- ¿Te lo he demostrado, lo suficiente? –le volvió a susurrar mientras seguía abrazando su cintura y le apartaba el cabello de la cara con la otra mano-.

"Suficienteee dice la tía... y estoy como un boquerón... por Dios, que calentura me da esta chiquilla, coño"... pensaba mientras se reponía del recibimiento.

- ¿Disfrutas poniéndome caliente, a que sí? –Alba no pudo contenerse, su sonrisa de satisfacción era casi insultante, y ella estaba demasiado agitada para tratar de encontrar una salida por la tangente-.

- jajjajajja... un poquito... -se rió la morena que la liberó del abrazo-... no puedes culparme por ello, he de aprovechar mientras me respetes......

-... pues tú ten cuidado, a ver si voy a perder los papeles y se me olvida que he de respetarte, eh bonita... jajjaja ... -le amenazó Alba entre risas mientras volvía a echar cuenta de la mochila que había traído consigo-. Anda, ayúdame a llevarla a la habitación.

Ella no preguntó, simplemente hizo lo que le pedía.

- Joder, cómo pesa... ¿pero qué coño llevas ahí dentro? –preguntó finalmente mientras soltaba la mochila y se dirigía a la cama para sentarse-

- Oh bueno, lo típico... consoladores, disfraces, esposas, látigos... -le espetó de golpe sin tan siquiera mirarla-.

A Natalia no le dio tiempo de atinar a sentarse en la cama, así que su culo paró en el suelo.

- auuuuuuuuuuuu.... Que daño... -soltó por el impacto-.

-¡DIOS, te has caído literalmente de culo!... jajjajaja... -se reía de ella la rubia que no podía entender lo impresionable que era-.

- jajajja... coño no te rías y ayúdame... -le pidió roja como un tomate-.

- jajajjajaj.... Pero mira que eres inocente... ¡yo es que me meo contigo, eh! –se burló de ella que no podía parar de reír-.

- ¿Ah sí?... –le dijo Natalia con una ceja levantada mientras cogía la mano que le tendía para levantarse-.

Sin pensárselo, tiró de ella e hizo que callera entre sus brazos. Inmediatamente empezó a hacerle cosquillas.

- Dios... jajjajajja.... Vale.... Jajjjajaja... vale.....jajjajaja... tú ganas.... Kajjajajajaj.... Perdona..jajajjaja –Alba no podía parar de reír, creía que le saldría un pulmón por la garganta-.

Natalia también reía a carcajadas, su risa le parecía de lo más sana y terapéutica. Poco a poco, las risas se transformaron en calma cuando sus miradas se encontraron con intensidad. Alba aún estaba en sus brazos, y ésta la miraba con un anhelo contenido que la inquietó.

- Veo que poco a poco te estás superando –le dijo tratando de descentrar aquella atención que se había impuesto entre ellas-.

- ¿Por? –le contestó sin soltarla-.

- El abrazo de bienvenida, los besos... y ahora, esto –hizo un gesto refiriéndose a que la estuviera sujetando en su regazo-.

- Será que tengo una buena profesora, ¿no? –le dijo Natalia con una dulce sonrisa-.

- O que eres una seductora nata, y tratas de ponerme las neuronas del revés... pero aquí el máster lo tengo yo, gatita... así que prepárate –le soltó Alba de pronto mientras se ponía en pie y la ayudaba a hacer lo mismo entre risas-.

- jajajaja... ¡entendido jefa!... –le soltó ella  haciendo un saludo militar-.

- jajajja... anda, dime que parte del armario puedo utilizar para mis cosas –le dijo la rubia-.
- ¿Tus cosas? –la miró inquisitivamente-.

Sex education. //Albalia.On viuen les histories. Descobreix ara