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Ha pasado un mes, no puedo creerlo...aquel día que encontré ese estúpido robot no creí que me traería problemas, pero desde entonces cuando me acerco a algunos aparatos, fallan o hacen cortos; sabía que era cuestión de tiempo para que el tío Ford o alguien más se diera cuenta, pero no pensé que pasaría tan rápido y tampoco que solo por eso me dejara fuera de sus proyectos, ¡Incluso de mis propios proyectos! Es muy frustrante, llevo un mes aburriendome a causa de ese estúpido accidente, un mes en el que solo lo veo entrar y salir del laboratorio, pero eso si, he notado también que una vez a la semana desaparece varias horas y no sé a dónde va. El tío Stan no me quiere decir nada cuando le pregunto y Mabel cambia el tema, ella me dice que no importa, que el tío Ford sabe lo que hace, y yo al principio creí que quizá ella no sabía lo que él hacía, que quizá por eso no me decía, pero mientras más los observo, más me doy cuenta de que sí lo sabe y solo lo ocultan. ¿Por qué todos me ocultan las cosas ahora? Jamás habían sido así conmigo...

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Frustrante...Dipper había dado con la palabra indicada a su situación, y no era para menos. Antes era la mano derecha de su tío Ford, siempre había sido su consentido, así como para Stan lo era Mabel; cuando despertó de aquel "accidente" era justo eso lo que le preocupaba, que lo trataran diferente de alguna manera, pero eso no pasó. Sí, los primeros días lo cuidaban bastante pero más tarde se dieron cuenta de que no había razón para hacerlo, él era fuerte y estaba lleno de vida...en cambio ahora, solo por tener fallas con las máquinas, lo trataban como si fuera sospechoso de un asesinato; en cierto punto comprendía que tuvieran miedo a esos temas, considerando la situación en el exterior, pero no comprendía porque se ponían así hasta por acercarse a la calculadora.

Después de soportar tres días así, Dipper se encerró en su habitación sin querer hablar con nadie, se puso en una especie de huelga silenciosa. Su tío ya le había prohibido entrar al laboratorio, seguir con sus proyectos, luego lo alejaron de los aparatos, eso ya era demasiado considerando que se despertaba con la alarma más básica que podía existir, por ello decidió encerrarse. 

Al principio lo vieron como un simple berrinche y no iban a darle mayor importancia, pero al día siguiente Mabel fue a llamarlo para el desayuno y solo recibió una negativa, lo mismo para el almuerzo y la cena. Esto los preocupó, pero solo le dieron su espacio, quizá necesitaba pensar las cosas; sin embargo, al día siguiente tampoco salió, ni al siguiente, fue entonces que intentaron convencerlo de salir, y cuando nada resultó se decidieron por el camino más sencillo: usar la llave y simplemente abrir la puerta para poder hablar seriamente con el chico.

-Tío Ford, tenemos un problema..-habló Mabel en voz baja acercándose a la puerta donde los mayores aún esperaban razonar con el chico.

-¿Qué pasa Mabel?..-el genio ni siquiera se giró a verla, se mantenía de brazos cruzados viendo la puerta y tratando de pensar como convencer a su sobrino de salir.

-...Es que...la llave no está...-habló en un tono aún más bajo.

-¡¿Qué?!

-...No estarán buscando la llave de mi habitación, ¿o si?

Una pequeña risa se escuchó del otro lado de la puerta, ahora era obvio que había previsto lo que harían y se llevó consigo la llave, ahora no tenían como sacarlo sin derribar la puerta. Ford estaba a punto de ir por sus herramientas para quitar las bisagras cuando un corto se escuchó del otro lado junto a una pequeña exclamación por parte del menor, Stand ya no tuvo paciencia ante esto y de una sola patada tumbó la puerta.

-¡Dipper! ¿Estás bien?-se apresuró a entrar su hermana pero se detuvo apenas lo vio en la cama, rodeado de pequeños circuitos y mini robots que él mismo había hecho con lo que había encontrado, sin duda era inquieto e ingenioso.

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