no eres más una bebe - me tape la boca de asombro.

P.D.V Julia

Tenía que decirle la verdad, aunque me cueste.

- no es lo que tu crees, más bien, nada es lo que creemos que es. - dije y por más que contuve, no pude, ya tenía lágrimas cayado por mis mejillas

-¿que pasó Julia?, me asustas, ¡habla! - mi hermana se exaltó

- Pa... Patrick - tartamudee débilmente - el...

En ese momento mi hermana me abrazo y creo que era lo único que necesitaba, estaba llorando al igual que ella, ella repetía que era su culpa por no cuidarme, pero en realidad no era culpa de nadie, solo del maldito de mi ex novio.

- lo siento tanto Julia, yo... Yo solo debí cuidarte y protegerte, ¿y me entero de esto? Dios soy la peor hermana del mundo como deje que te pasará esto... Sollozaba y antes de que suiguera hable

- no, tu ni tienes la culpa de nada, nunca me imagine de lo que ese estúpido sería capaz, solo... No es tu culpa ¿ok?

- quiero que sepas que tampoco es la tuya

Después de esa escena el apetito se nos quito a la dos, fuimos al jardín y nos subímos a aquella casa en el árbol que solía ser nuestra todos lo veranos cuando visitabamos a Niña.

-¿recuerdas cuando nos peleamos y decidí que dormirá en la casa de árbol? - dije y sonríe al acordarme de aquella patética escena.

- como olvidarlo, me enoje tanto por que manchaste el cabello de mi muñeca con...

- pintura para casas de color rosa - dijimos las dos al mismo tiempo, y reímos ante eso.

- me acuerdo cuando se te callo stanly de la escaleras - recordó mi hermana

- lo bueno que era un gato - bromee

- ¡Dios santo son casi las dos y no he ido por los niños - dijo mirando su reloj y bajando de árbol.

P.D.V Paula

- perdonen niños, es que me quedé platicando con Julia y se me fue le tiempo.

- descuida mamá, eso ayudó a Daniel, ¿verdad hermanito?

- cállate - susurro solo para Ally

- ¿a sí?¿Qué pasó?

- Daniel invitó a salir a jess

- uhhh Daniel tiene novia, Daniel tiene novia - cante en tonada y Ally reía mientras podía divisar a mi pequeño hombre cito ponerse rojo.

- mamá madura por una vez en tu vida - reímos todos ante aquel comentario

P.D.V Nathan

Era hoy, el gran momento, ahora o nunca.

Camine por aquel camino de piedras que te dirige a la casa y me pare frente a la puerta de este, tomé aire en mi pulmones y con valor toque tres veces la puerta, esta se movió dejando ver a una linda y encantadores niña, mi hija, Alaska.

- ¿puedo pasar?

- si quieres también puedes quedarte en el frío? - ¿desde cuando se volvió sarcástica? - es mentira, pasa tío.

Me adentre a la casa y choque los puños con Daniel, al parecer no sospechan nada, fuimos a la conocida sala y tome asiento frente a Paula, enfrente de los niños.

- ¿sabes quien es el? - pregunto Paula

- si - respondieron al unísono

- si, tio Nathan - respondió Daniel

- Daniel, Alaska, lo que estoy apunto de decirles es algo realmente serio, se trata sobre todos nosotros.

- ¿que pasó mamá? - pregunto extrañado Daniel

- yo... Bueno, creo que no conocen mi nombre completo - dije - me llamo Nathan Bank Gottlieb.

Hubo un silencio aterrador y escalofriante en toda la habitación, podía escuchar cualquier ruido, incluso el caminar de una hormiga.

- mamá - dijo con la voz temblorosa Daniel, aunque Alaska no pareció afectarle en lo más mínimo - ¿acaso mi padre no se llamaba Nathan Bank?- Paula asintió con la cabeza baja

- Niños, Nathan, es su padre.

Por un momento pensé que me gritarian incluso me correrían, pero no, Daniel y Ally se abalanzaron sobre mi, pude oír unos sollozos así que me puse a su altura.

-¿por que lloras campeón?

- por qué ahora se que tengo un padre, que.... ¿Me quieres?

- demasiado

- un padre que me quiere - dijo y me abrazo

En cambio Ally solo cubría su rostro en mi pecho y susurro un leve pero audible <<Papi,no nos vuelvas a dejar>> claro que no, nunca los dejaré, ya los encontré, más bien me enteré, por eso no los dejaré ir nunca, no los dejaré como alguna vez deje a Paula, no señor esta vez no.

Volviste [Parte 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora