Black.

Capítulo 33

-No quiero regresar- le digo a Sam después de que la pequeñas vacaciones que nos dieran se acabarán.

-Yo sí- responde mientras se pinta las uñas- no he visto a Rick- me dice haciendo un puchero-¿Será que ya tiene a alguien más?- hago una sonrisa forzada aunque ella parece no notarlo.

Rick no se había vuelto a aparecer por nuestro departamento y si estuvo con otra chica estando con Sam posiblemente tuviera otra aunque por el momento esperaría un poco para saber si debía bajarla de la nube de Rick.

-¿Sabes?- me pregunta y yo niego con mi cabeza haciendo que ella me mire mal- lo bueno de haber conocido a Rick es que tienes novio- sonrió como tonta y le pongo mis manos a Sam en una almohada para que me las pinte.

-Si, el es increíble- Sam me mira u sonríe mientras empieza a pintar mis uñas de color morado.

Con Black habíamos quedado que pasaría por mi para ir a la universidad el día de mañana y también que iríamos a una feria hoy con Sam. El día paso rápido y al llegar la noche Sam y yo nos encontrábamos listas pero Black aún no llegaba, cuando estaba dispuesta a llamarlo para saber que estaba pasando sonó la puerta del departamento.

-Ve tú- me dice por lo que me quedó mirándola- es tu novio, debes abrirle- hago una mueca y me levanto de el sofá para abrir la puerta.

-¿Qué tal novia?- me sonríe para tomarme la cintura y depositar suavemente un beso.

-Todo se encuentra buen, novio- ambos nos volvemos a besar pero me aparto cuando siento que hay alguien más con nosotros.

-Alex- se acerca y deja un beso en mi mejilla.

-Rick, me alegra verte- digo un poco alto para que Sam sepa que Rick iría con nosotros.

Siento los pasos de Sam apresuradamente, y en menos de un segundo ella ya se encontraba en la puerta.

-Black- le sonríe y luego mira a Rick que se notaba un poco nervioso- Rick- mueve su cabeza en forma de saludo pero Rick al no quedar conforme con eso se acerca y besa su mejilla.

-¿Vamos?- todos asienten y nos dirigimos silenciosamente al auto, era el camino más corto y más incómodo del mundo.

Black me tomo de la mano e hizo una mueca debido a que estaba pensando lo mismo que yo, por otra parte Rock iba al lado de Sam y trataba de hablar pero no le salía ninguna palabra, al subir al coche el silencio siguió presente hasta que escuchamos pequeños murmullos y se trataban de Rick y de Sam, eso era un gran avance porque después de que el la beso en la pelea Sam paso insultando y amándolo varios días.

-Es un avance- dice Black en mi oído para que ellos no escucharán y siguieran disculpándose.

-Los ojos en la carretera- doy un pequeño grito y el se ríe por lo cual lo miro mal- no te rias,- hago un leve puchero- aún tengo la marca de la estampada de la otra vez.

-Siempre te digo que te lo abroches- alza sus hombros riendo.

-algunas veces es bueno llevar la contraria- le tocó con mi dedo la mejilla y luego lo apartó.

-Pues posiblemente seguirás teniendo muchos accidentes- niego con la cabeza.

-Mi cuerpo es de roca- le muestro mis delgados brazos y el deja de mirar por un segundo la carretera para mirarme a mi.

-Estoy dice lo contrario- toca mi frente por lo cual hago una mueca.

-Tengo un novio que me protegerá¿Cierto?- el se queda pensativo por lo cual golpeó suavemente su brazo.

-Siempre- sonrió como una tonta y beso su mejilla.

El camino siguiente en silencio por parte de Black y mía porque Sam y Rick seguían hablando pero parecia que no llegaban a ningún acuerdo, llegamos a la feria y al bajar del auto Black me rodeo con su brazo, al entrar y escoger los juegos volteamos a mirar hacia atrás pero Rick y Sam ya no se encontraba con nosotros.

-Mucho mejor- me guiña un ojo y me toma de la cintura para empezar a besarme.

-¿Ganarás un peluche por mi?- le pregunto en forma de broma.

-Si quieres habría hasta mil- me tomo del brazo y nos dirigimos a una pequeña caseta en la cual se tiraban unas pelotas y si se tumbaban los obstáculos ganas un premio.

-Black- me río y el gruñe- llevas seis intentos, siete- digo al ver cómo fracasa de nuevo.

-No me dejas concentrar- se queja y el dueño de la caseta me mira y ríe.

-Mira y aprende- el alza una ceja y se queda observando, le pago al señor y este me da tres pelotas sin embargo con ninguna pude lograr derribar la torre.

-¿Decías?- me mira de forma burlesca por lo cual saco mi lengua.

-Se me fue la luz cuando tire- digo como excusa pero eso parece darle más risa.

-Mejor sigamos- se ríe y me toma de la mano para caminar a el lago que había en la feria, nos sentamos en el césped y nos quedamos en ese lugar sentados hablando de varias cosas hasta altas horas de la noche o mejor dicho hasta que la feria cerro.