Capítulo 36

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Siento como alguien me toma del brazo fuertemente y me empuja contra la pared por lo cual yo hago una mueca ya que mi cabeza había rebotado en esta.

Nos encontrábamos de nuevo en una de las peleas de Black y al parecer no le agradaba a ninguna de sus admiradoras por lo cual una de esa psicópatas me tenía acorralada.

-Eres una maldita- me dice la chica y le sonrió lo cual hace que le dé más rabia y golpee mi mejilla y al traer un anillo en su dedo me rasguño un poco, definitivamente yo no pensaba ni un poco en mis acciones ya que no debía sonreír.

Ví que la chica estaba a punto de golpearme nuevamente por lo cual trate de empujarla pero tenía demasiada fuerza, logré tranquilizarme un poco cuando ví que Sam se acercaba, después de Sam compartir unas palabras y algunos golpes con la chica ella se fue y Sam me sonrió.

-¿Cómo en los viejos tiempos?- me pregunta divertida y yo le sonrió negando  con mi cabeza.

-Eso era bullying- le digo hablando de cuando estábamos en secundaria- la chica solo tiene celos- ella asiente con su cabeza y me rodea con uno de sus brazos.

-El está furioso- hago una mueca y alzó mis brazos restándole importancia.

Seguimos caminando por los pasillos de esa bodega y después de unos minutos llegamos al camerino de Black.

-¿Dónde mierda estabas?- me dice alzando su voz por lo cual lo miro feo.

-Hey, te vas calmando- lo señalo- esto es tu culpa- señaló mi mejilla y el parece relajarse para acercarse a mi.

-Te dije que no te separaras- intenta tocar mi mejilla pero me alejo un poco.

-Sabes que no me agrada este lugar- digo para sentarme en un sofá que había en la habitación.

-Hablaremos luego- me dice para entrar al baño a cambiarse de ropa, pero apenas da la espalda empiezo a hacerle muecas e imitarlo.

-Y no hagas eso- ruedo mis ojos y me levanto de el sofá para salir de de la habitación.

-Aqui tienes bella dama- me extiende un frasco de agua y se lo recibo con una sonrisa.

-¿Cuánto le das para que salga como un loco?- digo refiriéndome a Black y sus miles advertencias de no alejarme de el.

-10 segundo- yo asiento y ladeó un poco mi cabeza.

-3- pronunció el número depuesto de haber estado contando.

-2- me sonríe Sam y yo río un poco ya que había sentido sus pasos un poco apresurados.

-1, ábrete sésamo- y como si hubiera hecho magia la puerta se abrió mostrando un Black más furioso que antes.

-Te dije que te quedaras- me señala la habitación por lo cual alzó una ceja.

-No tengo que seguir tus órdenes- el suelta una risa sarcástica para luego mirarme de una forma serie.

-En este momento te llevaré a casa- me toma de la mano y empieza a arrastrarme por lo cual golpeó su mano pero parece no afectarle.

-No lo haras- alzó la voz y por supuesto varias personas voltearon a mirarnos ya que el lugar seguía un poco lleno.

-Estas acabando con mi paciencia Alex- vuelve a tomarme de la mano pero la quito rápidamente.

-Me iré con Sam- lo dejo parado y empiezo a caminar de manera apresurada a dónde se encontraba Sam.

Los últimos tres días los había pasado discutiendo con Black, cuando no era por su culpa era por la mía y parecía que el orgullo de ambos ni siquiera nos dejaba hablar de manera tranquila. Las pelas habían estado contínuas desde el momento en que tuve una conversación con Tyler en la cual aclaramos que solo éramos pero Black mal interpretó todo y me mantenía vigilada ocasionando que me estresara de sobremanera.

-Tercera pelea de el día- hago una mueca.

-No sé quién de los dos es más orgulloso- niego con mi cabeza y ella me sonríe.

-El- alzó una ceja y ella se ríe.

-¿Por qué lo dices?- pregunto un poco confundida.

-Tu quisiste hablar y el simplemente te dió la espalda- le hago una seña y empezamos a caminar en busca de un taxi pero antes de parar uno que se aproximaba  Black se detuvo a nuestro lado.

-Suban- mueve la cabeza sin dirigirnos ni una sola mirada, sabía que él esperaba que me hiciera en la parte de copiloto pero me hice en la parte trasera mientras el me miraba por el retrovisor mientras apretaba el volante de manera fuerte.

El viaje fue demasiado largo o al menos así lo había sentido debido a la incomodidad que había en este y por supuesto las miradas que me dirigía Black.

-Gracias- dice Sam y yo me bajo de el auto pero Black me detiene por lo cual volteo.

-Tenemos que hablar- decimos los dos al mismo tiempo.

-Mañana- el asiente y me acerco para depositar un beso en su mejilla- ten linda noche- asiente y enciende su auto para marcharse rápido.

Black.Where stories live. Discover now