Capítulo 13 { Parte II }

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—Será mejor irme, no quiero molestar —dijo Dan empezando a caminar hacia atrás en dirección a la puerta.

—No estorbas, además esto será rápido.

Primero empecé a examinar a Mike. Tomé mi estetoscopio, revisé su abdomen y su cicatriz que ya empezaba a verse mucho mejor. La herida parecía bien y ya le habían quitado las puntadas. No había rastros de infección.

Luego me dirigí a Kya. Sus heridas en el rostro se veían mucho mejor, al igual que la del brazo y en cuanto a su torso y su pierna no podía saberlo con exactitud, pero todo estaba en orden. Ninguno de los dos se quejaba de dolores fuertes, solo dolores incómodos.

Mientras examinaba a Kya, sentía la mirada de tres pares de ojos en mi espalda, no quería que se sintiera incomoda así que me puse a platicar con ella.

—¿Te hizo mucho daño tu novio? —Fue lo primero que se me vino a la mente, aunque no era el mejor tema de conversación.

—Se fue con otra tipa —dijo con el ceño fruncido—. Es un estúpido.

—Ya lo creo —dije también frunciendo el ceño.

Pude percibir que, aunque no quería darle demasiada importancia, la decepción que sentía hacia él era enorme.

—Hombres —murmuró torciendo el gesto y luego sacudió su cabeza—. Y ya que estamos en el tema. ¿Qué hay de ti? ¿Tienes novio Amy?

—No —dije riéndome entre dientes—. Digamos que por mi profesión las relaciones sentimentales son algo difíciles.

—Oh.

—Pero no pierdo la esperanza de que algún día llegue alguien que entienda lo que hago y que entienda lo importante que es para mí.

—Ya lo encontraras — dijo ella animándome.

—Y tú también, seguro que hay uno o varios chicos muriéndose por ti. —Le guiñé un ojo y ella se rio.

Me separé de Kya y me di la vuelta. Los tres chicos habían estado mirándonos y escuchando nuestra conversación, sus caras eran de incomodidad, como pensando en las palabras adecuadas que debían decir, aun así, ninguno de ellos habló.

—Ya está —dije en un suspiro—. Los dos están muy bien, pronto ya estarán listos para irse. ¿Han estado comiendo bien?

—Por supuesto —dijo Mike sonriente—. A Kya le encanta comer, así que por ella ni te preocupes.

—Hey, mi relación con la comida es especial —bromeó ella.

Michael se rio y le guiño un ojo, siendo todo un coqueto.

—Quiero pensar que lo que comen es lo saludable y no las cosas malas que venden en las máquinas de dulces.

—Ya no ha vuelto a pasar —dijo Mike entornando los ojos, queriendo parecer inocente.

—Tengan cuidado con eso —advertí.

Me dirigí a Alex, quien estaba recargando en la pared y con sus brazos cruzados. Nos sonreímos.

—¿Siempre vas a ser la sombra de Amy? —preguntó Kya curiosa.

—Si ella lo quiere, por mi está bien yo no me quejo —respondió Alex mirando a la chica—. Me gusta hacerlo, aprendo mucho y además me gusta estar con ella.

Me reí y sentí como mis mejillas comenzaban a encenderse.

—Solo lo dice por quedar bien. Seguramente que para otros días ya no va a querer hacerlo.

Little bit of medicine, little bit of love. [Disponible en Físico]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora