Capítulo VIII

6.5K 491 243
                                    

No puedo creerlo. De verdad intentaba pensar con claridad que coño hice. La besé. La besé joder. Iba demasiado rápido, joder. Me estaba maldiciendo a mí mismo en mi despacho pensando con claridad lo que sucedió ayer en mi casa. ¡Yo no me comporto así! ¿Qué estás haciendo conmigo? ¡Maldita sea! Y encima le dije de quedar este fin de semana. ¿A donde la llevaré? ¡Joder, muchas cosas que pensar!

Me siento como un adolescente enamorado. Eso sonó demasiado cursi para mi gusto. Hasta mis ansias de fumar aumentaron en donde no he parado en ningún momento. Apagaba uno y encendía otro. Nunca me he puesto así, ni siquiera con Hina. Me golpeaba mentalmente siendo un gran idiota. No es que me guste la chica, pero siento que voy rápido y la estoy asustando.

Ayer mismo, cuando regresábamos a su casa, ni siquiera me miró la cara. Estaba tan avergonzada de lo sucedido. Ni siquiera le di un beso de despedida porque sentí que la incomodaría. Y esta mañana no le mandé mensaje alguno. ¡Joder Smoker! ¡Ten el puto valor y háblale para saber si al final quedáis o no! Pero ¿dónde pienso llevarla? No es tan difícil, maldita sea. Quiero que sea perfecto y que no la pueda joder. Me estoy preocupando demasiado.

Escucho como alguien toca la puerta de mi despacho.— ¡Pasa!

—Smoker-san. —La voz de Tashigi resuena, aunque escucho alguna que otra tos.— Abriré la ventana.

Cierto. Ni siquiera abrí las ventanas. Estos pensamientos me están carcomiendo demasiado que hasta ni podía pensar con claridad. El humo va desapareciendo poco a poco dejando la sensación de que una persona puede respirar tranquilamente.

—Le traigo el informe de ayer.

Ah, es verdad. Ayer fue el juicio de Foxy, por lo que me dijeron fue todo un éxito. Han encarcelado a ese maldito por veinte años. Yo le hubiera puesto una condena perpetua donde no saldría de la cárcel. Asiento con la cabeza agradeciendo a la chica que lo trajese.

¿Ella puede ayudarme? Smoker, por favor, le vas a pedir ayuda a una simple mocosa que seguramente no tiene mucha experiencia. Pero nos conocemos desde hace mucho tiempo. Puede ayudarme con esto. No es difícil preguntarlo, ¿verdad?

—Tashigi. —La llamo antes de que se marchara.— ¿Puedo pedirte un consejo?

La joven se me queda mirando impresionada por mi pregunta.— Claro, Smoker-san —cierra la puerta sabiendo que esto es privacidad.— ¿De qué se trata?

—¿Qué sitio me recomendarías para una cita?

Pude ver el rostro de Tashigi asombrada que se acerca hacia mi mesa. Se sienta y me mira decisiva, colocándose las gafas.— ¿Está saliendo con alguien?

—Algo así.

—¿Algo así?

—No somos pareja definitivamente, nos estamos conociendo.

—¿Y cuánto llevas conociéndola?

—Esto parece un interrogatorio. —Y es la verdad. Las preguntas de esta chica me sacaban de quicio.

—Lo siento, Smoker-san. Pero quiero ayudarle. —Sinceridad ante todo.

—Llevo como una semana —respondo a la pregunta.

—¿La conozco?

—Demasiado diría yo.

Veo como alza la cabeza a modo pensativo como queriendo recordar a alguna chica que haya mantenido contacto un tanto íntimo. Y sus ojos se agrandan. Creo que ya sabe quién es.

—¿No me diga que es aquella chica rara que es amiga de Zoro? —¿Rara?

—¿Como que rara? —Eso me ha molestado y se ha notado por el tono de mi voz.

Amar a una "gorda" (Smoker x Reader)Where stories live. Discover now