V.Nico

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El azabache debía admitir que visitar a Percy le había sentado bien, ver su sonrisa, su cabello, sus gestos, escuchar esa risa que en sus años pasados le hacía saltar el corazón dejándolo en un estado de innegable idiotez, extrañaba a Percy y no se molestaba en negárselo a si mismo, lo extrañaba mas que a cualquier otro dentro del campamento mestizo, unos días más que a Will, otros días un poco menos.

    Le había escrito una nota para despedirse y esperaba aquello bastará, tras dejarla en un lugar lo suficientemente visible había utilizado un viaje sombra para poder volver al campamento mestizo, ¿desde hace cuanto había aprendido a manejar aquella habilidad? ¿Cuanto había pasado desde que los utilizaba para transportar una increíblemente enorme estatua de una diosa un tanto irritante? Reconocía que había mejorado bastante en aquella habilidad y que está le funcionaba mejor al su cuerpo estar en mejor estado, habían días en que se sentía orgulloso de sí mismo al hacer descubrimiento de sus avances, pero no era algo que le gritara a los cuatro vientos, eran pequeños logros que le hacían saltar por dentro.

-¿Dónde te habías metido? -Unos azules ojos le asaltaban de manera interrogativa, Will se veía resplandeciente como siempre. 

-Fui a comprar, se me hizo tarde-mintió ¿cuál era la necesidad de mentir si no se trataba de nada malo?

-¿Desde cuando utilizas el azul? Es decir, me alegra que utilices ese color, pero... ¿azul océano? No sé si sea muy de ti tipo.

Mierda, la sudadera de Percy.

-¿Haz tenido muchos enfermos hoy?-oh si, grandioso, pregunta evasiva.

    Los dorados rizos de Will se agitaron a Merced de como este negaba con una divertida sonrisa en su rostro, al menos no la había cagado. El hijo de Apolo tomó su mano sin decir ninguna palabra y empezó a caminar en dirección al lago, a Nico le encantaba que hiciera eso, tocar su mano le hacía feliz, ¿tocar la mano de Percy se sentirá igual? Oh no, claro que no, porque... Percy es su amigo, Will es su novio... es su pareja, Percy solo un amigo. El debate mental le daba un dolor de cabeza increíble, solo se aferraba a la mano del otro agradeciendo no mantener una conversación pues el nerviosismo le había ganado ¿por qué pensar en Percy lo ponía nervioso? ¿Por qué seguía usando su sudadera? ¿Por qué le parecía divertido que esta fuera azul? ¿Por qué en momentos se encontraba a sí mismo disfrutando de aquel aroma?

Aquella tarde Will no dijo mucho, tan solo se sentó a su lado a contemplar la belleza del lago, de los árboles que le rodeaban, de la arena bajo sus pies, le gustaba la simpleza con la que el hijo de Apolo se maravillaba, le gustaba la facilidad con la que le cantaban y en medio de versos lo besaba, era un cliché adolescente y aún así le fascinaba, esos momentos le fascinaban.

-Will ¿puedes volver a la enfermería? Un chico de Hermes tuvo un pequeño accidente con una de mis hermanas.

A sus espaldas una bella chica, digna de Afrodita, por supuesto, llamaba como de costumbre a su rayito de sol, igual que siempre, un beso en su frente, una despedida junto a una frase que ya sabía de memoria "no tardaré" y luego los pasos del hijo de Apolo alejándose, lo quería de una manera increíble, pero quería ser su prioridad, al menos una vez quería ser su prioridad, habían más hijos de Apolo ¿por qué el siempre tenía que hacerlo todo? Que lo hiciera otro y que Will se quedará a su lado.
   El sol comenzaba a esconderse, Nico abrazaba sus piernas observando lo maravilloso del espectáculo, ¿Percy vendría a visitarlo? ¿Debería devolver su sudadera?

Can't help falling in love with you (Percico)Where stories live. Discover now