Pure Imagination •Kirito y tú•

15:Problema.

Las montañas flotantes, un lugar muy conocido en ALO por ser el principal sitio para blandir alas. Es un sitio muy popular entre las hadas, puesto que aquí, la facilidad para aprender vuelo es muy efectiva. Por eso, al ser tan visitado, permitieron su ingreso a todo público. 

Estaba reposando en una enorme roca, solo para observar el paisaje espectacular y a las hadas blandir sus alas. Por suerte, no había muchos usuarios en este momento y estaban bastante lejos de nosotros, en las pequeñas islitas verdosas que flotaban alrededor de la gran montaña. Otros se encontraban más próximos a las orillas, a una gran distancia. 

—¡Pequeña-chan! ¡Mírame! —Klein hacía piruetas en el aire. —¡A qué te impresioné!

—¡Eso no es nada! —Se entrometió velozmente Rika, acorralando a Klein con su impresionante arma. —¡Presta atención a esto, pequeña-chan, porque te servirá en el combate!

—¡Guaaa! ¡Espera, no estoy preparado!

—¡Vamos! ¡Pelea! 

Así que eso es un combate al aire. Que impresionante...

—Que cara. ¿Te sientes bien?

—La verdad n.. ¡sí! —Respondí de inmediato.

—¿En serio? Pareces estar en las nubes. —Me miró. 

¡Que susto! ¿Cuándo fue que Kirito se sentó a mi lado? De todas las personas...

Disimulando, me alejé un poco de él. El lo notó, porque frunció el seño.

Trataba de interrogarme. —¿En qué pensabas? 

—En nada. —Contesté. 

—¿Segura?

—Soy la única que conoce mis pensamientos, ¿como no voy a estar segura? No sé por qué haces preguntas tan obvias. 

Kirito sonrió falsamente, incluso llegando a reírse de la amargura. Me pregunto si se habrá molestado. En realidad, esperaba que se molestara conmigo, al menos esa era una forma de distanciarme, puesto que lo que menos deseo es relacionarme más de lo que ya estoy con él.

Después de lo que ocurrió ayer, prefiero simplemente no entrometerme...

Observé a la carismática Asuna, quien practicaba esgrima con Leefa. ¡No puedo creer que me haya metido en un matrimonio! Si ella se entera de ese beso...

De repente, ella me miró. Luego posó los ojos en su novio. Tan pronto como lo hizo, di otro golpe de distancia. Kirito se dio cuenta, cambiando de cara rápidamente.

—Es la segunda vez que te alejas. ¿Qué te pasa?

—...

—¿Ahora ya no quieres ni hablarme? ¿Estás enojada conmigo o qué?

—No. 

—¿Entonces?

—Es solo que no me agradas.— Contesté. — y te odio. —Agregué. 

Sin mirarle, me distancié aún más. Kirito no entendía nada, nada de nada, lo cual aumentó más sus humos.

—Mocosa. —Dijo entre dientes.

Está bien, moléstate, no me importa. Prefiero caerte mal de todos modos, ¡ahora que me enteré que estás casado! ¡Menudo problema! ¡Menudo jodido problema!

De un salto, salí de la incómoda roca. Kirito ni se inmutó.  

Avancé hacia Leefa, preguntándole si me podía enseñar a usar las alas. Por lo que me dijo Sinon, Leefa es la usuaria con más experiencia en el vuelo, además de ser la primera en el grupo en estar en ALO. Sería una gran ayuda para mi.