Síndrome de Estocolmo [ziall]

Capítulo 7

Al menos, el resto del camino estuvo bien, sin ningún tipo de accidente como el anterior, le quedaban cinco minutos para que tocasen el timbre de clases. Fue a su casillero y una vez más se sintió una mierda. Alguien había escrito en la puerta de este con unas enormes letras color negras: Faggot. Cuando los estudiantes lo vieron llegar comenzaron a reírse por el bonito mensaje que le habían dejado en el casillero. Lo abrió con nerviosismo, metió lo que necesitaba en su mochila y cerró el casillero con rapidez, sus orejas ardían al igual que sus mejillas y otras partes de su cara. Los chicos se burlaban de él y las chicas hacían comentarios ofensivos sobre lo delgado y bajito que era.

-¿Niall? ¿Qué sucede?...-los amigos de Jazz se acercaban por el pasillo. Todos ellos estaban confundidos con lo que estaba pasando.

-¡¿Quién escribió eso?!-exclamó aquel rubio que casi era novio de su amiga, todos callaron.

-¿Les parece gracioso? ¿Por qué no mejor pintamos todos nuestros casilleros con palabras como: puta y joto? ¿Les gustaría?-reclamó el más alto. Los demás comenzaron a mirarse entre sí, tal vez habían reflexionado sobre todo eso, Niall lo dudaba.

-Por Dios, dejen sus idioteces. Todos sabemos que Niall es un maricón de mierda-Jason había hablado.

-¿Maricón? ¿Niall? Pensé que maricón era el sinónimo de Jason-ya estaba claro que Michael no era de los chicos que se quedaban callados. El grandulón se le acercó.

-¿Qué dijiste, rubia?-tomó el cuello de su camisa con la intención de alzarle del suelo-¿Eres su novio como para estar defendiéndole?

-¿Y tú eres el dios de los maricones para decirle si lo es o no?-Jason acercó su puño, Niall jaló a Michael del hombro para que se detuviera.

-Mike,es suficiente, déjalo...

-Hazle caso a tu novio-el bravucón lo empujó contra los casilleros. El más bajo le alzó el dedo medio mientras estaba de espaldas.

El chico con el cabello rubio oscuro y ondulado jaló del hombro a Michael, lo último que querían era presenciar una pelea entre esos dos para después meterse y terminar con las narices sangrantes. Los cinco salieron al patio de la escuela por donde estaban las canchas de fútbol y baloncesto.

-Mike, eso fue demasiado...-dijo Niall dándole una botella de agua.

-No lo creo, no llegó a romperme la boca por lo que dije-respondió el de ojos verdes abriendo la botella y dándole un trago.

-Leprechaun, ¿por qué escribieron eso en tu casillero?-preguntó el rubio más alto.

-Me tratan así desde hace años-se cruzó de brazos sin atreverse a mirarlos, se concentró mucho más en sus pies y el hambre que sentía al no haber desayunado nada al salir de casa.

-¿Y no has hecho nada para cambiarlo? ¡Niall, van a salir matándote si siguen así!-el chico del cabello negro le había dicho una verdad que jamás podría evitar.

Niall lo miró con los ojos cristalizados haciendo notar aún más el color azul de estos. El timbre de clases sonó y Horan comenzó a caminar en dirección hacia el edificio en el cual se encontraba su salón de clases, se despidió de ellos y dijo: "Los veré en el almuerzo", aunque deseó no haberlo hecho. Para ese entonces tendrían la oportunidad de acorralarlo y sacarle toda la información que pudieran y seguido de ello le saldrían con un discurso de 10 minutos sobre lo mucho que debería tomar la iniciativa de cambiar la horrenda opinión que media escuela tenía sobre él. Al sentarse en su lugar deseó que lo tragara la tierra.