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- ¡Enseguida! - gritó a quien quiera que estuviese golpeando la puerta repetidamente, al ver quién se encontraba al otro lado, cualquier reclamo que iba hacer se desvaneció en su garganta.

Esos ojos. Ese intenso color miel adornado de espesas pestañas, el alfa no confundiría esa mirada, sin importar cuanto tiempo pasara. Sentía la necesidad de rodear lo con sus brazos y no dejarlo ir, como si hubiese encontrado aquello que llevaba buscando por muchos años-

- ¿Zayn? - su voz sonaba más gruesa, Liam ya no era el pequeño de mejillas sonrosadas que recordaba, era de hombros anchos, mandíbula definida, le ganaba por al menos veinte centímetros de altura y era un alfa y... estaba allí - Dios, eres tu - lo abrazó, el pelinegro le correspondió segundos después.

Canela ¿Desde cuándo Zayn olía así?  Ese dulce aroma solo podía pertenecer a un omega. Mientras que el moreno se dejó embriagar por una familiar aroma, el de los alfa era intenso en comparación al de los omegas, el de Liam lo era, pero al encontrarse tan cerca de su cuello éste se suavizó, hasta la delicada esencia.

- Liam - el castaño lo estrechó un poco más cerca, habían pasado casi siete años desde que lo escuchó pronunciar su nombre, su voz seguía igual de dulce, ahora armonizaba a la perfección con su aroma, Zayn deshizo el abrazo solo lo suficiente para poder verlo a la cara - ¿Qué estás-Cómo llegaste hasta aquí? - se corrigió - Ven - le permitió entrar a la casa, lo condujo hasta la sala sosteniendo su muñeca.

- Vengo a visitar a un amigo... me dio esta dirección, tal vez lo escuché mal - dijo sacando el celular del bolsillo de sus jeans. - Debería llamar a Peter.

- Oh - venía a ver a Peter, por supuesto ¿cómo iba a visitarlo a él sino hablaban hacía años? Pero entonces Liam era el amigo del que Peter le comentó ¿por qué no sabía que se conocían? - No -  le dijo al ver que el alfa llevaba el teléfono a su oído - Es aquí - se sintió repentinamente incómodo, su omega interno estaba inquieto - Peter es mi esposo, llegará pronto - miró hacia sus manos sobre su regazo  - ¿Quieres una taza de té?  - se levantó

- Claro. Te ayudo. - ofreció poniéndose de pie.

Las cosas se tornaron menos mecánicas cuando estuvieron en la cocina, varios recuerdos tomando vida, Zayn rió contagiando al castaño.

***

- ¿Amor? - el beta entró sonriendo, la risa de sus esposo se oyó desde la sala acompañada de otra vagamente familiar, se dirigió allí - ¿Liam? no creí que llegarías tan pronto

Si era sincero, estaba algo sorprendido de ver a Zayn tan cómodo con su amigo, solo por el hecho de que fuese un alfa, nunca se sintió realmente cómodo en presencia de ellos.

- Peter - el chico estaba frente a él, Liam de pie junto al sofá

- Hola amor - dejó in beso en su mejilla - Liam ven aquí - dijo extendiendo sus brazos. Después del típico ¿cómo estás? ¿cómo va la mudanza?  Peter tomó asiento junto a su esposo, reposando el brazo detrás del moreno, deshaciendo el nudo de la corbata con su mano libre. - No creo que sea necesario presentarlos - comentó

- No, en realidad no - Liam le sonrió al moreno - nos conocimos hace mucho.

- Nunca me dijiste que eran amigos - habló el pelinegro dirigiéndose a él.

- No sabía que se conocían - contestó el rubio.

- Mm, estoy bastante seguro de haber mencionado a Zayn más de un par de veces - habló el castaño.

- Creí era otra persona - aclaró encogiéndose de hombros - ¿De dónde se conocen? -  algo celoso de la afinidad que percibía entre alfa y su omega, el verlo tan sonriente frente a un alfa le molestaba más de lo que le gustaría admitir si importar que lo conociera y fuese su amigo.

Not a Good Moments for Good News - ZIAMWhere stories live. Discover now