❛❛ Sus palabras son lo más cercano que he tenido a su presencia.❞
¿Has perdido algo en algún tipo de transporte?
Kim Eunmi, perdió la primer carta que decidió enviar a su madre en el metro.
Min Yoongi, ni siquiera sabe porque la leyó...
Min Yoongi leyó la carta al menos tres veces en el día, le emocionaba el hecho de que sus sentimientos, después de tanto tiempo, fueran recíprocos.
Pero también se sentía un tanto confundido al leer que Eunmi quería saber más sobre su familia.
—De tantas cosas que pudiste preguntar, elegiste la más compleja para mí. —Dijo Yoongi a la carta que estaba en su escritorio.
Y es que era tan cierto. Yoongi ama a su familia, después de todo son eso, familia. Ha crecido junto a su hermano, y ha sido aconsejado por sus padres. No podía mostrarse desagradecido por nada, ni siquiera por su desacuerdo en cuanto a la vocación que comienza a ejercer.
—¿Yoongi? —Sonó del otro lado de la puerta. Segundos después la misma puerta se abrió y dejó ver a Seokjin detrás de ella. —Mamá quería ver si vendrías a cenar.
—Si, ahora mismo bajo. Gracias, Seokjin. —La mirada de Yoongi no llegó ni un segundo a la de su hermano, y aún si éste ya estaba acostumbrado, ésta vez le pareció más extraño de lo casual.
—¿Yoongi? ¿Está todo bien? Te ves un poco más serio. —Seokjin caminó cerca de su hermano y miró los rápidos movimientos que el menor hizo con tal de ocultar la carta. —¿Osea que Jungkook no mentía? Realmente recibes cartas de una chica.
Yoongi miró extrañado a su hermano y maldijo a su mejor amigo: —¿Que te dijo? —Preguntó negando con la cabeza.
Seokjin levantó los hombros y trató de tomar la carta que estaba en la espalda de Yoongi. Al conseguir tenerla en sus manos, no le importó que Yoongi tratara de arrebatarsela, pues la diferencia de altura le daría ventaja a Seokjin.
—¿Nunca le has hablado de nuestros padres? —Reclamó Seokjin. —Deberías estar orgulloso de ser su hijo y hablarle a todo el mundo sobre ellos.
—¿Para qué? ¿Para que al momento en el que diga, "Hey, mi padre es Min Jaebok. ¿Te suena? Pues si, si es el empresario más codicioso de todo Daegu y puede comprar la casa de quién sea si él quiere. Pero, ¿Adivina qué? Se avergüenza de tener un hijo como yo; él cual decidió no seguir su codicioso camino y seguir sus verdaderos sueños.", todo el mundo se aleje de mí, como lo han hecho siempre? ¡Pues no! No, Seokjin. No quiero que ella sepa eso.
Seokjin miró y suspiró después de que su hermano menor vaciara todo su tormento. Después dejó la carta en el escritorio y caminó hacia la salida con pasos silenciosos.
—La cena no tarda en enfriarse, por favor apresúrate. —Murmuró Seokjin al salir de la habitación. Yoongi miró el caminar de su hermano y después de que éste desapareciera de su vista, miró la carta y bajó la mirada.
—No quiero mentirte, Eun. Pero tampoco quiero que sepas la verdad.
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