La mujer del panteón-parte 2-

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En el panteón

Black hat miro hacia la colina donde los pétalos había llevado el viento, frunció un poco el ceño al ver que esos pétalos formaban a una bellísima mujer, una mujer que vestía un hermoso vestido corte sirena color blanco, con elegantes y delicados guantes de encaje y con un hermoso sombrero blanco con hermosas flores amarillas adornadas.

Black hat miro la figura de la mujer intrigado pues en todos sus años jamás habia visto que un ente o una criatura se moviera con esa elegancia más propia de él que de cualquier otro, miro como la mujer giraba la cabeza con elegancia, con una gracia sin igual propio de la realeza o de la nobleza, sus ojos se agrandaron cuando la vio de frente.

Ella era hermosa, más hermosa que cualquiera de las villanas u otras criaturas que el había visto en todos sus años y en diferentes dimensiones, ella era morena, su piel oscura cual caramelo, llevaba debajo del sombrero una larga trenza negra adornada con miles de flores amarillas, sus ojos eran de un café oscuro, sus labios eran carnosos y sensuales, sus hermosos ojos castaños estaban enmarcados en unas hermosas y tupidas y largas pestañas, black hat estaba anonadado, era una mujer muy hermosa, por un momento se quedó sin palabras, solo viéndola, quiso acercarse claro por estar en un panteón era difícil no hacer ruido. Logro acercarse almenos un poco hacia ella antes que la mujer se diera cuenta de su presencia, era difícil no hacerlo ya que black hat emanaba un aura muy poderos, su energía maligna la paralizo por completo.

Ella giro la cabeza y lo vio, vio a ese caballero con la mirada fija en ella, él era alto con su energía era oscura y aterradora, era muy poderosa, el vestía un elegante traje con una camisa roja, pantalón sastre color negro, gabardina negra, corbata negra y un chaleco color gris, era la primera vez que veía alguien tan poderoso como el, llevaba un sombrero de copa y un monóculo en su ojo izquierdo.

Sus ojos eran de un profundo negro, de una profunda oscuridad por un momento ambos quedaron inmerso en la mirada del otro, Black hat estaba en shock, no podía hablar, no sabía que le pasaba solo sabía que no podía dejar de verla, ella también estaba en shock, él quiso acercarse a ella pero ella retrocedió asustada por su aura tan fuerte escapo en un flujo de pétalos como ella apareció Black hat se quedó en la colina mirando hacia la nada, no entendía que acaba de pasar.

Se froto las cienes pensando que era solo una alucinación pero sabía que no era cierto, había visto a alguien esa colina, a una mujer muy hermosa, desconcertado bajo de la colina y se dirigió en la salida del panteón ahí encontró al velador del lugar, el señor como toda persona de esa avanzada le dijo A Black hat muy buenas noches, Black hat podría ser un villano pero era muy educado con modales impecables y con indiferencia le dijo muy buenas noches Black hat se disponía a salir y regresa a la casa de su padre cuando se detuvo y se giró al velador.

-Disculpé- Dijo Black hat- Quisiera que por favor sí reconoce a una mujer de larga trenza negra, con sombrero y vestido blanco y ojos cafés-

-A lo mejor viste a la Catrina- Intrigado

-¿La catrina?-

-Sí, es una aparición un fantasma de aquí, ella vigila a los vivos y ayuda a los muertos a cruzar al otro lado, aun lugar donde siempre es fiesta y donde ella vela por sus almas.

-¿A si se llama la catrina?-

-Sí, así es... O es lo que dicen los habitantes de este pueblo, veraz joven, la catrina se originó durante los gobiernos de Benito Juárez, Sebastián lerdo de Tejado y Porfirio Díaz. En esos periodos, se empezaban a popularizar textos escritos por la clase media que criticaban tanto la situación del país como las clases privilegiadas. Los escritos, redactaban de manera burlona y acompañados de dibujos de cráneos y esqueletos, y empezaron a reproducirse en los periódicos llamados de combate. Estas eran calaveras vestida de ropa de gala, bebiendo pulque, montadas a caballo, en fiestas de alta sociedad o en un barrio. Todas para retratar la miseria, los errores políticos, la hipocresía de una sociedad, como es el caso de la Catrina. Le seré sincero joven yo jamás vi a esa mujer pero si me han contado que ella aparece en los cementerios en la madrugada sobretodo en el Día de los muertos....Ahora me despido, tengo que volver a casa, mi mujer preparo unos rico tamales de carne- Se va

Black hat regreso a la casa de su padre y en sus pensamiento estaba presente el rostro de aquella mujer, él quería verla para preguntarle quien era.

Mi hermosa catrina (Black hat)Where stories live. Discover now