capítulo 7

3.2K 444 286
                                    

Después de como unas dos largas horas, Lee me dejó descansar; la primera hora me enseño lo básico de la defensa y en la segunda hora fue el baile.

Yo creía ser “bueno” en el baile, pero rayos, Lee era un jodido dios, se expresaba sumamente bien en cada movimiento, vivía cada melodía y su estilo libre en este era simplemente impecable, me sentía humillado.

—¿Tengo algo en la cara?.– Lee preguntó e interrumpió mis pensamientos al igual que me hizó reaccionar, ni yo sabía cuanto tiempo llevaba mirándolo.

—N-no, ¿c-cómo creés? Tú,– genial, estaba nervioso, ya empezaba a hacer ademanes con mis manos. Ni yo sabía que responder, ni mucho menos el por qué del que me quedé viéndolo, aunque no iba a negar que se veía sexy de esa manera; traía el pelo revuelto con algunos mechones cayendo en su rostro húmedos (al parecer del agua de su botella) y una toalla en el cuello.– bueno, ya sabes, eres muy sexy y guapo, jajaja.

Instantáneamente Minho encarnó una ceja.

Mierda, mierda, demasiado gay

Sonó muy gay.

—Me refiero a que eso te lo deben de decir tooooooodas las chicas del Distrito.– alargue la ‘o’, patético.

—No sólo las chicas, – solto una pequeña risa– pero gracias de todos modos.

Respire internamente, estaba rojo de vergüenza por lo que había dicho, y más por lo último, aún no lo captaba bien. Lento, lo sé.

También agradecía que Jackson se había ido, y, por lo que tengo entendido, la razón era por el “pequeño de Chan”, tal vez su mascota, I don‘t know, eso me salvó de pasar muchas vergüenzas.

Estaba pensando que esto no era tan malo, de lo que empezaba a tener más conocimiento, claro, como las clases de sustancias; Minho explicó que ahí te ayudaban a identificar las que podrían ayudarte en dado caso y las que podrían hacerte daño, como llegar a la muerte.

También había de artes marciales, como de habilidades vocales. Todo tipo de destrezas, prácticamente como Kingsman, era como una tipo fantasía que tenía de adolescente, y ya no era una simple película que veía, ahora la podría vivir.

No era lo que cualquier personita en el mundo quisiera vivir, pero era interesante, vivir toda esa adrenalina, woah, era un tipo sueño frustrado para mí.

Un sueño de miedo, acción y muerte.

—Dame clases particulares.– dije mirando hacia la nada.

—¿Cómo dijiste?

—¿Das clases particulares? –gire para mirarlo, sus profundos ojos me miraban, como analizándome.

—Cariño, yo no soy profesor, soy sólo un egresado más, tú tienes qu–...

—Eres él mejor egresado, si no no estuvieras aquí.– interrumpí.– Y yo.. Quisiera que me enseñaras.– baje mi mirada y empecé a jugar con mis dedos, tenía demasiada vergüenza.

—Uhm... –puso su mano en su mentón, lo estaba considerando.– ¿por qué debería de aceptar? –dijo con voz burlona.

Carajo. Me arrepentía de haber hecho la pregunta.

—Eh, porque... Soy nuevo en esto y, realmente no quiero morir...– dije apenas audible.

Era cierto, tenía miedo, no sabia completamente nada. Mi única opción era aprender, prepararme, y si a Minho lo habían mandado era por que es bueno es esto.

R e p u t a t i o n ; Minsung.Where stories live. Discover now