Soy una Chica

Capitulo 8: ¿Qué tiene Taylor que vuelve gays a todos los chicos?

- No soy un perro, no necesito que me chiflen para mirarlos, pueden llamarme por mi nombre o venir aquí – dijo ella.

- Me llamo Paul – dijo él para romper el hielo.

- Taylor – dijo ella – eres como Paul McCartney – le dijo con una sonrisa.

- ¿Te gustan los Beatles?– preguntó feliz.

- Soy gran fan – dijo ella.

Paul…

No sé que me pasó, sólo sé que desde que vi a Taylor me enamoré de ella, cuando me dijo que le gustaba la misma banda que a mí, emocionado la tome de la mano y nos fuimos corriendo, ella asustada me preguntaba que a dónde íbamos, yo le dije que a la sala de música, quería cantar con ella. Si ella canta bien está claro que ella es la chica con la que siempre desee. Cuando llegamos a la sala de música tomé la guitarra y comencé a tocar “Hey, Jude” ella sólo notó cuál era la canción y feliz se sentó en la silla que estaba enfrente del piano y comenzó a tocarlo. Después de un rato ambos comenzamos a cantar. ¿Cómo describir su voz? No sé sí era mi emoción o no, pero noté que su voz era idéntica a la del mismísimo John Lennon, nuestros “na na na” era lo mejor de todo. Cuando terminamos la canción me acerque a ella y le dije:

- Tu voz es fascinante… es… es cómo… - no podía hablar de la emoción.

- ¿Cómo la de John Lennon? – Preguntó ella – sí, me lo han dicho mucho.

- ¿Estas pensando en entrar al concurso de talentos que hará la escuela? Seguramente ganarías – le dije emocionado.

- Soy nueva, pienso que esos concursos tiene mucho que ver con tu popularidad, así que lo más probable es que no gane, porque no soy popular – dijo ella de una manera muy realista.

- Es verdad, eres nueva, pero ya tienes fama, ¿no fuiste tú la que ganó el primer lugar en tenis? – le pregunté

. - Si, junto con Harry.

- ¿Ves? Harry es popular, él te está dando popularidad, de aquí a que sea en concurso ya serás popular, aún así tu talento es asombroso, podrías ser famosa si quisieras.

- Deja de decir fantasías – dijo ella.

- Creo que hablar conmigo no te sirve de nada, ¿por qué no lo consultas con una amiga tuya? – le pregunté y ella comenzó a reírse, confundido le pregunté la razón- ¿de qué te ríes?

- Pregúntame cuántas amigas tengo – me decía sin parar de reírse.

- ¿Cuántas amigas tienes? – le pregunté obedeciendo lo que me pidió.

- ¡Ninguna! - Las chicas normales suelen tener amigas – le dije.

- Digamos que yo no soy normal – dijo ella – tengo amigos, más no amigas, hace años tuve, pero cómo me acabo de mudar estoy comenzando de nuevo.

- ¿Es difícil socializar para ti? - le pregunté, pues bien podría haber hecho amigas en estos días.

- No, lo que pasa es que Harry no me suelta, siempre estamos juntos.

- Espero que no le moleste que pases tiempo conmigo… digo si quieres volver a platicar conmigo – le dije sonrojado.

- ¡Claro que me gustaría hablar contigo! – dijo ella feliz