Capítulo 35

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Ciertamente no hay diferencias entre un yonki y yo. Soy adicta a él, lo fui desde la primera vez. Y no quiero parar, con Zayn esa no es una opción válida. Es mi droga, por más de que sienta que estoy fuera de control quiero más. Sus brazos son mi paraíso personal, con una mirada suya alcanzo el Nirvana…

-¿En qué piensas?-me tiene agarrada como hiedra, mientras lee unos documentos en el sofá de su casa-.

-En mi novio-contesto, y le sonrío, él frunce el ceño-.

-¿Tu novio? ¿Yo?-alza ambas cejas y se toca el pecho con el dedo índice-.

-Ajá-asiento con la cabeza. Me incorporo, le quito los papeles y los dejo sobre la mesa de café-.

Me siento a horcajadas sobre él y tomo su rostro entre mis manos, para darle un beso. Sus manos se pasean por mis muslos, caderas y termina enredando sus brazos con fuerza en mi cintura. Comienzo a bajar las manos, que aún están en sus mejillas, para desabrochar su camisa. Tengo una necesidad sobrehumana de tocar su piel ahora. La prenda vuela a alguna parte de la habitación.

Él ayuda a deshacerme de mi camiseta y sin aparente esfuerzo, se levanta conmigo en brazos, enredo mis piernas a sus caderas, siguiendo el beso llegamos a su habitación. Mi espalda choca contra la cama de Zayn, y me besa nuevamente, ahora estando él encima de mí. Me desabrocha los jeans mientras yo me enfrento a su cinturón, todo es terroríficamente natural, nos movemos en sincronía.

Me saca los jeans y esparce besos por mi vientre, produciendo así un cosquilleo por todo mi cuerpo, besa mis muslos, mis piernas y vuelve a subírseme encima. Se lanza a mis labios, devorándome, hundiendo su lengua, explorando mi boca. Sus manos me toman de las caderas y empuja su creciente erección contra mi feminidad, ahogo un jadeo en sus labios.

Baja mis bragas muy lentamente, haciendo lo mismo que con los jeans. Me estremezco y ruborizo cuando siento su aliento en esa zona tan sensible, besa mis piernas y mientras vuelve a subir para besarme otra vez, introduce el índice y lo mueve lentamente, en tanto su pulgar acaricia mi clítoris. Yo doy un gritito y arqueo la espalda. Besando mi cuello, la mandíbula, siento su respiración agitada igual que la mía.

-Estás tan mojada-susurra sobre mi piel, para luego morderla. Agrega un segundo dedo y los hace girar, y un temblor me recorre-.

-Es por ti-musito-.

Inhala profundamente y vuelve a besarme, sus dedos no cesan y mi cuerpo se incendia. Zayn sigue medio vestido y yo sigo con mi sostén puesto. Besa el valle de mis senos, acaricia mi vientre con su mano libre y sus labios suplantan a las caricias.

Ya ubicado entre mis piernas observa mi feminidad con devoción.

-Deja de mirarme-le digo, él ríe y su aliento choca contra mi carne-.

-Me gusta-contesta y yo me cubro la cara con los brazos-.

-Qué vergüenza-mascullo-.

Apenas logro terminar de hablar, cuando su lengua se une frenética a sus dedos. Mierda es tan… orgásmica la sensación, sinceramente no encuentro otra palabra. Retuerzo sus cabellos entre mis dedos, me encanta su cabello, me encanta su lengua. Zayn intensifica los movimientos. Usa todo lo que está a su alcance para complacer, y aprecio eso.

-¡Zayn!-dejo escapar una especie de rugido cuando el orgasmo me atraviesa, él succiona fuertemente, y juro estar viendo lucecitas en este instante-.

Siento más que veo.

Siento a Zayn, subir a mi lado y estrecharme en sus brazos. Siento mi respiración agitada, escucho el sonido de la tela cayendo al piso y el envoltorio de un preservativo romperse. Él vuelve a subir encima de mí. Se me escapa el aire cuando entra en mí, él jadea. Mis piernas se enredan a su cintura y me aferro a su espalda.

Art of Seduction · Zayn Malik AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora