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4- ¡Pelea de chicas!

FOTO MULTIMEDIA: SIMON WEST (ALEX PETTYFER)

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Ya era de noche y me encontraba cenando en la cafetería. Todos seguían riéndose del cabello de mis hermanos y ellos estaban totalmente enojados.

Me alerté cuando los vi reunirse a lo lejos. Miraban en dirección a mi mesa, donde me encontraba junto con los chicos de mi equipo.

-Están preparando la broma, oficialmente –sentenció Tony mirando de reojo al grupo enemigo.

-¿De verdad hay que esperar a que ellos hagan la broma para que nosotras podamos hacer otra? –bufé.

-Está en el reglamento, Pen –dijo Garret sacudiéndome el cabello.

-Están furiosos –sonrió con maldad Chris, otro compañero de equipo-. Ellos querían hacer la primera broma. En ningún momento creyeron que nosotros la haríamos.

Sonreí, él tenía razón.

-Algo me dice que si pensaban hacer una broma pesada antes, ahora harán una peor –hizo una mueca Tony.

-Su primera broma será embarazosa –dijo David.

-Todas las bromas de alguna manera u otra son embarazosas, amigo –chasqueó la lengua Keegan.

-No me refiero a eso –lo miró con el ceño fruncido-. Conociéndolos, su broma tendrá que ver con... -se calló.

-Suéltalo de una puta vez, hermano –dijo Chris mientras le daba un puñetazo en el hombro.

-Es vergonzoso decirlo –se mordió el labio David-. Ni siquiera estoy tan seguro como para confirmarlo, pero no me extrañaría de ellos...

-Dilo, David –lo animé.

Él me miró y suspiró.

-Tendrá desnudos.

Nos quedamos todos en silencio, y de repente, empezaron a reír. Yo, sin embargo, seguía sin comprender.

-¿Desnudos? ¿A qué te refieres con eso? –pregunté frunciendo el ceño.

-Lo que quiere decir, Penny –habló Keegan-, es que la broma tendrá que ver con dejarnos expuestos. Algo así como robarnos la ropa cuando salimos de bañarnos, ya sabes.

-Diablos, no –negué rápidamente-. ¿Estás seguro de eso, David?

-Algo así escuché cuando pasaba por la mesa, pero no sé si confirmarlo –se removió incomodo en su asiento.

-Hay que estar preparados –dije.

-¿Qué propones que hagamos? –se inclinó sobre la mesa Tony.

-La broma será en cualquier momento, no perderán tiempo. Propongo que... –miré hacia la mesa y me sobresalté al ver que todos nos miraban-. Mierda.

-¿Qué sucede? –me preguntó Keegan poniendo una mano en mi hombro.

-Nos están mirando –dije entre dientes.

-¿Y eso qué? No nos escuchan –se encogió de hombros Chris.

-Tienen a Jamie –habló Tony con el ceño fruncido-. Él es un genio en leer labios.

-Oigan, les mandaré un mensaje con la idea –dije y saqué mi celular. Tecleé rápidamente el mensaje y se los mandé.

-¡No, espera! –Gritó David de repente-. Dejé mi teléfono en la mesa de ellos.