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Mi tranquila vida en Seoul me gusta, soy de aquellas personas a las que les gusta ser positiva aunque parezca que todo se ha ido a la mierda. Vivo con mi Abuela desde que nací, solo somos nana, yo, y mi hermana mayor Seulbi; no recuerdo a mis padres, están en mi mente solo por fotos que me han enseñado e historias sobre sus viajes y aventuras, curiosamente aquello les llevo a la muerte; después de darme a luz emprendieron un viaje a Sudáfrica de donde no volvieron jamás. Pero no es día para mi drama, el sol iluminaba mi blanco cuarto entrando por la ventana y el clima por fin era más cálido.

Es el primer día de preparatoria después de las largas vacaciones de invierno que pase en su mayoría encerrada viendo series y comiendo comida chatarra, evitando algunos problemas que deje a fin de curso. Pero el curso de la vida seguía y yo también, así que coloqué el Vol. 1 de un mixtape que Yoongi me regaló y comencé a prepararme para el día.

Cabello lacio, listo, uniforme lindo y planchado, listo, un poco de maquillaje, listo, perfume y un lindo collar que me regalo la abuela para mi cumpleaños número 18, listo. Tome mi bolso y baje a la cocina donde mi hermana preparaba el desayuno de prisa, Seulbi es estudiante de diseño en la universidad es por eso que siempre anda con prisas cargando miles de cosas, siempre ha sido mi confidente y amiga, nos adoramos. Las chicas Park contra todo y todos para siempre.

—Haesun, todo está listo, desayuna bien y estudia mucho— corrió plantando un beso en mi frente para después correr hacia la puerta.

Termine mi desayuno y salí a esperar a Dara, mi mejor amiga desde que tengo memoria. Dara pasa por mi desde que obtuvo su licencia de conducir hace 2 años cuando teníamos 18, por mala fortuna, o mala coordinación en todo este tiempo yo no he podido conseguirla.
Vi llegar a la adorable chica en su beetle azul y subí de inmediato fundiéndonos en un cálido abrazo.

—Se que nos vimos la semana pasada pero te extrañé.

—Es nuestro último año de preparatoria Haesun, ¿puedes creerlo?

El tiempo pasó rápido, parece que fue ayer cuando era el primer día del jardín de niños y juré amistad eterna con Dara y Hyebin, siempre hemos estado juntas de pequeñas jugábamos a ser las chicas súper poderosas puesto que Hyebin es una chica rubia de rasgos finos adicta a la moda, Dara tiene el cabello rojizo, es más pequeña y adorable y yo una chica alta, delgada con el cabello negro feliz de tener a sus dos amigas.
Sin ofender al resto.

—¿Has hablado con Hoseok?— cuestionó Dara mientras mantenía su vista en la carretera.

—No desde aquel día, no es fácil para mi ¿sabes?

—Lo imagino.

—Años y años de amistad, no quiero perderlo solo porque las cosas entre nosotros no funcionaron como pareja— tome mi frente y retire mi cabello hacia atrás —Intentaré arreglar las cosas, quedar como los buenos amigos que hemos sido toda la vida, ¿tu haz hablado con el?

—Lo tope en la cafetería el otro día, no se veía bien siendo sincera— me dio una pequeña mirada y regreso su vista hacia enfrente —Pregunto por ti, le dije que no te había visto, lo más preocupante fue que no sonrío en ningún momento.

—Ay Hobi— exclamé con preocupación.

—Estará bien, el chico es un sol, saldrá de nuevo cualquier día.

Y era verdad, no conocía una persona más feliz y amigable que él.

—El primer día del último capítulo— dije acompañado de un suspiro al llegar a la preparatoria, era un edificio grande de ladrillos, parecía una edificación antigua, era arquitectónicamente hermoso, nadie se imaginaría la clase de dramas que se desarrollan ahí dentro.

—Este año me uniré al club de danza— comentó Dara mientras caminábamos hacia la gran y antigua puerta de madera —¿Has pensado en cual te unirás? Este año es obligatorio.

—Ni idea, creo que cocina estaría bien.

—Estoy de acuerdo en eso no queremos volver a quemar la cocina de tu casa.

—¡Haesun! ¡Dara!— Hyebin corrió hacia nosotras armando un añorado abrazo entre las tres, había echo arreglos a su uniforme, está chica nunca pasaría desapercibida a donde quiera que fuera.

—¿De que hablaban?

—Clubes— conteste sonriendo y tomando su mano.

—Definitivamente canto, este año seré la reina de la preparatoria y necesito prepararme.

—Oh, chico lindo a la derecha, debe ser nuevo definitivamente recordaría ese espécimen.

Hyebin y yo volteamos sincronizadamente, con unos cuantos papeles en sus manos un chico alto de tez clara caminaba mirando atento a lo que llevaba en sus manos, su negro cabello caía sobre su frente, los pantalones del uniforme los llevaba ajustados y unos pequeños dobladillos en las cortas mangas de su camisa hacían resaltar unos marcados bíceps.

—Encontré al futuro padre de mis hijos— susurró Hyebin hacia nosotras, Dará río y yo seguí observando aquel bello caminar.

Alzó su mentón y sus ojos negros se encontraron con los míos mientras mis amigas hablaban de alguna boda imaginaria, giré mi cabeza antes de que el tiempo mirándonos se tornara incómodo y seguimos nuestro camino.

—¡Hobi!— gritaron mis amigas al unísono dejándome atrás.

Es mi ex novio, pero también es nuestro amigo desde pequeñas.

Saludó a las chicas y avanzó hacia mi, con una mueca neutra.

—Haesun, co ¿como has estado?

—Bien, supongo, ¿como has estado tu?— sonreí queriendo reconfortarlo pero no parecía generar mucho efecto.

—Bien, igual, digo supongo podría estar mejor— tomó sus manos en nerviosismo y fingió una sonrisa para mí —Quede de verme con Yoongi en las mesas de afuera, nos vemos en un rato— dijo para todas.

Se alejó desapareciendo entre la gente en su caminar rítmico. Perdóname Hobi.

—Bien, entonces vamos a clases— dijo Dara haciéndome voltear y reincorporarme a la vida.

Siempre tomamos las mismas clases en el mismo horario y este año no sería la excepción, dejé algunas cosas en mi casillero y tome solamente mi libro de Literatura, al voltear sentí mi frente chocar contra algo duro azotando con mi trasero en el suelo.

—Ouch— solté un agudo quejido mientras sobaba mi propia frente.

—Perdón, perdóname, estaba buscando mi clase en este inútil mapa que me dieron y no estaba viendo, soy un idiota, déjame ayudar.

Tomó mis antebrazos ayudándome a ponerme de pie alce la mirada y vi a aquel chico, el chico guapo del pasillo sosteniéndome con sus fuertes brazos concentrando en no lastimarme, miro directamente a mis ojos y sonrió.

—Jeon Jungkook, el idiota de los pasillos— se presentó a si mismo extendiendo su mano hacia mi.

—Park Haesun, química II— alce mi libro mostrándoselo, no podría ser más patética en ese momento.

—Oh, ¿química II salón 305?— miro una de sus hojas.

—Si, ¿la tomarás?

—¡Si! Es lo que estaba buscando.

—Creo que lo encontraste— sonreí hacia el y comenzamos a caminar hacia el aula.




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Nueva historia 🌼

Flower Brothers | el hermano de mi novio jjk❁kth Where stories live. Discover now