Little Little |Lee Jeno (NCT) & Tú|

Cap. 9: Rebirth

Narra ______.

—¿Estás consiente de cuantas llamadas he recibido de la escuela? —se quejó mamá luego de cortar la llamada que supuse que venía de la escuela.

—No. —respondí sin importancia alguna. Realmente no me importaba la escuela o que tan exigente era la gente de ese lugar.

—Esta es la tercera vez en el mes. —miré a mamá con expresión de "¿Y eso qué?" Y ella rodó los ojos. —Espero que Jisung sea menos problemático que tú.

—Seré un artista y me convertiré en el mejor Idol del país. Todas mis fans gritarán mi nombre artístico que será Jun. —Jisung sonrió inocente hacia mamá.

—Puedes usar tu nombre real. —sugirió mamá olvidándose por completo que me estaba regañando hace unos segundos.

—No, omma. Si uso mi nombre real, no será divertido. Además, Jun es un nombre genial. —él tomó su mochila para ir a la escuela y luego sonrió hacia mí. —¿No vamos, Noona?

—Sí, claro. —dije y tomé la mano de Jisung para salir lo más pronto posible o sino a mamá recordará que me estaba regañando.

—Noona, recuerda que debes llamarme por mi nombre artístico. —recordó. Ese nombre lo ha tenido en la mente desde hace unos meses atrás, es tan exigente con que lo llame Jun que hay veces en las que olvidó su propio nombre.

—Está bien, Jun. —le dije dándole una sonrisa. Al único que le daba cálidas sonrisas era a Jisung ya que él es pequeño y siempre me alegraba el día sin siquiera intentarlo. Es como una vitamina humana que anda caminando todos los días.

Luego de haber dejado a Jisung como lo hacía la mayoría de las veces, me fui a la escuela la cual asistía y me hartaba de ir. Siendo sincera esperaba que la escuela terminase pronto para comenzar a hacer mis cochinadas yo sola. No es que yo quisiera estudiar, pero lo único que me gustaba era a Red Velvet y no podía imaginarme hacer otra cosa más que ser su fan.

Hablando de Red Velvet... La hermana de perro radioactivo, me había saludado a lo lejos luego de dejar a Jun en su escuela y me pareció extraño que aún me recuerde. ¿Por qué le agradaría alguien como yo? Los niños siempre huían de mi cada vez que venía a buscar algunas veces a Jisung, me tenían miedo. Y eso que a mí me agradan los niños... Solo un poco.

—Hola. —dejé de mirar el suelo y levanté la vista hacia Jaeno. El me sonrió con esa sonrisa de cachorro bien portado. —¿Estás mejor?

—¿Eh? —lo miré confundida y luego recordé que me torcí la muñeca. —Ah... Eso no te importa.

Volví a ser la misma que era siempre y caminé más rápido para perderlo. Cuando vi que él dejó de insistir y dejar que me fuese tranquila, me sentí aliviada, pero otra parte me decía que era extraño que no lo haya hecho. Solo por curiosidad, giré mi vista hacia atrás para ver si seguía atrás de mí. Lo estaba, pero esta vez estaba acompañado por Kwon Eun Bin.

Kwon Eun Bin es la chica que me detestaba a más no poder, y yo la detestaba a ella. Ella ha comenzado a odiarme desde que me negué a jugar con ella en Kinder, sé que suena infantil, pero ella no comprendió que no quería jugar con ella y la empujé ganándome su odio. Y ella se ganó el mío por testaruda.

Siguiendo con el tema, ella estaba junto a Jaeno, y él le sonreía como solía hacerlo conmigo desde que lo conocí, pero a diferencia que tenía un ligero rubor en las mejillas y se notaba más alegre... Bueno, todo él cambió frente a ella.

No me molesta, en lo absoluto.

Aunque eso fue extraño, así que volví mi cabeza hacia en frente y le resté importancia a Eunbin y a Jaeno. No me interesaba que ellos hicieran lo que hicieran.

—¡Jeno, eres tan divertido! —la escuché exclamar. Las risas siguieron y comenzaron a fastidiarme a cierto punto de comenzar a caminar más rápido casi corriendo por llegar a la escuela.

Cuando lo hice, ellos estaban muy atrás. Pero para mí mala suerte, el director me hizo una seña con el dedo y yo le hice una reverencia para luego comenzar a huir. —Seok ______. Ven aquí.

—¿Yo? —me hice la desentendida y me acerqué a él fingiendo desconcierto.

—Vamos a mi oficina. —sugirió y caminé detrás de él hasta llegar a su oficina y sentarme en la silla que frecuentaba a veces.

—¿Por qué me llamaba? —pregunté algo seca y él se sentó frente a mí.

—¿Sabes cuántas veces he pedido que llamen a tu casa? —preguntó y yo recordé inmediatamente a mamá.

—¿3 veces este mes? —él asintió suspirando.

—No hemos querido echarte de la escuela luego de haber golpeado chicos a montones e insultar a nuestros profesores. Pero... Esta vez hemos considerado poner una última advertencia.

—¿A qué se refiere?

—A que esta es la última advertencia antes de que te echemos de la escuela. —dijo juntando sus palmas y hacer una línea recta en sus labios bajo el bigote. —No queremos alumnos problemáticos en nuestra escuela, así que es mejor que comiences a comportarte como una niña de tu edad y dejes de amenazar niño, ¿Escuchaste bien?

—S-sí. —bajé la mirada fingiendo estar apenada, pero realmente estaba buscando una salida a su mirada llena de enojo.

—Las condiciones serán que empieces a tener aprobadas las 5 materias reprobadas. Para eso puedes elegir a los mejores de tu clase o de las otras. Por eso, te sugiero estas personas las cuales podrían ayudarte. Y por favor, Seok, no hagas lo mismo que en la anterior escuela. —el director me entregó una hoja de papel y observé los nombres inscritos en ella. Solo habían 4 los cuales eran de las cuatro clases. —Eso es todo. Puede irte.

Quise aventarme por la ventana antes que pedirle ayuda a alguno de ellos, y eso no es todo, uno de ellos era Lee Jae No y Kwon Eun Bin. Sabía que Eunbin era la mejor de mi clase, pero jamás le pediría ayuda a ellos. Mucho menos a los otros, no los conocía y terminaría odiándolos. Así que solo tenía una opción y la detestaba más que nada en el mundo.